1.0 BLUE BLOOD ©| COMPLETA|

CAPITULO 19: REPLICANDO VILLANOS.

Nota autora: este capítulo está narrado por 3 personajes :3

pd: este ha sido un capitulo muy complicado de re-escribir para mi perdonen mi demora.

(ACTUALIDAD)

—voy a volver por ti...

—No...

Una voz... ¿me llaman? No lograba ver nada, solo había oscuridad, mi cuerpo se sentía tan pesado que por un momento creí que estaba cayendo en un pozo sin fondo.

—regresarán por ti...

Una voz tan ronca y profunda... no la recordaba.

—No. ¿Quien eres?

No había nada, solo había oscuridad, la voz no volvió a hablar y sentí miedo por completo ¿estaré de nuevo en aquel juego? Pero mi miedo se esfumó cuando solo unos ojos azules se hicieron presentes, dejándome anonadada y con miles de preguntas que se fueron tallando en mi alma.

—volveré por ti, reina.

Desperté sobresaltada, sintiéndome extraña, mire a mi lado, había un hombre blanco de cabello pelirrojo acostado, sus ojos cerrados...

Mire mis manos, las imágenes golpeándose en mi mente, como una ruleta que solo me hacía ver sus ojos, sus rostros; Mis manos temblaron, me quedé observando el techo estática con el corazón latiendo a millón.

¿Es esto un sueño? ¿Estoy metida de nuevo en sus juegos acaso?

Abrí mis ojos, Pero la sensación de su cuerpo a mi lado era muy real.

—Esto no es real...

Es muy real...

La voz..., me levanté sobresaltada, todo giro a mi alrededor, Una electricidad entera me recorrió el cuerpo, mis manos temblaron la ansiedad, se abrió como un agujero negro en mi pecho, puse los pies en el suelo, y me fui de bruces contra el suelo pero, quede estatica en el aire.

Él me sostuvo.

Su mano, se enroscó con tal fiereza en mi ropa, Jadeé al ver el suelo a centímetros de mi cara. Cómo en el maldito sueño, el me sostuvo, la fuerza hizo que mi ropa sonara.
Me tomo de mis brazos, devolviendome a la cama.

No salía de mi estupor.

Esto es muy real, esta, soy yo, está fui yo.

sus ojos rojos, entraron en mi campo de visión como en mi sueño, me miraron igual, me hicieron sentir igual, la melancolía y la tristeza me consumió entera mientras el ponía sus manos con una delicadeza impalpable a los lados de mi rostro.

Eso resolvía la respuesta de sentirme atraída a él... A ellos.

Sus ojos azules se adueñaron de mi mente haciéndome cerrar los ojos, sintiendo su respiración sobre mis labios.

—Has recordado.—Afirmo él.

Apreté las sabanas, mis piernas comenzaron a temblar, el frío alojandose en mis pies.

El pánico, bordeando cada letra de lo que iba a pronunciar.

—¿Es real?—Dije después de un momento.

Su silencio nos lleno a ambos.

—¿Que has recordado?—pregunto despacio.

Su cuerpo se alejo del mio, sentándose en la cama, viéndose como un niño menos como un hombre, me quedé rendida en la cama apretando las sábanas, sofocada. Cansada, hostinada, estresada, a punto de...