Molestas Interrupciones - South Park [Staig]

Tres

Nota de relleno: Amo el café 🍵

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No se lo diría directamente, pero es tambien gracias a Clyde que decidió por lo menos intentar hacer algo al respecto sobre sus sentimientos envés de mantenerlos ocultos por tiempo indefinido. Pues si se lo proponía, podría durar años sin decir nada y solo observar las consecuencias de su cobardía mientras es destrozado por dentro.

Vivir en doloroso silencio.

Je, eso sonaba muy trágico, ademas de patético. No se ve asi mismo en dicha situación. Prefiere llamar a Cartman amigo antes que seguir ese estilo de vida.

Y si lo piensa bien... Él tiene ventaja sobre casi cualquiera, esta seguro de ello. Sus avances con Stan no empezaron esta semana, ni este mes. Lleva un buen tiempo preparando el terreno, y asi mismo. Aun si recibe un no como respuesta, lo volvería a intentar. Sus posibilidades seguirían altas, y quiza subirían aun mas. No se rendiría tan fácil ante un posible rechazo inicial.

— ¡Me gustas!

Se detuvo antes de doblar la esquina, con ambas manos ocupadas cargando un par de sodas frías. Simples palabras le hicieron detenerse al instante, sintiéndose incapaz de poder moverse, y a la vez le provocaron un caos interno, lleno de pánico sin solución aparente.

— Pienso que eres genial... Un chico amable y gentil... — la chica se notaba nerviosa, insegura. Seguramente ni lo veía a la cara.

— Es lo mismo — murmuró para si mismo, refiriéndose a los elogios, ambos sinónimos del otro. Iguales.

— Se que eres alguien generoso con todo el mundo, te admiró mucho por eso — Admitió la joven enamorada ya mas motivada. Aun apostaba que mantenia la mirada baja, desperdiciando la oportunidad de ver esos hermosos ojos azules de cerca.

— He... ¿Con todos? ¿Enserio? — su sonria era torcida, queriendo reir con malicia por lo gracioso que le parecía.

Stan no es ningún buen samaritano que vela por la vida de cualquiera. Para toda buena acción hay una razón, ya sea personal o no. Él no movera un dedo por nada, ni nadie que no lo valga.

— y tambien eres tan honesto — alcanzó a oir el suspiro soñador. Rodo los ojos por tanta irritante inocencia.

Por un momento se compadeció de Stan por tener que soportar escuchar tantas idioteces, pero luego recordó lo mucho que le molesta ser comparado con un perfecto príncipe azul.

Sip. Esa chica o terminaría en lágrimas o haría una rabieta después de ser rechazada tan cruelmente.

Porque Craig conoce a Stan. Sabe que esperar de él.

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— Duele... — se quejo sin ganas Stan cuando Craig presiono la fria lata contra su rojiza mejilla, la que había sido abofeteada.

Tucker esta haciendo un gran, gran esfuerzo por no ir tras la maldita bruja atrevida desvergonzada mal agradecida. Comparado con otras veces, Stanley fue piadoso, y aun asi se atrevió a levantarle la mano. Ya se encargaría luego de ella. Esto tampoco no quedaría impune.

— ¿Prefieres una gasa? — consulto, retirando la soda reemplazándola con su manos, pasandola por la oreja y cabello del otro despacio, como una caricia. Aparentó concentrarse en examinar el golpe, cuando en realidad admiraba el bello rostro, aun estando lastimado, y disfrutando del contacto con la suave piel y cabellera.