1998: Final de la Copa Mundial de Quidditch entre Japón y México con sede en Bulgaria, vencedora del último Mundial de 1994.
—¡La Snitch se está haciendo de rogar! ¡La Buscadora Akigawa vuela a una velocidad increíble, pero el Buscador López le sale al paso y... y...! —El público mantuvo la respiración—. ¡Oh, no! La Buscadora japonesa ha perdido de vista la Snitch y nuevamente ha desaparecido —comentó Ludo decepcionado—. Recordemos que con esta ya van siete las ocasiones en las que ha estado a punto de capturar la Snitch...
El color que más predominaba en todo el estadio era el rojo y el blanco, ya que esos colores coincidían en las dos banderas de cada país; el verde de la bandera mexicana era el que marcaba la diferencia.
—¡Kurobashi vuelve a cometer falta derribando a Gómez; una más y el Golpeador quedaría expulsado permanentemente! ¡Qué competentes son estos japoneses!
Todo el estadio bramaba indignado; Luís Gómez Guerrero había sido proclamado recientemente como el mejor jugador de ese Mundial y era uno de los favoritos para ganar la Snitch de Oro, premio que la Confederación Mundial de Quidditch les obsequiaba a los mejores jugadores del siglo.
También, e irónicamente, una de las favoritas a ese premio era la buscadora japonesa Akigawa, que en esos momentos reprendía a Kurobashi con rabia.
—¡La mascota mexicana está cortejando a la japonesa! ¡Nunca he visto algo tan osado! —Rió Ludo.
Una de las dos pantallas que mostraban el terreno de juego se apagó y, sabiendo lo que se venía, el público empezó a pitar y aplaudir como locos.
—¡Y ahí va de nuevo la Kiss Magic Cam! ¡Verdaderamente, no sé cuál de las dos pantallas mirar!
Mientras una de ellas mostraba cómo un Cazador mexicano sorteaba una Bludger, la otra enseñaba a una pareja morreándose sin decoro alguno.
Parecía que él era mexicano, mientras que ella era japonesa, y los dos vestían los colores contrarios; ella los de México y él los de Japón. El público estaba que no cabía en sí por lo divertido de la situación.
—Eh, ¿hola, hay alguien ahí? —Preguntó Ludo sumamente divertido, viendo como los jóvenes se comían la boca sin ningún pudor—. ¡¿Aquí no hay niños, verdad?!
La gente reía y aplaudía, y la cámara volvió a cambiar, esta vez mostrando a dos ancianos adorables vestidos con los colores de la selección búlgara; aunque ésta quedara eliminada en este Mundial, no importaba mucho qué colores tuvieran sus bufandas, ya que la sede era en Bulgaria.
—¡OHHHH! ¡BESO, BESO, BESO! —Una enorme exclamación de ternura y después una gran algarabía se oyó en todo el estadio; ya casi nadie estaba al pendiente del partido.
Y cuando los ancianitos cumplieron con la petición, la cámara volvió a cambiar mostrando en la pantalla dos caras conocidas, otra vez en el parco VIW.
—¡Me resultan familiares! ¡¿Dónde los he visto antes?! —Bramó Ludo a la desesperada.
Parecía que los cuatro años no habían pasado para ellos porque seguían igual, sólo que con la bufanda de México puesta.
El de ojos marrones volvió a sonreír refulgente y el de ojos verdes volvió a tener aquel precioso tono rosado en sus mejillas, esta vez, mirando con auténtica devoción al mayor y volviendo a obsequiarle una tierna sonrisa que, sinceramente, podría destruir el cosmos.
—¡Claro! ¡¿Cómo no acordarse de esas dos perfectas sonrisas!? ¡¿Todavía son amigos!? —Preguntó Ludovic y el público rugió como nunca.
Esta vez fue el más alto quien dibujó con sus labios: "Somos algo más", mirando con amor al de ojos verdes y acercándolo posesivamente hacia sí.
—¡¿Y A QUÉ ESPERAN PARA BESARSE?! —Chilló Bagman en medio de los silbidos y aplausos de los espectadores.
Nadie hacía caso al juego. Absolutamente nadie.
Esta vez fue el más pequeño quien atrajo al mayor y besó los rosados labios de su pareja, que lo recibieron gustosamente.
El de ojos verdes pasó sus brazos por el cuello del mayor mientras que el otro lo tomaba por la cintura, aumentado la intensidad de aquel beso sin llegar a lo indecoroso o lo inapropiado.
Era sencillamente perfecto.
Todo el estadio estaba tan pendiente de aquel acto tan romántico que nadie se dio cuenta de que el Buscador mexicano, Alberto López Gómez, primo de Luís Gómez Guerrero, atrapó la Snitch, dándole la victoria a México y llevándose con ellos la Copa y la sede del próximo campeonato a su país.
Sólo cuando Ludo se fijó en que la mascota de Japón le dio un empujón a la de México, éste pudo reaccionar, mirando el marcador y a los jugadores mexicanos que celebraban y aclamaban su propia victoria.
—¡MÉXICO GANA EL MUNDIAL!
Los vítores, chillidos y silbidos aumentaron hasta el máximo auge, hasta los japoneses profirieron aplausos, olvidándose de que ellos habían perdido. Todo daba igual, porque en aquella pantalla con un corazón rojo con letras doradas que decía "The Kiss Time", una preciosa pareja seguía besándose, completamente alejados de toda la algarabía de su alrededor.
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❤Otro capítulo más de esta pequeña historia (que en realidad la escribí hace un par de años). Lo bueno es que está completa, con 10 capítulos en total. Los edito rápido, así que no tienen que esperar mucho. Espero que les guste.
💋Yara Riddle💋
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Todo comenzó en los Mundiales de Quidditch [Tomarry]
FanfictionTom Riddle y Harry Potter se conocieron en un partido de Quidditch y, desde ese momento, han creado una especie de tradición: siempre van juntos a los finales de la Copa Mundial de Quidditch sin importar dónde se celebren. Una cámara especial capta...