• La nueva Faceta de Lisa •

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Un fuerte tono carmesí se formó en la cara de Jennie por tan  atrevida pregunta para su gusto

—¿P-Porque lo dices Manoban?— Su nerviosismo la hizo tartamudear —E-Esa p-pregunta es m-muy atrevida para mi gusto—

Lisa sonrió con malicia y siguió acariciando la clavícula de Jennie, sonriéndole de una manera Tan perversa que hasta en sus poros se veía la excitación que le causaba la de ojos felinos

—¿Entonces es un si?— Se rio por lo tierna que se veía la morena al preguntarle anteriormente —Jennie a la velocidad a la que vamos es algo que tú quieres, ¿no?, siempre has estado sola y ahora que llegue he puesto mis ojos en ti, como si tú fueras un trofeo y yo quisiera ganarlo... Eres un trofeo que me ha dado la vida— agarro con fuerza la cintura de la coreana, exaltándole.

Con el rubor hasta los pies, pensó en qué tal es tenía razón, ella siempre ha estado sola, sin pareja, sin alguien que la cuide... sin amor y está era la oportunidad de tener algo con Lisa como siempre lo anhelo...
La castaña rodeó con sus brazos el cuello de la tailandesa haciéndole parecer segura aunque en realidad estaba un 200% nerviosa, al hacer dicha acción la tailandesa no tardó en jalarla a un callejón donde nadie las vería besándose sin lastima, hasta hacer que los labios de las dos quedaran rojizos.

La castaña se sorprendió y le miró una sonrisa en conjunto de un ronroneo tan excitante que hizo que el amiguito de Lisa despertara Ferozmente haciendo chocar con la intimidad de la castaña

—Mira quien se ha levantado del sueño eterno—Rio y instantáneamente miro a Jennie para ver si reacción — No te molesta cierto, mi amiguito está hambriento cariño — La tailandesa puso un puchero

Jennie se había quedado atónita por tanta excitación y confusión que le provocaba la tailandesa pero en cambio no le importó ya que pensó que sería mejor dos métodos de excitación (JAJAJA, Estoy jodida escribiendo esto)

—No me importa en lo absoluto Manoban, me encanta— sonrió con malicia y bajo su mano para acariciar el pene de Lisa haciendo que Lisa de un Jadeo de excitación— ¿Te gusta cariño?— sintió el agarre de Lisa hacerse aún más firme por

— ¡Ahh!, Kim me estás matando, ¡dios! — Le agarro con sus dos manos las caderas de la castaña haciendo que su miembro rosara la intimidad de Jennie haciéndole gemir de placer, La tailandesa ahogó sus gemidos besándola y haciendo la acción anterior con más firmeza, la intimidad de La castaña estaba tan palpitante al igual que el miembro de Lisa

Las dos, hundidas en olas de deseo se limitaron a seguir por unos minutos más olvidando todo lo que les rodeaba y sin importarles las personas que frecuentemente pasarían sin previo aviso, la castaña tenía su intimidad mojada y palpitante mientras que en el otro lado la tailandesa tendría la su miembro bastante duro y erecto por la causa de unos ojos Felinos y un cuerpo tan sexy como el de Jennie Kim, su actual víctima que cayó rendida sus pies

De pronto se escucharon unos pasos que provenían del restaurante de al lado, un restaurante de comida Italiana bastante reconocido.

La tailandesa reaccionó y arrastró a Jennie a un basurero ocultándose detrás y tapándole la boca a la castaña para que no emitiera ningún ruido

—¿Quien anda ahí?— Dijo un hombre canoso de alta edad que por supuesto no veía bien y mucho menos con la poca luz que iluminaba el callejón— Dio una última mirada y se fue lentamente por la misma dificultad de caminar por la avanzada edad que tenía el hombre

Se dejaron de escuchar pasos y solo se escucharon los cláxones de los autos y personas hablar en el restaurante, Lisa dio una mirada discreta a exterior del callejón y le sonrió a Jennie la cual hizo lo mismo

—Es todo por hoy Jennie Kim— le acarició su mejilla y la besó de una manera hambrienta pero corta a lo que la castaña correspondió — se puso más cerca hasta llegar a su oído y de esta manera le susurró— Nada de hablar sobre nuestra relación Kim,¿okay?— la miro con una cara de seriedad

—E-Esta bien Manoban,— le dio un beso corto la mandíbula y se levantó de donde estaba sentada—

Las dos se despidieron  y la castaña se sentía Tan feliz con ganas de gritarle a todo el mundo que tenía una relación, en cambio la tailandesa sonreía con malicia porque si Plan sucio había comenzado de la manera más fácil como haberle robando un dulce a un niño.

¿Me sigues amando? - JenLisa G!P Donde viven las historias. Descúbrelo ahora