Forevermore

Capítulo 11: The sound of Reverie

Maratón de fin de semana 1/3

"Let's fall back in love with the world and who we are, and do the things we talked about but never did before. And darling don't blink, because you will and when you open up your eyes again you may not recognize a friend. It may be bittersweet cause we're no longer seventeen, but we're still young so dance with me in naivety and follow endlessly the sound of reverie" (Volvamos a enamorarnos del mundo y de quienes somos, y hagamos las cosas de las que hablamos pero nunca hicimos. Y querida no parpadees, porque lo harás y cuando vuelves a abrir los ojos puede que no reconozcas a un amigo. Puede ser agridulce porque ya no tenemos diecisiete, pero todavía somos jóvenes, así que baila conmigo en la ingenuidad y sigue sin cesar el sonido de ensueño).

Juliana llega a su casa con lágrimas lastimando su piel. No dejaba de pensar en las palabras de Camilo y las ganas que tenía de ver a Valentina, y saber que había sucedido. Sabía que no dormiría en toda la noche, y era estúpido no ir tras una explicación. Tomó su teléfono y le marcó a Camilo mientras volvía a salir de la casa.

Demoró un buen rato en llegar a casa de Valentina, que era una mansión realmente impresionante. Pero no podía detenerse a observar el lugar. Se presentó en puerta pero no querían dejarla entrar, y fue la hermana de la joven Carvajal, Eva, quien finalmente dio la orden de que le permitieran pasar. Ella misma la recibió en la puerta principal de la casa.

- Juliana, es un placer finalmente conocerte - Dijo Eva mientras la morena se acercaba a la puerta.

- El placer es mío, Eva. Aunque debo confesar que me gustaría haberlo hecho en otras circunstancias - Respondió Juliana avergonzada, porque no podría quedarse a conocer a la hermana de Valentina.

- ¿Sucede algo? - Preguntó sorprendida por el comentario de Juliana.

- Pues, tu hermana no responde mis llamados ni mis mensajes desde ayer por la mañana cuando se fue de mi casa sin decir nada - Confesó la morena mientras entraban hasta el recibidor.

- Eso es imposible, ¿ustedes no se vieron ayer por la tarde? Valentina dijo que se encontraría contigo - Eva estaba confundida y preocupada, Juliana podía verlo en sus ojos y sentirlo en su voz.

- Creo que fue a ver a Camilo en realidad. Algo le está sucediendo y es evidente que quiere ocultármelo, y a ustedes también - Eva la observó en silencio intentando procesar sus palabras - ¿Está aquí? Me gustaría hablar con ella, si no te importa - Consultó la morena ante la falta de respuesta de Eva, quien tras unos segundos asintió.

- Sígueme - Le dijo, subiendo las escaleras.

Cuando llegaron a la puerta de la habitación de Valentina, Eva regresó a la planta baja y Juliana golpeó recibiendo una no muy amigable respuesta.

- Quiero estar sola - Espetó Valentina desde el interior de la habitación. Juliana abrió la puerta y se apoyó en el marco.

- Lamento que no quieras verme, pero merezco una explicación - Dijo ante la cara de sorpresa de Valentina.

- ¿Qué haces aquí? ¿Cómo sabías dónde vi.... Camilo? - Preguntó aunque no necesitaba respuesta. Juliana comenzó a acercarse y se detuvo frente a la castaña, que estaba sentada en su cama - Siéntate - Le dijo posando su mano justo su lado. Pero Juliana tomó la silla que estaba cerca junto al escritorio y se sentó allí, necesitaba marcar distancia.

- ¿Por qué te fuiste sin decirme nada? ¿Por qué faltaste a tu sesión? ¿Ya no quieres verme? Podrías habérmelo dicho y ya, Valentina - Dijo Juliana con dolor, y Valentina quería ponerse de pie y envolverla en sus brazos, pero necesitaba explicarle primero.

- No podrías estar más equivocada, Juliana. Moría de ganas por quedarme contigo, por decirte todo. Pero tengo miedo... - Respondió la castaña desviando su mirada hacia el suelo.