"Always you..."

22. Desde siempre

Sentía su cuerpo entumecido, la cabeza le punzaba y tuvo que apretar los ojos. Trató de abrirlos pero sus parpados pesaban como si fueran dos sacos de metal. El olor del hospital casi le provocó arcadas. Hyukjae se removió y abrió los ojos de golpe, recordando donde se encontraba y el peso de su corazón casi lo asfixio. Se puso de pie demasiado rápido que el mareo casi le nubla la vista. Dio un par de tropezones y llegó hasta el escritorio de la recepcionista.

-L-Lee Donghae, él...-Tragó duro

La enfermera lo miro por unos segundos y suspiro, revisó una de sus libretas y negó con la cabeza antes de hablar

-El paciente Lee sigue en cuidados intensivos, él logró pasar la noche, pero no puede verlo todavía
-Necesito verlo, es mi novio, p-por favor- No lo veo desde hace horas, no lo veo desde que se fue de la escuela y... por favor, solo necesito verlo

Las lágrimas escurrían de sus mejillas sin darse cuenta. La enferma apretó los labios y lo miro con un poco de lástima. No tenía permitido darle el acceso, pero sabía que en un par de horas más la histeria iba a consumirlo y no quería lidiar con el lío que seguramente armaría Hyukjae. Se puso de pie y le hizo señas para que la siguiera. Hyukjae rápidamente se limpió las lágrimas, la cabeza le dolía pero iba a ver a su pequeño novio. Necesitaba saber que estaba bien. Era incluso ilógico que él se estuviera muriendo por dentro cuando quien estaba en una cama postrado al borde al muerte durante las últimas horas había sido Donghae.

Luego de ponerse una bata, un gorro y un cubre bocas y siguiendo las instrucciones de la enferma, Hyukjae ingresó a la habitación, la enferma se retiró y lo amenazo con darle solo 10 minutos o no volvería a ayudarlo. En cuanto la puerta se cerró, Hyukjae sintió el aire volver a sus pulmones, su corazón golpeaba con fuerza contra su pecho. En la cama, estaba su novio, pálido, con un labio abierto, con un ojo hinchado y negro, unas puntadas sobre la frente y una gasa sobre la parte lateral de su abdomen. Él estaba respirando, él estaba vivo. Hyukjae se acercó y se sentó en una silla junto a la cama. Tomo la mano de su novio y cerró los ojos, soltó un gran suspiro y se de3jo llevar por el sueño, estaba muy cansado, realmente cansado. Pero con Donghae a su lado, por fin podía dormir a salvo.

***

Donghae había salido corriendo y dejó a Hyukjae en el pasillo. Estaba cabreado, no con su novio y mejor amigo, estaba enojado con esa pequeña mierdecilla astuta. Por mucho tiempo, fue Hyukjae quien dio la cara por él, quien lo defendía en la escuela de los chicos abusivos cuando eran unos adolescentes. Fue su novio quien se cayó todo este tiempo lo que sentía por él e incluso tuvo que tragarse el dolor de verlo tener una cita con otro chico cuando había preparado algo realmente lindo para su cumpleaños. Fue su chico quien le concedió su deseo de cumpleaños. Tenía que protegerlo y defenderlo ante cualquier imbécil que se creyera con el derecho de faltarle al respeto y tratar de arruinar su noviazgo.

Después de buscar por los salones y en los talleres, salió de la escuela y decidió ir a una de las cafeterías que se encontraban cerca de la universidad. Necesitaba darle a Ryeowook una lección. Con la mala suerte de no hallarlo por ningún lado, Donghae tuvo que indagar entre algunos de sus compañeros que se encontraban en el lugar. Algunos hicieron chistes sobre la foto que todo el alumnado ya había visto, otros ni siquiera lo conocían. Pero fue su compañero Sehun, quien con un suspiro resignado, le dijo que podría encontrarlo en uno de los departamentos cercanos a la escuela. Donghae se dirigió hacía ahí, y quizás ese fue su mayor error, pero por Hyukjae todo valía la pena.

-Ryeowook, sal, maldito imnbécil.- Gritó mientras golpeaba la puerta con fuerza.-Eres un hijo de puta, sal de ahí

Luego de un par de golpes y gritos, la puerta se abrió y reveló al chico que tuvo el descaro de sonreírle

-¿Qué haces aquí? ¿Hyukjae ya te votó o tú a él? Aunque me da lo mismo, ahora podre tenerlo en mi cama cuando quiera

Y Donghae no tuvo tiempo de formular respuesta, simplemente lo golpeó y se abalanzó contra el chico y cayeron al suelo.

