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Prefería ser el cazador y no la presa, y era por eso que sabía de las criaturas sobrenaturales y me encargaba de alejarlas de mi hija

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Prefería ser el cazador y no la presa, y era por eso que sabía de las criaturas sobrenaturales y me encargaba de alejarlas de mi hija. La primera vez que mate a un vampiro tenía trece años y William Black me enseñaba a pelear y a defenderme aún siendo humana podía acabar con ellos en una pelea justa. Justo ahora estaba frente a la casa de los Cullen con un arma en mi cintura y mi camisa enrollada hasta los codos. Todos ellos estaban parados en las escuelas desde el más fuerte hasta el más débil y me miraban esperando a que hablara.

-Se que estás asustada por lo que somos -empezo a hablar Edward.

-No me asustan, aún así asustan a los de la Reserva, niños de doce y trece años dejan de jugar a las escondidas por defender sus tierras y si hay algo que odio es cuando le quitan la infancia a los niños.

-¿Más lobos? -pregunto el grandote chocando sus puños y sonriendo con picardía.

-¿Qué puede atraer más licántropos? -pregunté ignorando al chico.

-Vampiros -dijo un hombre rubio y al parecer jefe del clan.

-Pues, pueden deshacerse de ellos? Porque no les gustará ver a más de diez grandes y feroces lobos.

-Son nuevos, neofitos vienen por Bella -me informa una chica bajita.

-Quieres decir que vienes un grupo de neofitos a matar a mi sobrina -dije, ella asintió mientras yo pasaba mi mano por mi rostro con frustración. -Eso traerá a los Volturi.

Empecé a caminar de lado a lado pasando mi mano por mi cabello y luego por mi cara gesto de frustración. Fui detenida por las manos de Edward pero en un momento a otro estaba arrodillado con mi arma en la cabeza. Los gritos de las mujer me trajeron de vuelta alejándome de él y volviendo a lo que hacía antes.

-¿Hunter? -me llamo la adolescente bajita -¿Qué sucede?

-Alex.. hay que esconder a Alex ¡Demonios! -tome mi teléfono marcando al número de mi hija pero me mandaba al buzón -¡Responde!

La volví a llamar y pude oír su voz agitada. Suspiré más calmada volviendo a pasar mi mano por mi cabello.

-¡Mamá!

-¡Cielo amor nena... ¿Estas bien? -pregunte enredando me en las palabras. -¿Ustedes están bien Alexa?

-Vi a papá y no fue a Josh.. mamá.

-Vengan a Forks de inmediato Alex, Bella lo sabe así que dile que hay una emergencia familiar sabes que no puedes decir que sucede. -dije mientras empezaba a sudar. -¡Háblame!

-Mamá, él dijo que nos quiere cerca.. no quiero ir.

-Tendrá que matarme, Alexa eres mi vida, ven con mamá en estos momentos o estarás castigada por el resto de tu vida. Caius no puede hacer nada frente a humanos así que siempre debes estar con mucha gente o no mejor espera a que te busque yo misma..

-Iré a casa mamá, iré contigo a casa se que has vivido tu vida protegiéndome de esto pero confía en mí y cálmate lo te lo bajo control.

-No puedes decirle a una madre que se tranquilice cuando un maldito nos persigue.

-Te llamaré cada tres horas, y estaremos a Forks antes del amanecer.

-Te amo tesoro.

-Yo más mami.. oh llegaron Bella y Jake con la comida les diré.

- Cuídate, los capas negras no te pueden tocar solo los capas rojas pero ellos son perezosos para salir de su guarida de mierda...

-Ya mamá ¡Adiós! -dijo mi hija colgando el teléfono. Me voltee mirando a los Cullen quienes me miraban confundidos.

-Eh aquí Hunter Swan de Vulturi. -dije con gracia.

Hunter Donde viven las historias. Descúbrelo ahora