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James sabía que entre más mirara la pantalla de su celular, el mensaje de Wade no llegaría más pronto, pero aun así no dejaba de hacerlo. Se suponía que Wilson le mandaría un mensaje con nuevas noticias desde hace más de tres horas pero el dichoso mensaje seguía sin llegar, pero eso no evitaba que el oficial estuviera tan perdido en las ansias de seguir esperando y anhelando que sus ojos azules se deslumbraran con el color verde de las notificaciones de su bandeja de mensajes que normalmente están vacías. El ni siquiera se dio cuenta que su mejor amigo entro a su oficina y al parecer el rubio lo noto por que tuvo que carraspear para que su mejor amigo notara por fin su presencia. — ¿Estas esperando su llamada verdad? —pregunto aunque estuviera seguro de eso.

— ¿De qué hablas? —pregunto muy confundido y algo extrañado por que nunca le había hablado sobre todo lo que ha estado haciendo afuera de la ley, como haber secuestrado a un traficante en lugar de ponerlo tras las rejas.

—He escuchado que han pensado en comenzar a investigarte. —respondió con pena. —Hay rumores de que estas trabajando con un ex convicto.

—Entonces...—paso sus manos por su cara con frustración. — ¿Crees que sea cierto? —Steve lo miro por un segundo y luego tomo la silla frente al escritorio de Buck para quedar justamente frente a él. El rubio creí que era mejor sentarse para una charla que ameritaba ser extensa.

—Sé qué harías cualquier cosa por él. — sonrió con calidez logrando que su mejor amigo se relajara.

— ¿Qué se ha dicho sobre mí? —pregunto confirmando así todos los rumores.

—Escuche que estás buscando a Rumlow y a Frank Castle con ayuda de criminales.

—Tal vez debería de ser más cuidadoso en mis movimientos. —hizo una mueca y dejo escapar un suspiro cansado. —Si me descubren me encerraran a mi primero antes de que arresten a Zimo.

—Y por eso voy a ayudarte. —hablo Steve totalmente decidido.

—Note ofendas pero la última vez que me ayudaste no termino nada bien.

—Lo sé. —Steve se recargo en la silla y sonrió como si tuviera un as bajo la manga o mejor dicho un contacto bajo la manga. —Conozco a alguien que puede ayudarte.

—Realmente no me gustaría meter a alguien más. —negó frenéticamente con la cabeza al pensar el desastre que podría haber si más personas se involucran.

—Se dónde está Castle. —soltó así nada más.

— ¿Cómo sabes dónde está? —Buck se sobresaltó en su asiento ante la revelación. En aquel momento escucho por primera vez que sucedió realmente cuando Tony fue secuestrado por Obadaih Stane. Había sido tanta la desesperación de Steve que termino por relacionarse con el castigador, el hombre que hacia justicia por su propia mano sin importar que sus métodos no eran los más piadosos.

Al final gracias a Steve por fin logro contactarse con Castle por lo que sin creerlo, tres días después se encontró sentado en una cafetería frente al hombre que podría ser su única esperanza. La charla apenas duro, solo intercambiaron información y continuaron viéndose en lugares menos transitados. Inclusive Wade seguía siendo parte de todo aunque a Buck no le agradaran las razones por las que el mercenario aún estaba ayudando.

El mes transcurrió en seguir el rastro que había dejado Zimo, llevándolos así a algunas de sus casas de lavado de dinero pero luego de encontrar tantas huellas volvieron a estancarse cuando pisaron la quinta casa de Zimo donde solo encontraron kilos insaciables de cocaína y otras drogas experimentales, era bastante material para confiscar pero nada de ello daba pie para saber cuál sería su siguiente destino. El tiempo le había mostrado una buena cara al encontrarse con Frank pero nuevamente volvió a presentarse atroz para el oficial al no dejarlo avanzar.

—¿Dónde está Zimo? —Bucky llevo al departamento de Wade con la ira desbordándose de él, luego de enterarse que la última casa de lavado de dinero en realidad no era de Zimo sino más bien, del repugnante traficante que tenían esposado en el sótano de Wade. —¡¿Dónde está?! —esta vez grito, lo tomo de cuello y lo estampo contra la pared.

—Por milésima vez. —mascullo rechinando los dientes. —No tengo ni puta idea de donde esta ese cabron. —Le grito Rumlow molesto.

—Ya le rompí una pierna y aun así no confeso. —le dijo Wade para que se diera cuenta de que solo estaba perdiendo el tiempo. —De verdad creo que no sabe nada.

—No mereces a mi ángel. —hablo con una sonrisa sínica. —Nunca lo encontraras. —Rumlow como el hijo de perra que era, carcajeó como si su cuerpo no estuviera maltratado por aquel hombre sin esperanza. —Nunca. —Y tan solo Buck respiro hondo para que entonces Rumlow nunca volviera a respirar, el oficial después de tanto tiempo sintió que ya nada le importaba por lo que no pensó más de una vez en callar al traficante con una bala atravesando el costado de su cráneo, Buck dio un paso hacia atrás y dejo caer su revolver al piso cuando sintió un poco de sangre ajena en su cara.

—James. —le llamo Wade sin saber que decirle realmente.

—Peter no merece esto. —dijo sin más, solamente fue sin preocuparse por dejarle a Wade un cadáver que posiblemente nadie reclamaría.





Solo queda un capitulo, el siguiente sera mas largo por ser el final. 

Los ama The Sinner y su perro.

Pobre Buck se le esta zafando un tornillo.

¡Hey Buck!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora