Después de que Shadow encargara Rouge su hermanita, estas dos salieron del cuarto y se dirigieron hacia Sonic y Tails.
—Lo siento Sonic, pero Shadow ya se quedó dormido... Otra vez— (aclarando: cuando lo llevaron al hospital iba inconsciente)—
—Hug supongo que ya no podré verlo— se había puesto triste—
—Lo siento cariño, igual ya mañana. Ya se acabó la hora de visita — tomó la mano de Maria y ambas comenzaron a salir—
—Bueno... Mm... ¿N-nos vamos?— le llamaba Tails algo cansado—
—Si, claro— igual ambos se fueron del hospital—
Sonic estaba un poco cabizbajo, realmente quería ver a Shadow.
Toda esa tarde fue un poco agitada para él, quizás era por los pocos juegos a los que se podía subir, el susto de ver a Knuckles y Shadow pelear, la decepción de ver que Shadow salía con Rouge o la tristeza de no poder haberlo visto, pero su corazón sufrió un pequeño colapso ya tarde por la noche.
Otro día se había llegado y Shadow despertaba de su letargo.
—(me duele la cabeza)— se sentía como si se hubiese ido de fiesta por una semana, sin dormir y con cruda—
—“Shaadoowwww” Ya estas despierto, oye— le picaba los cachetes como fuera un niño pequeño—
—Haag... ¿Qué haces aquí — lo miró a él y miró el lugar— ¿Qué hago yo aquí? — se sentó en la cama—
—¿No te acuerdas de lo que pasó ayer?— también se sentó en la misma camilla que estaba Shadow —
—mm ayer... Cierto, estaba con mi hermana y Rouge...— se llevó una mano a la barbilla y se puso a recordar— Mm luego apareció ese equidna roja y... ¿Peleamos? — miró a Sonic con duda—
