La chica de los caramelos (SILLIE)

One

Primer día de escuela.

Tercer año me esperaba.

Me desperté, un poco abrumada, y bajé a desayunar.

Luego me dirigí a la escuela, cansada ya que la noche anterior estuve leyendo.

Suena el timbre y entro en mi clase.

Me siento en el mismo lugar que siempre y, no mucho tiempo despues, una chica de cabello rojizo se dirige hacia mi.

-Esta ocupado el lugar? - pregunto ésta.

Me quite mis auriculares y la mire en los ojos azules que poseía.

-¿Que?

-Si el lugar esta ocupado... - dijo esta riéndose.

-No, y no creo que quieras sentarte aquí- la peliroja me miro con decepción.

-Por qué no? -pregunto.

-Digamos que no tengo buena fama en este lugar- contesté.

-Bueno, eso no me importa. - esta chica se sento alado mio. Y luego dijo - me llamo Sadie, Sadie Sink.

-Millie Bobby Brown- me presenté . mientras estrechaba su mano.

-Asi que Millie uh? Porque no tienes buena fama aqui? - pregunto mientras sacaba sus cosas.

-Digamos que, con el tiempo, no fui aceptada- mis ojos se llenaron de lagrimas.

-Mierda! - maldijo porque se le habia caido el agua- Perdona, esta gente parece- pausa - no me agradan.

-Ey Ginger, acabas de llegar- dije a lo que rio.

Iba a decir algo pero entro el profesor y se empezo la clase.

En el medio de esta recibi una nota:

Pienso que esta gente parece rara.

-Sads

A lo que respondi en la parte de atras.

Con quien te sientas en el almuerzo.

-Mills

A lo que respondió.

Prácticamente como no tengo amigos ire a comer al baño. Quieres acompañarme?

- Sads

Por fin tendría alguien con quien estar, espero que no sea efímero.

No creo que descubra quien soy.

La clase termino y luego la otra y el momento del almuerzo llego.

En vez de ir al baño, Millie y Sadie, quedaron de ir a la biblioteca.

Así que pasaron por su comida y se dirigieron a esta.

Cuando llegaron tomaron asiento.

Sadie tomo un libro del estante mientras que su acompañante acomodo su tarea del día en el modo escritorio.

-Ningún libro bueno por aquí?- interpelo la pelirroja.

-Están todos en ese estante- señalo la castaña.

La pelirroja sigo las instrucciones y encontró libros en abundancia.

De estos tomo uno 'El inventor de Juegos' y decidió llevárselo consigo a casa.

-Cual agarraste? - pregunto Millie.

-Este- dijo Sads mostrándole el libro- parece bueno.

-Ya lo lei- proclamo Mills- debes leerlo, y terminarlo.

-Siempre termino estos libros- La mayor le lanzo el libro la menor.

-Eso dolió- se quejo ella.

-Y bien, se que apenas nos conocimos, pero que tienes para contarme?