Pov Juliana
_¿Qué pensaste sobre la universidad mamá?_ nos mudamos hace dos horas a Argentina y todo porque mi madre se enamoró de alguien por Internet y digo alguien, porque aún no lo he visto. No ha aparecido por la casa, no tengo idea de si existe o de si es un humano. Aunque creo que ellos si se han visto, estuvo en México y fue quien nos pagó el viaje y todo eso. Pero no tuvo la decencia de querer conocerme, ni de ir a buscarnos al aeropuerto cuando nuestro vuelo llegó. No entiendo nada y creo que mi mamá me está ocultado algo más. Lo que si sé con certeza, es que dejé toda mi vida en México. Mi cuerpo está aquí, pero mi alma sigue allá_ te estoy hablando mamá_
_ Ya te dije que no vas a estudiar Juliana, tienes que empezar a buscar un trabajo. Hablaré con tu pad_
_¿Mi qué? Él no es mi padre, por lo menos ya se que es hombre y que si existe_ la interrumpí soltando un gruñido, esto es el colmo. Mejor nos hubiéramos quedado en México, aunque estuviéramos viviendo con nuestra abuela. Allá era más feliz, tenía mis amigos e iba a tratar de iniciar la universidad. Pero aquí no podré hacer nada de eso, lo único que me llama la atención es que tengo una habitación para mi sola y que es la primera vez en mucho tiempo que voy a dormir en una cama sin que me pinchen la espalda los alambres.
En casa de mi abuela vivíamos al rededor de ocho personas, y sólo cuatro habitaciones. Comíamos cuando se podía, teniendo que compartir cama. Habitación, todo en realidad. Teníamos que vivir ahí, porque lo poco que mi mamá se ganaba trabajando en un bar no alcanzaba para pagar algo más. Todo sería diferente si supiera quien es mi padre, pero no tengo idea y creo que ella tampoco sabe quien es.
_ Si es tú padre, porque gracias a él ahora tienes donde dormir y vas a comer decente. Así que termina de desempacar lo poco que tenemos_ en lo único que tiene razón es en que tenemos pocas cosas para desempacar. Sólo dos cajas pequeñas y una maleta.
Asentí subiendo las escaleras hacia la habitación con la caja en las manos, en donde tengo mis cosas. No pude evitar soltar un par de lágrimas al ver la habitación, una cama. Con una mesita al lado, un closet. ¡Y tiene ventanas! ¡Tiene ventanas! ¡Y un abanico! Oh cielos, tiene un abanico.
Dejé la caja en el suelo, acercándome a la cama. Pasé la mano por ella, sintiendo su suavidad. La textura y confirmé mis sospechas cuando me tiré de espaldas encima de la cama. Es más que suave y los alambres no me van a molestar. No conozco al nuevo novio de mi mamá, pero es lo mejor que han hecho por mi en toda mi vida. Sin contar que jamás había viajado en avión, todavía siento los nervios y lo primero que hice al bajar, fue vomitar.
_ ¡Ventanas! ¡Si!_ me bajé de un salto, caminando hacia la ventana. En la habitación de la casa de mi abuela no habían de esas, ni habían puertas en las recámaras_ esto es más que increíble_ dije para mi misma muy emocionada. Rodé el cristal sin borrar mi sonrisa aún con lágrimas en los ojos, lo sé. Es raro, pero son lágrimas de felicidad.
Me di cuenta de que había una chica en la casa de al lado, estaba en su habitación. Luego se levantó de la cama colocándose frente a la ventana, su mirada se cruzó con la mía. Tiene unos hermosos ojos azules, pero luego sus ojos estaban en mis pechos... así que fruncí el ceño, tendré una vecina acosadora. Genial, eso es increíble. Pero aún así le dije hola haciendo un movimiento de mano, lo ignoró por completo cerrando su ventana y volviendo a acostarse. ¿Qué le pasa?
_ ¡Juliana! ¡Ven! ¡Juliana!_ rodé los ojos ante la gritadera de mi mamá. Bajé casi que corriendo las escaleras, encontrándola en la cocina_ ya que tanto quieres ser chef. ¿Por qué no me ayudas a preparar algo?_ fue lo primero que dijo cuando llegué a donde ella y si, quiero ser chef profesional. Es lo que más anhelo, por lo menos ya terminé la preparatoria. Con mucho trabajo, pero lo hice. Tengo la esperanza de que mi madre me deje continuar con mis estudios.
Cuando estaba en México trabajé en un restaurante, ahí fue cuando me enamoré de la gastronomía. No voy a decir que soy buena en la cocina, pero si me defiendo. En la mañana iba a clases y en la tarde iba al restaurante hasta las tres de la mañana. Lo único malo es que todo mi dinero era para la casa, tenía que entregar todas mis ganancias a mi mamá y ella se las pasaba a mi abuela. Pero por lo menos en el tiempo que estuve trabajando en el restaurante comía bien, sólo fueron un par de meses. Los mejores, hasta hoy. Diría que hoy si es el mejor día de mi vida, claro está. Eso puede cambiar. De ahora en adelante sólo disfrutaré el momento.
_ Claro ma. ¿Qué tienes pensado hacer? ¿Y cómo es que conoces la casa tan bien?_ le pregunté eso último al ver como ella se mueve con agilidad en la cocina como si conociera todo.
_ Por las vídeos llamadas mensa, me mostró la casa y en donde está todo. Él llegará en dos horas, está con su ex-esposa_Mi madre si que será estúpida... creo que escuché mal, pero ella dijo ex-esposa... y lo dijo muy tranquila. Dios, ella tiene que estar bromeando_ Quiero hacerle unas tortillas con huevo, pero no hay. Anda donde los vecinos y diles que te presten dos huevos_ dijo, mientras sacaba un sartén. Trágame tierra..._ ¡Anda ve!_ me gritó, sólo asentí saliendo de la casa para ir donde los vecinos.
Que vergüenza, ella cree que seguimos en México. Aquí es diferente por lo que pude ver. Además, no creo los vecinos sean tan amables como allá. Y más con la que me tocó, una acosadora... Pero no puedo llegar sin los huevos, si no. Se va a enojar y me volverá a pegar como la última vez que no hice lo que me pidió. Así que sólo toqué el timbre varias veces, esperando impaciente.
Suspiré aliviada cuando abrió la puerta, me quedé en silencio cuando ella me miró. Pero no me estaba mirando a mí en específico, estaba mirando por encima de mi hombro.
__ ¿Quién es? ¿Hay alguien ahí?_ dijo colocando las manos al frente, ahora entiendo. Es ciega... con razón... ahora me siento mal, pensé mal de ella. La chica guapa es ciega, creo que si hay personas con más problemas que yo. Pero es hermosa y su acento es hermoso y si, me gustan las chicas desde siempre. Aunque sólo he tenido cuatro novias, por suerte mi madre nunca se ha enterado. No quiere que tenga novio, me imagino que tampoco novia. Mejor no le pregunto, aunque ya soy mayor de edad y todo eso. ¿Pero eso qué importa? Si me aparto de ella no tendría a donde ir, además del miedo que le tengo. Por eso quiero estudiar...
_Hola, disculpa. Soy tu vecina, me acabo de mudar con mis padres_ dije rápidamente cuando estaba a punto de cerrar. Si, le dije que con mis padres. Siempre quise decir algo así. "Mis padres" aunque aún no conozco al tal chino, pero será mi padrastro.
_ ¿Y qué se te ofrece?_ Me preguntó de forma muy educada, sonreí triste cuando bajó su cabeza. Creo que le da vergüenza o algo así no saber a donde mirar.
_ Es que mi madre, umm yo. Bueno, huevos y--- inhalé aire tratando de no estar nerviosa. Pero es que me da vergüenza pedirle huevos...
Ella sólo rió entre dientes volviendo a levantar la cabeza y juro que tiene una risa muy hermosa_ ¿Huevos? ¿Necesitas huevos?_
Asentí, pero luego me acordé de que ella no me puede ver. Me di una cachetada interna por mensa_ sí, prometo que luego te los devuelvo sanos y salvos_ ella volvió a reír, como que le gusta demasiado eso... Aunque no me molesta.
_ Ya regreso. ¿Cuántos necesitas?_
_ ¡Dos!_ le grité cuando ella se giró supongo que para ir a la cocina. Quise ayudarla, o al menos entrar. Pero no creo que sea de su agrado, además ella ha de conocer su casa a la perfección. No creo que necesite mi ayuda...
_ Aquí están_ los tendió hacia el frente e inmediatamente los tomé de sus manos.
_ Más tarde se los regreso señorita_ le dije sonriendo. ¿Para qué le sonrío si no me puede ver?.
_ No es necesario, pasa un buen día_ dejé salir el aire que estaba reteniendo cuando ella cerró la puerta, tal vez no fue mala idea venir a éste país... Tal vez ahora todo estará mejor.
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No sé si llorar por Val o llorar por Juls 😭😭😭
