Los delicados ojos de Na Jaemin se encontraban fuertemente cerrados disfrutando de las caricias en su cabello, su respiración era pausada, tenia minutos de haber despertado, era tarde pero no quería irse nunca de los brazos de su creador.
—¿Por qué eres tan rebelde Nana?- susurró Jeno.
—¿Por qué no puedes ser tu?- contraatacó el arcángel.
—Es pecado, ser homosexual es un pecado, yo soy Dios, entiéndelo.
—Y yo soy el arcángel Na, el arcángel más poderoso pero si tu me lo pidieras escaparía a otro paraíso contigo sin pensarlo- Los dedos del ángel jugaban en el pecho del otro.
—Es diferente, el mundo literalmente depende de mi.
—¿Qué tanto me quieres Jeno?- cuestionó Jaemin.
El silencio los invadió, las caricias cesaron y los pensamientos los inundaron por largos minutos.
—Nana, eres lo más importante que tengo pero esto es un error.
—Mhm- asintió el delicado arcángel- Pero... ¿podemos estar juntos a escondidas?- Jaemin de reincorporo para mirar los ojos de Dios.
—No lo soportarías, conociéndote- dijo Jeno mirando fijamente los brillosos ojos que lo miraban.
—Lo haré, seré paciente y me portaré mejor- prometió el arcángel.
—Si nos descubre alguien...no...¿sabes lo que eso traería hacia este paraíso? Se supone que estoy libre de pecado- Jeno no podía evitar pensar en el desastre que se armaría.
—Nadie está libre de pecado Jen- sonrió Jaemin continuando con las caricias en el pecho del alto- Ni si quiera Dios. Dilo, vamos, estás enamorado de mi.
—Yo...
—Dilo, anda.
—Eres un ángel malo- las manos de Jeno atraparon la muñeca en movimiento del contrario.
—Me amas- sonrió el castaño acercándose a el estático rostro frente a él.
—¿Por qué estás tan seguro?- preguntó Dios.
Jaemin se mantuvo en silencio. Contempló la situación en la que se encontraba, su Dios estaba bajo de él sosteniendo fuertemente sus manos para que no lo acariciara. Las respiraciones agitadas se podían escuchar, el arcángel podía oler lo delicioso que olía Jeno de lo cerca que estaba, agh, tan necesitado.
—Puedo...sentirlo, por favor Jeno, ámame, no importa si es en secreto.
Los ojos de Dios brillaron como si todas las estrellas del universo estuvieran en ellos.
—Te prometo que siempre te amaré Jaemin, siempre.
Los dulces labios del arcángel se posaron en los de su superior, la sonrisa de los dos se sentía a través del delicado beso. Jeno acariciaba con su lengua el labio inferior del chico como si lo fuera a lastimar si lo hiciera un poquito más fuerte, Na soltó una risa que sonó como pura felicidad para los oídos de Dios.
—Cambiaré por ti, te lo juro- dijo el castaño sonriendo.
—No jures, es pecado.
La risa de Jaemin se escuchó en toda la habitación blanca.
—Si, lo que digas Jen.
Les quiero mostrar la forma en que me imagino cada personaje.🌟Jaemin:
🌟Jeno: (no se si especifiqué su color de cabello antes pero así es como lo imagino)
🌟Haechan/Donghyuck:🌟Mark:
Por ahorita esos son los importantes💛
*secretum nostrum: nuestro secreto.
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Apóstata; Nomin
FanficEl gran Dios todopoderoso, grande e imponente, respetado y amado que desterró al indefenso Lucifer de su paraíso. ¿Realmente fue así? ♡NoMin au/ Markhyuck au ♡Religión ♡Disclaimer: No está basado realmente en el orden jerárquico de ángeles.