Inestable

5. Chandelier

Llevaba un largo rato escuchando diferentes voces, desde un tipo conocido como Ricky hasta una extrovertida pamplonesa llamada Amaia. Todos cantaban exageradamente bien desde su punto de vista. Veía que no se equivocaba, pues Paula, sentada a su derecha, le susurraba lo que le parecían las voces de aquellas personas. Y eran cosas buenas, desde luego.

Estaban escuchando a un joven, cuyo nombre no recuerda (¿Agony, Agonías?); cuando percibió la atención de Paula hacia la parte trasera de la sala. Apoyado en la pared se encontraba un chico, no aparentaba más de veintitrés o veinticuatro años. Su pelo era negro a la par que rizado.

Su amiga lo animó a cantar cualquier canción, y reconoce que sintió cierta curiosidad por verlo desenvolverse en el escenario. Cogió prestada la guitarra de Paula, gesto con el que rió internamente. ¿Quién se olvida de su instrumento el día de la audición?

Carraspeó y comenzó a tocar. Conocía esa melodía. Say something.
Una voz rugosa pero increíblemente íntima inundó el lugar, y provocó que se me pusieran los pelos de punta. Cantaba muy bien.

Al terminar de cantarla, y opinar sobre ello, Paula me sorprendió proponiéndome salir y hacer lo mismo. Por un momento quise echar a correr y esconderme en cualquier cafetería de la zona, pero algo en mi interior me obligó a asentir y levantarme. No podía creer que fuese a cantar en público por primera vez. Mi anterior novio, Mark, decía que no tuviese ilusiones, como yo habrían otras doscientas por todo el país. Y ñe creí, quedando completamente apartada de la música. No fue hasta que Paula me ofreciese ir con ella a Acordes, que mi gusto por la música me impulsó a retomarlo.

- Vale, voy a interpretar Chandelier, de Sia. - Acaricié las teclas del piano, estaba preparada. Noté las miradas sobre mí. "Hazlo bien, Aitana. No los defraudes." Pronuncié las primeras palabras.

- "Party girls don't get hurt.

Can't feel anything, when will I learn?

I push it down, push it down.

I'm the one "for a good time call."

Phone's blowin'up, they're ringin' my doorbell.

I feel the love, feel the love.

One, two, three, one, two, three, drink;

One, two, three, one, two, three, drink;

One, two, three, one, two, three, drink.

Throw em back, till I lose count

I'm gonna swing from the chandelier  from the chandelier.

I'm gonna live like tomorrow doesn't exist.

Like it doesn't exist.

I'm gonna fly like a bird through the night, feel my tears as they dry.

I'm gonna swing from the chandelier, from the chandelier...

Pronuncié el último chandelier con el corazón encogido. Sentía todas y cada una de las palabras de esa canción. Porque nunca nadie tuvo en cuenta mis sentimientos. A menudo me veía como una marioneta que utilizaban cuando les convenía. No me gustaba mi cuerpo. Era muy delgada, sin curvas. Apenas tenía pecho. Por no hablar de mi frente, la cual era mejor cubrir con el flequillo.

Estaba tan medita en la canción que ni me di cuenta de los aplausos de los demás. Reaccioné ante el ruido. Paula vocalizó con los labios un "No me habías dicho que cantases tan bien", a la vez que sonreía.

Y lo vi.

Nuestras miradas se cruzaron entre la multitud. Ahí pude ver el color de sus ojos, intensamente negros. Transmitía asombro y emoción. No creía que llegaría a emocionar a alguien en mi vida.