4. Déjalo

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El hombre agitó la espada y falló por poco, en ese mismo instante la bestia lo rasguñó a través del pecho, rasgando los trapos que traía por camisa.

-La tengo.-siseó la bestia. Se relamió los labios con una lengua larga y babosa, sus ojos brillaban con la adrenalina de la pelea, esos ojos querían ver sangre.

Aline estuvó de pie viendo la pelea, la estaca la sostenía tan fuerte que los nudillos se le veían blancos. Entonces vió. El monstruo dirigía todos sus golpes hacia el pecho del hombre, y en su pecho desnudo parecía colgar un talismán que se movía al ritmo de su dueño. Los movimientos que el hombre hacia con su espada estaban destinados a detener los golpes del enemigo.

-Sabes,-dijo él mientras esquivaba más golpes- pensé que realmente no tendría que pasar por esto. ¿Por qué no has hecho algo con esa estaca que llevas en la mano?

-Ni siquiera lo pienses, bruja. -dijo el monstruo- Si lo que quieres es llevarla con vida no deberías pedirle esa clase de cosas. Ni siquiera sabe que sucede. Nunca podría matar a un monstruo así.

Y eso la enfureció por pequeños motivos de orgullo. ¿Qué estaba tratando de decir? ¿Otras personas podían matar monstruos pero ella no? Un monstruo se estaba burlando de ella, uno con grandes garras y filosos dientes, tal vez decía la verdad, pero...

Tal vez era una locura.

Aline levantó la estaca aprovechando que la bestia le estaba dando la espalda. Para demostrarte que no soy tan inofensiva como parezco. Por un momento se detuvó y pensó, atacar por la espalda es para los débiles. Así que clavó la estaca con toda la rapidez y fuerza que pudo reunir. Pero realmente soy débil.

La bestia lanzó otro aullido desgarrador. Aline dio unos pasos hacia atrás, la bestia se volteó para darle su merecido, pero antes de que pudiera levantar uno de sus brazos el hombre aprovechó la distracción para clavarle la espada directamente en el pecho.

Y cayó a los pies de Aline.

La reacción natural de Aline fue dejar caer la estaca inmediatamente, aunque la había sacado con la misma velocidad con la que se la clavó al monstruo se había llenado de algo que parecía baba negra, y al parecer esa baba comenzaba a desprender un olor desagradable, así que Aline dio varios pasos hacia atrás. El cuerpo de la bestia yacía inmóvil. Las personas no notaron el bullicio que había venido del monstruo. Aline sacudió la cabeza.

- ¿Qué rayos era eso? -preguntó.

- Una bruja - dijo el hombre - Una bruja muy fea, por cierto. He conocido brujas más bonitas. Ese golpe con la estaca fue muy brillante, gracias por eso. Pero debemos continuar.

- ¿Y que haremos con el cuerpo?

Si no fuera ella, seguro que se habría reído de esa frase. Ella nunca creyó que dijera eso.

- ¿Que qué haremos con el cuerpo? Nada, que se pudra, de todos modos se lo merecía por estar acosándome. 

- ¿Y si alguien lo ve?

El hombre pusó los ojos en blanco.

- Nadie lo va a ver. Dios. Haces tantas preguntas. Déjalo. -entonces se acercó a ella y posó sus manos en los hombros de ella.- Tranquilizate, Aline.

Y ella lo miró a los ojos.

- Maté a un monstruo.

- No, no, no. Me ayudaste a matar a una bruja. Y te lo voy a decir porque es verdad, si de ahora en adelante te vas a repetir lo que acabas de hacer una y otra vez te vas a volver loca, o peor aún, me vas a volver loco a mi. Ahora vamonos, puede que con esa bruja vengan más.

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Lo siento si no he subido nada, pero es que estaba en examenes y se me había ido la inspiración D:

Pero como ya salí de la escuela tengo más tiempo para escribir. Aline está traumada, digo, todos nos traumariamos si matamos a un monstruo, ¿no?

Un cap corto pero los votos y los comentarios son agradecidos :3 Comenzaré a dedicar.

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