No soy marica

Chapter 6: La misión y el idiota más grande

Stan se encontraba, literalmente, caminando en círculos en la habitación de su amigo Kenny. La verdad ya no sabía que hacer y no podía quedarse quieto. Había intentado comer algo, ver la TV, escuchar música e incluso hojear las revistas porno de su amigo, pero nada daba resultado.

La ansiedad y el nerviosismo se lo estaba carcomiendo por dentro. Hacía más de media hora que Kenny había salido en su 'misión', ¿por qué madres estaba demorando tanto?

Sólo esperaba que todo resultara de acuerdo al plan...

Media hora antes

Después de la fatídica llamada por el celular con el mejor amigo de toda su vida, y de que Kenny se fuera a quién sabe donde; Stan había permanecido mirando los patrones que formaban las múltiples grietas en el techo de su amigo.

Tenía que idear alguna forma salir de aquel problema, y pronto.

Había visto ya la forma de la cara de Jennifer López cuando se le ocurrió algo. No era la idea más brillante jamás concebida, pero era algo y se aferraba a que fuera su última esperanza.

Rápidamente saltó de la cama y bajó hacia la cocina, donde Kenny se encontraba.

"¡Kenny! ¿Dónde madres estás? ¡Trae tu culo para acá!"

El susodicho volteó a verlo con una expresión de 'yo no fui' mientras dejaba un trozo de sándwich a medio masticar en su boca. Era una suerte que los padres de Kenny no se encontraran en aquel momento.

"¿Bfe babfles bierhes?"

"Ugh, no seas guarro, termínate eso antes de hablar," dijo Stan con cara de asco. Kenny giró los ojos y tragó.

"Dije; ¿qué madres quieres?"

"Necesito tu ayuda." Respondió Stan secamente. Kenny levantó ambas cejas.

"¿Huh? ¿Y para qué?"

"Es por lo de Kyle..." ante esto, la confusión de Kenny se convirtió en una enorme sonrisa pícara.

"¡Oooh! ¿Entonces ya descubriste que si eres gay por él?" Stan palideció.

" ¿Q-qué? ¡No!" dijo sintiendo las mejillas calientes. "No es eso, coño. ¡Ya deja de decir pendejadas!" completó entre enojado y frustrado.

Kenny se limitó a soltar una risotada.

"Bueno, ¿qué? ¿Me vas a ayudar o qué? Carajo."

"Vale, ya, no te enojes." Kenny en verdad trataba dejar de reírse. "¿Qué era?"

"Um, bueno. Necesito que vayas a hablar con Kyle..." Stan comenzó algo inseguro.

"Estás seguro que él que debería hablar con él debería ser, um, no sé, quizás ¿tú?" El sarcasmo era totalmente palpable. Stan le dirigió una mirada asesina.

"No idiota, tienes que ir tú"

"Oh, y ¿eso por qué? Yo no soy el que está en peligro de ser asesinado... al menos no en manos de Ky."

"¡Precisamente por eso!"

Kenny ahora sí parecía confundido.

"¿Huh?"

Stan giró los ojos.

"Mira, ¡si voy yo es seguro que me arranca la cabeza ante cualquier movimiento súbito que haga! Por eso," explicó "es preciso que vayas tú y lo calmes antes que yo hable con él."

"Ajá, y el que termina con la cabeza arrancada soy yo." Kenny ahora no parecía divertido.

"¡Si yo muero no voy a revivir!" de defendió el pelinegro.