Souvenir

1.2- Las eternas(?)

Recuerdo muy clara la noche en la que llegan a casa avisando que al abuelo lo habian asaltado y golpeado. Las palabras exactas de mi tío hacía mamá y hacía mi fueron: -papá esta mal, lo golpearon en la cabeza y se la abrieron. Ese día, empezó todo.

Luego de que el abuelo se pusiera mejor, y se fuera a vivir un tiempo a casa de mi tía, pensamos que ya estaba bien, que solo había sido un mal rato, y como es caracteristico en mi familia, lo tomamos en humor.

En esos días mientras se recuperaba, sufría de mareos, vertigos y lagunas mentales, inclusive llego a caerse en el baño en varias ocasiones por lo tanto a veces necesitaba de nuestra ayuda para caminar, todos estos sintomas se lo atribuiamos al acontecimiento anterior y que lo más probable es que fuesen secuelas de aquel pesimo "accidente" los sintomas no paraban, sino que por el contrario: aumentaban. Mi mamá, junto con el resto de sus cuatro hermanos deciden mandarle hacer estudios generales y nada salía, al parecer todo iba bien.. Hasta que con un estudio más especifico logramos darle nombre a esos incontables sintomas: Cancér. La vida se me detuvo aquel mes de Octubre, quede atonita, en mi familia gracias a Dios hemos gozado de muy buena salud y nunca antes nos había tocado pasar por algo así y no fue facíl ir asimilando la situación.
Los días pasaban y mamá junto con mis tíos se ponian en marcha para hacer todo lo que estuviese en nuestro alcance. Mentes positivas y con la convicción de que como familia ibamos a salir de eso. Luego de darnos tal noticia, el abuelo (sin él aún saber por lo que estaba pasando) empezo a decaer de forma voráz, ya para Noviembre, estaba en cama.

Días de quimioterapias, de cuidados, de mantenerlo fuerte, fueron pasando, y luego de otros estudios que le tocaban, determinaron que no solo era cancér, sino que también venía acompañado de una metastasís cerebral, para ese entonces, los sintomas de lagunas mentales y de perder el conocimento tenían sentido.

Pesé a que sabiamos lo que iba a suceder, nadie de nuestra familia hablaba de forma negativa. En nuestra familia tenemos un muy buen Doctor como amigo, y recuerdo haberle preguntado: -Cuanto tiempo? A lo que él intento decirme que solo era Dios quien decidía eso, pero yo sabía que él, como Doctor tenía un pronostico. Y yo, al necesitar saber una cantidad, le repetí la pregunta, y me respondío: -Tres meses, con quimioterapias.
Estaba molesta, molesta con la vida, porque Dios solo me permitio conocer a un solo abuelo y no era justo, no me lo parecía a mi.

Toda nuestra familia había escuchado de casos que los pacientes oncologicos los tratamientos los hacen decaer, vomitar, les producen dolor y por supuesto perdida de cabello. El unico sintoma que presento el abuelo fue la perdida de cabello, y recuerdo haberle pedido a mi novio que fuera a cortarle el cabello, para que él no lo notase tanto. El día en que mi novio fue, juro que estaba tan nerviosa, esa escena solo yo la había visto en pelicúlas y ahora tenerla frente a mis ojos fue poco facíl de digerir, los ojos se me cristalizaban y solo me alejaba del momento.
A papá Felipe (porque así le llamabamos) le sento bien cortarse el cabello, pregunto incluso que cuando volvian a cortarle el cabello.
Para esos días, aún conversaba y se reía una que otra vez, incluso puedo recordar tardes en las que me decía que fuese hasta su cama y durmiera un rato con él, que si me daba frío, podía agarrar sus sabanas.

Como familia tomabamos "turnos" para cuidarlo en su habitación, en los momentos en que había que pasarle un tratamiento intravenoso debiamos mantenerle los brazos sujetados porque a él le incomodaba esa sensación y a mi solo se me quebraba el corazón sentir que para él era como si lo obligasemos.

Dejo de comer, nada le apetecia y llego adelgazar casi el 60% de lo que era su peso, hasta que de quimioterapias pasamos a la primera radioterapia y le había caido excelente, el apetito se le había despertado, decía que él podía comer solo y nos llenabamos cada vez más de esperanzas.