Shadow salió de su cuarto, un poco mas temprano que de costumbre; al abrir la puerta se llevó la sorpresa de ver a su hermanita sentada a un lado de la puerta, ésta estaba dormida y por su rostro podía notarse que había llorado bastante. No pudo sentirse mas miserable, era su hermano mayor se suponía debía cuidarla; ya que era su única familia.
—¿Cuándo habías hecho algo así? — se agachó y cargó a su hermana, la llevó a su cuarto, la acostó en su cama y durmió con ella— Lo siento tanto Maria— miró su rostro y acarició con ternura su mejilla—
Su celular comenzó a vibrar; siempre lo llevaba de ese modo, para que el sonido no lo molestara, pero lo ignoró, ese momento era solo para él y Maria y nada, ni nadie interrumpiría ese momento.
—No piensas contestar tu teléfono? — lo miraba con un pequeño vestigio de que había llorado—
—No. Mira yo, lo siento, no pienses que no te quiero, porque no es así —
—¡Enronces porque siempre me ignoras! ¡Por que me dejas sola, tanto tiempo!— se levantó de la cama y lo miró un poco molesta—
—Mira yo tengo un pequeño problema, hay momentos en los que me duele mucho la cabeza, llego a sentir que me puede explotar y todo me molesta, el ruido la luz, es por eso que me encierro en mi cuarto y bajo las cortinas— tomó las manos de su pequeña hermana y la miraba con algo de ternura, no quería preocuparla mas de lo que ya estaba— Es por eso que te dejo sola, no es mi intención, pero no puedo soportarlo —