Después del "accidente" con el perro, volví a tener más mascotas, ya que, según mis padres, sólo había sido un descuido, que por palabras de mi padre, había sido culpa de mi madre.
Siempre era su culpa.
En fin, todas terminaron igual, en un "descuidado y trágico final"
Creo que luego de la quinta mascota se rindieron, por lo que tuve que seguir con las mascotas de mis vecinos. Una lástima.
No entendía por qué no les gustaban las sorpresas que les dejaba, en ese entonces creía que no les gustaba el rojo.
Nunca supieron quién había sido, mis padres nunca dijeron nada, yo tampoco.
Creo que sólo una vez sospecharon de mí, pero no prestaron mucha atención, ¿quién podría sospechar del inocente Theodore Rowland?
Fue cuando cumplí 8 años;
Estaba en el colegio haciendo la tediosa tarea que la bruja llamada "profesora" nos había encomendado.Dibujar.
No es que no me gustara, de hecho, tenía muchos dotes de artista como ya saben.
El único y gran problema era que había que dibujar a tu compañero de banco.
Sí, lamentablemente me sentaba junto a otro niño, según palabras de la bruja "tenía que ser más sociable, no era sano para un niño estar matando hormigas en los recreos mientras los demás se divertían" ¿qué sabia ella si yo me divertía o no matando hormigas?
No quería hacer el dibujo porque no me caía bien, de hecho, los odiaba a todos.
Los odio a todos.
Pero pensé en mi madre y lo triste que estaría si es que la llamara la profesora otra vez para hablar "sobre mi actitud".
No me dejaría salir, y si no salía, no había diversión para mi.
y tú ya sabes qué es lo que a mí me divierte.
Por eso creí que hacerle un dibujo de esos que me gustaban a mí, también le gustarían a él.
No fue así.
Luego de eso recordé lo que decía mi madre; "las acciones demuestran más que las palabras"
Ya no era hacerle un dibujo, mi nueva meta se había convertido en darle algo que le gustara.
Por eso busqué un animal que se pareciera al de mi dibujo para regalarle.
Pero no tuve buena suerte esa vez, primera y única vez que quise hacer algo "bueno" y no resultaba.El problema uno fue que el niño era mi vecino, y el problema dos era que había matado a su propia mascota para regalársela.
Él no me rechazaría.
Él ni nadie.
Aún así no me arrepiento de la cara que puso ni de lo mucho que lloró al ver el animal muerto en la puerta de su casa, de verdad que me divertí mucho desde mi escondite entre los árboles.
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Blasphemy
Mystery / ThrillerMi sonido favorito es el que haces cuando intentas escapar de mí y ruegas para que no te haga daño, no sé, creo que me gusta el sonido de tus llantos y el sabor de tus lágrimas.