-No vuelvas a tocar A Hyukjae, no vuelvas a malditamente tocarlo, enfermo estúpido

Ryeowook río y forcejeó con Donghae hasta tenerlo contra el piso y soltándole un par de golpes sobre su rostro. El menor gimió de dolor y trató de detenerlo. Como pudo se lo quito de encima y lo empujo, pero Wook era realmente un fastidio, incluso aún que lucía más pequeño que él y más delgado, Donghae apenas tenía las fuerzas para contenerlo. Por eso Hyukjae siempre lo protegía, él sabía que tenía que protegerlo siempre. Donghae trató de empujarlo, pero Wook lo golpeó y lo empujó contra la pared para propinarle un par de puñetazos sobre el abdomen, el castaño no podía respirar y trató de alejarlo. Corrió hacia la puerta tratando de salir de ahí, pero Ryeowook lo jaló del cabello y lo arrastró por el pasillo, cuando Donghae se puso de pie y trató de defenderse, Ryeowook se acercó a él, sintió algo quemándole el costado de su abdomen y luego fue empujado contra las escaleras... Donghae vió todo su mundo oscurecerse.

**
Cuando Donghae quisó invitar a Hyukjae a salir para celebrar su cumpleaños estaba realmente nervioso. Sus manos le sudaban y tenía que secárselas contra su pantalón. Ya había pasado una hora desde que había salido de clases para dirigirse a los talleres y buscar a su amigo. Pero desde entonces se encontraba escondido detrás de una columna y mirando hacía el salón de baile. Desde ahí, podía verlo practicar frente al espejo y no pudo evitar ruborizarse. Su amigo era realmente guapo, no entendía por qué no salía con nadie. Él podía tener a quien quisiera, a cualquier chico o chica, y cuando Donghae le pregunta por qué no salía en citas como Kyuhyun y Sungmin, aunque ellos lo llamaran sesiones de estudio y decían que no se soportaban, su mejor amigo simplemente sonreía y lo miraba con adoración en los ojos, como si no quisiera decirle la verdad.

-Eso es porque no tengo interés en salir con nadie, Hae. Te tengo a ti, siempre estoy contigo.
-Si pero somos amigos, Hyuk.-Dijo mirando sus labios. Hyukjae apretó la boca y negó con la cabeza para volver a sonreírle
-Mmm, me gusta estar contigo, es eso
-¿No te aburres? S-siempre estamos juntos, vas por mi al terminar mis clases, vamos a comer juntos, ni siquiera sales con Kyu a menos que seamos los tres
-Me gusta estar contigo.-Repitió, y cuando vio que Donghae iba a replicar de nuevo, simplemente lo abrazó y besó su frente
-No importa nadie, pequeño. Me gusta estar contigo y hacer todas esas cosas. No quiero salir con nadie porque estar a tu lado es mejor que nada.

Donghae suspiró y dejó salir el aire que estaba reteniendo, antes de armarse de valor e ir a buscarlo, el timbre sonó. Miró que Hyukjae se alejó del espejó y recogió sus cosas apresurado. Donghae se mordió el labio y negó con la cabeza, siempre estaba afuera de su salón incluso antes de que el saliera, ahora entendía porque siempre llegaba a tiempo por él. Decidido a darle una sorpresa, Donghae se escondió un poco más detrás de la columna y espero. Cuando creyó que Hyukjae estaba cerca, escucho que lo llamaban

-Hey, Hyukjae.-Era la voz de una chica
-Oh, lo siento, tengo un poco de prisa
-No te quitare mucho tiempo. Yo.. tengo entendido que será tu cumpleaños y... quería invitarte a salir

Oh, no. Donghae reprimió un quejido y rogó que Hyukjae le dijera que no

-Um, yo.. eh, eso me halaga, gracias, pero ya tengo planes. Yo... como que lo pasare con alguien más ese día, lo siento.

Y ese día, Donghae sintió su corazón romperse. Hyukjae ya tenía a alguien especial con quien compartir su cumpleaños. Salió de ahí enojado, triste y decidió irse a casa sin esperar a Hykjae. Una semana después, Donghae encontró unos boletos de un parque de diversiones ya vencidos. Eran para el 4 de abril, y cuando le preguntó a Hyukjae, el solo se encogió de hombros y sonrió triste

-El chico que quería invitar se enojó conmigo y ya no pude llevarlo...

...