Las caricias fueron mi ruina,
vendí un amor sin medida,
sin saber a donde yo iba.
El destino marcaba mi suerte, vaya que fue un error quererte,
tenerte entre mis brazos, enredados en cortinas,
nuestro amor florecía, pero todo lo vacié en una cantina.
Si pudiera tenerte una vez más, arreglaría mi pasado,
enterraría mis sentimientos la primera vez que me dejaste muerto.
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Después de Diciembre
PoésieA lo lejos se escucha el lamento de un hombre desolado, pues en esta noche te vas de su lado, sus lagrimas emanan, escurren hasta el suelo en donde ve el reflejo de su dolor, con un corazón destrozado, la tinta y el papel son su única compañía, tex...