"Feliz Navidad". (I)

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22 de Abril de 2019

Por fin llegó el día. El último día de clase en aquella universidad que se había convertido en un infierno para Aitana.

Si llegan a decirle eso hace siete meses, no lo creería. En esos tiempos, aún tenía a Nerea. Su querída Nerea... ¿Cómo podían haberse torcido tanto las cosas? Todo iba perfecto... Demasiado perfecto.

Bajó del tren y se encaminó hacia la universidad. Acompañada de su paraguas, ese día también llovía. Igual que el día en el que conoció a la rubia que le robó el corazón. Esa rubia que ya no estaba en su vida...

18 de Diciembre de 2018

La morena volvió a peinarse el flequillo. Repasó su discurso varias veces. Carraspeó varias veces, y cuando estuvo preparada, llamó a la puerta de la rubia.

- ¡Aitii! - Nerea se abalanzó a sus brazos alzándola del suelo. La morena rió un poco.

- Hola, peque. - Besó su cabeza a la vez que la rubia la bajaba.

- Te he echado de menos... ¿Ya estás mejor? Siento no haber podido ir a verte... Ya sabes, los exámenes están a la vuelta de la esquina, y no puedo perder la beca. - La morena trató de sonreír, un poco triste, ya que la razón de su ausencia no era un catarro.

- Estoy bien... - La rubia ensanchó su sonrisa y volvió a abrazarla. Tenía muchas ganas de pasar la Navidad con ella. La quería, y mucho.

- Vamos a ver una peli, porfi. - Nerea agarró a Aitana de la mano y enseguida estaban las dos sentadas en el sofá.

Aitana jugaba con sus dedos nerviosa, mientras que Nerea ponía una peli de Disney. Puso Frozen, su película favorita a pesar de que le recordaba a su difunta hermana.

La rubia cantaba animadamente toda la banda sonora de la película, Aitana, sin embargo, seguía callada desde que la que era su novia la adentró en su hogar.
La película terminó y Nerea miró a la morena.

- Aiti... ¿Qué te pasa? - Aitana comenzó a encontrarse mal, la voz de su consciencia y el remordimiento no la estaban dejando vivir.

- Peque... Yo... He hecho una cosa horrible... -La morena se armó de valor y alzó la cabeza para mirarla. Y pronunció temblorosamente las palabras que destruirían a Nerea. - Me he acostado con Luis.

Oscuro. Nerea comenzó a verlo todo oscuro. Sintió como su mundo estaba empezando a desmoronarse. No podía creerlo. No. Se negaba a que todo acabase de aquella forma. Aún les quedaba mucho por hacer. Acampadas, excursiones, citas... Y todo se había ido al traste.

- Nerea...? - Aitana se preocupó al ver que la rubia no reaccionaba. Tan solo cambió su expresión. Neutra. Su sonrisa se había desvanecido, y las ganas de abrazar a la que era su novia, se habían transformado en ganas de llorar durante horas y horas.

- Vete. - Fueron las únicas palabras que Nerea pudo decir. La morena, con intención de intentar justificarse, se derrumbó por completo al ver los ojos cristalizados de la rubia. Ni siquiera la miraba.

- Nerea... Estábamos borrachos... Fue el calent-

- Que te vayas. - Nerea alzó la vista y la miró. Completamente rota. Llena de impotencia y con ganas de gritarle, pero rota. Deseaba con todas sus fuerzas que todo fuese un sueño, que Aitana seguía siendo su novia y seguían estando tan enamoradas como el primer día. Pero no.

Finalmente, la del flequillo se dio por vencida, musitando un "lo siento" antes de marcharse. Acababa de perder al amor de su vida por un simple calentón.

Se arrepentiría toda su vida.

Ajena a todo esto, la rubia se encerró en su cuarto. Dos días. Tres. A penas comía, tan sólo lo hacía cuando Miriam y Agoney iban a visitarla.

- No puedes hacerte esto... Llevas cuatro días sin salir, peque.

- No me llames así. - Nerea rechazó el abrazo del canario y se encogió rodeando sus rodillas. - Aitana me llamaba así... - El castaño agachó la cabeza, culpable.

- Lo siento... - Los dos amigos se miraron mientras que la menor seguía lamentándose.

- Oye, ¿te apetece ir al pueblo con nosotros? - Fue ahí cuando la rubia por fin alzó la cabeza y se dirigió a la gallega.

- ¿Al pueblo? Es Navidad... ¿Qué pinto yo ahí? - Agoney sonrió.

- Pasarla con nosotros, ¿o acaso pensabas estar aquí encerrada todas las Navidades?

- Pues ese era el plan... - Nerea volvió a agachar la cabeza y suspiró.

- Venga va, ¿qué vas a llevarte? - La gallega se levantó y abrió su armario de par en par. Agoney sonrió cómplice y sacó la maleta de su amiga.

Nerea, dejó de resistirse y suspiró. Tal vez no era mala idea pasar con sus dos mejores amigos la Navidad. Por los viejos tiempos. Les miró y sonrió leve.

- Me cojo los suéters de lana, ¿no? - Miriam y Agoney sonrieron y fueron corriendo a abrazarla. La rubia soltó una pequeña risa.

Nerea pasó la semana en aquel pueblo, tratando de olvidar a Aitana. No había ni un solo día en el que no pensara en ella. Pensó en felicitarle el día de Navidad, pero sus amigos se lo impidieron. Hicieron todo lo posible por que se olvidase de ella.

Aitana, sin embargo, pasó las Navidades en su casa con su familia. Sonreía, pero no era feliz. Su felicidad estaba en aquel pueblo, junto a una gallega y un canario. Escribió varios mensajes deseándole una feliz Navidad que no llegó a enviar. Desde que murió su abuela, Aitana no era gran fan de la época de Papá Noel y los regalos, pero había planificado la mejor Navidad del mundo. Con Nerea. Todo iba perfecto. Pero la cagó.

La única Navidad en la que podía ser feliz... Y sabía que no podía quejarse, pues le perseguía la culpabilidad.

Siento que sea un poco más corto y que haya tardado tanto en actualizar, no sabía como seguir xd

Intentaré actualizar más a menudo. Y vale ya sé que hacer en pleno verano un capitulo de Navidad no tiene sentido pero bueno, así es la vida.

Muchas gracias por leer y si os ha gustado no os olvidéis de votar :)

Un beso!

Mundos Paralelos. (Ifridge//Amiriam//Ragoney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora