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Cuando el reloj dió las once fue cuando llegamos al pequeño bar en el cual "3Racha" actuaría, gran parte de los amigos de JiSung se encontraban ahí.

- Hola.- JiSung saluda a todos mientras que yo tomo asiento a un lado de HyunJin y dejo mi chaqueta sobre mis piernas.

- ¿Qué tal estás?

- Bien.- respondí de manera simplemente mientras veía como JiSungdejaba su chaqueta a un sobre el asiento libre a mi lado.

- Regresaré pronto.- el castaño deposita un pequeño beso sobre mi mejilla y después se aleja junto a ChangBin y Chan.

- Tranquila, volverá antes de lo esperado, de mientras, estaré a tu lado.

- Gracias...- susurré agarrando su mano y dejándola entre las mías mientras miraba el escenario.

La intensidad de las luces fue bajando hasta quedar al mínimo y unos cuantos focos enfocaron el escenario dejando ver a los tres chicos. Era extraño ver a JiSung ahí, delante de tanta gente, pero la sonrisa de su rostro demostraba cuánto amaba ese escenario, cuánto amaba ser el centro de atención junto a sus dos amigos.

- Disfrutan mucho.- susurré cerca de la oreja de HyunJin para que me escuchara.

- El escenario es el segundo hogar de los tres, les iría muy bien como grupo.- me responde de vuelta y asiento.

Estuvieron sobre el escenario por lo menos una hora, interpretando canciones distintas y tanto ChangBin como JiSung rapearon dos solos que tenían, la gente escuchaba con atención para después aplaudir, no eran las típicas canciones que la gente coreana estaba acostumbrada a escuchar, pero estaba segura que si se dieran a conocer mundialmente la gente amaría las letras de todas sus canciones.

- Son increíbles...- susurré con una enorme sonrisa mientras veía a los tres acercarse.

- ¿Qué te ha parecido?- abracé a JiSung sin borrar la sonrisa de mi rostro mientras aguantaba las ganas de llorar.

- Ha sido increíble, de verdad, ¿no habéis pensado en ir a alguna agencia para debutar?

- Somos felices en sitios pequeños, pero nada será eterno, igual llegamos a más, igual seguimos disfrutando de estos escenarios o llegaremos al final, nadie sabe lo que puede llegar a pasar.

La noche siguió durante unas horas más, JiSung estaba cansado y tendríamos que ir andando hasta casa, entonces, cuando el reloj dió las dos de la mañana nos despedimos de los ocho chicos y salimos del bar que se encontraba más lleno que horas atrás.

- ¿Has estado bien?- asentí mientras entrelazaba mis dedos con los suyos.

- Con HyunJin a mi lado he estado tranquila, JeongIn también ha sido muy amable conmigo, todos tus amigos son maravillosos.- dije con una sonrisa.

- Me alegro, ellos son muy importantes para mí.

- Quiero preguntarte algo...- usé un tono más bajito del habitual para hablar- No quiero sonar muy entrometida, pero... El mensaje que leíste ayer... ¿Que era en verdad?- él deja de caminar y me veo obligada a imitar su acción.

- Mis padres, ellos se quedaron en Malasia, por eso vivo solo... Ellos quieren que regrese, pero voy a hacer lo posible para quedarme aquí, aún tengo una oportunidad para quedarme. Y ya que hablamos de esto, hay algo que llevo queriendo preguntarte desde que nos conocimos, ¿a qué sitio te refieres? Cuando nos conocimos dijiste querer ir a un lugar que también era desconocido para ti, ¿ya sabes cuál es?- asentí y me posicioné delante de él, en estos momentos me alegraba de la poca diferencia de altura que había entre nosotros.

- Llevo tiempo sabiendo cual es ese sitio, ese lugar que creía que sería tranquilo y solitario... Es todo lo contrario.

- Que cliché eres.

- Callate, que me estaba quedando bonita.- dije con un pequeño puchero mientras lo veía sonreír- Ese lugar no es importante, porque si estoy a tu lado, siempre estaré en ese lugar. Si no me hubieras interrumpido habría quedado mejor.

- Ha quedado perfecto.- con una sonrisa en sus labios sus manos se colocan en mi cintura y acerca mi cuerpo al suyo- Contigo todo es perfecto.

- No mientas.- susurré con las mejillas ardiendo y escondiendo mi rostro en su pecho mientras lo abrazaba.

- No lo hago, lo juro.

Tras esa pequeña charla seguimos caminando hasta llegar a su apartamento, fue un camino silencioso pero cómodo, lo dos estábamos a gusto con la compañía del otro, e igual por eso sonreímos como idiotas.

Al llegar a su apartamento los dos fijamos nuestra vista en el sobre azul que se encontraba en el suelo.

- Si que debe de ser importante para dejarlo aquí...- susurra JiSung agarrando la carta.

- ¿De quién es?

- No es importante.- responde dejando la postal sobre el pequeño armario de la entrada- Deberíamos ir a la cama, es tarde.- asentí dándole la razón y caminé por delante de él hasta llegar al dormitorio.

JiSung seguía ocultando cosas, lo presentía.

Fears ( Han Jisung )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora