Reflexión aerea.

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Ya anocheció,

las horas pasan volando cuando estoy en el cielo,

me intriga saber lo que me espera al bajar,

me da miedo no querer volver,

me da miedo volver,

me da miedo volver y que todo siga sin tener sentido,

me da miedo seguir atormentandome.

Quiero poder vivir en paz,

quiero poder disfrutar la existencia y lo único que no me lo permite son las tensiones que se generan en mi mente,

creo que eso que me perturba tiene que existir en mi cabeza pero no en exceso,

no creo que esté mal el pensamiento,

creo que empieza a estar mal cuando lo pienso excesivamente.

Quiero cuando vuelva poder tener la mente en blanco,

y parece absurdo decirlo,

tambien me cuesta un poco aceptarlo,

pero quiero poder disfrutar,

quiero poder ver cada día como una nueva oportunidad para crear,

quiero poder encontrarle un sentido a mi existencia,

quiero poder expresarme,

quiero poder ser,

el unico obstáculo que encuentro que no me permite ser plenamente es mi cabeza,

mi cabeza que no para de querer entender,

que no puede estar sin procesar información,

que no puede dejar de pensar,

y asi,

tampoco me permite estar,

disfrutar.

No es que me moleste ni me disguste pensar,

me molesta y me disgusta el excesivo pensamiento,

tan excesivo que me limita a casi cualquier actividad,

hasta la no actividad.

Sea cual sea mi circunstancia casi nunca puedo vivirla plenamente,

por mi constante estado de pensamiento,

por mi atención en mi cabeza y en mis ocurrencias,

quizás también en la creencia de que los mismos son reales,

cuando son solo suposiciones,

creaciones basadas en la realidad,

pero no te equivoques,

no son la realidad.

La realidad es lo que ven tus ojos,

la realidad es lo que se siente en la piel,

la realidad es lo que soy,

los pensamientos son formas de ver lo que es.

Es lo que es.

Un pensamiento es un pensamiento,

la realidad es la realidad.

Mas allá del concepto que cada uno tenga de realidad.

Para mí la realidad es la paleta de colores y una hoja en blanco,

las notas e instrumentos,

sumándole la presencia que oye u observa,

sumandole la presencia que crea.

La realidad es cada respiración,

mi mente no puede abarcar la realidad,

por eso se cierra en un solo pensamiento,

se encapricha.

Odio que se encapriche.

Si me cierro en un solo pensamiento no me puedo abrir a otros,

si mi atención está puramente en un pensamiento repetitivo me pierdo de cada segundo,

ya no aguanto más este pensamiento que me consume.

Quiero renovar,

quiero soltar,

quiero abrir mi mente,

quiero que entre la escencia de la vida,

o de la muerte.

Quiero volver renovada.

No quiero volver a ver la vida con matices grices existiendo tanta variedad de colores.

Quiero poder ver la vida grisácea tanto como rosada y tambien verdosa.

Quiero poder ver la variedad de colores.

Quiero poder mirar de un modo optimista,

más allá del pensamiento optimista,

quiero nunca volver a sentir ganas de morir,

de desaparecer.

Quiero poder transformar,

no quiero volver a escapar.

Mi realidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora