Capitulo 14: Conocerte

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Valeria

En mi caminar sin rumbo fui recordando el nombre de algunas calles y de algunos negocios que antes solían estar en las avenidas principales, pero el presente era notablemente diferente a como eran las calles hace más de 20 años según mis recuerdos, seguí caminando luego de cerrar el trato con Alejandro, siendo que aún no me sentía lista para devolverle la llamada a Carlos.

Carlos

Tome las llaves de mi moto y salí de casa con mis dos casos conmigo, esperando lograr encontrar con Valeria, colocándome uno de los cascos y otro enganchándolo en el vehículo, encendí la moto y le di marcha rumbo al supermercado donde hace horas antes había visto por última vez a Valeria, luego de unos pocos minutos había llegado al lugar en cuestión, estacione en el estacionamiento del local y me baje de la moto buscando señal de esa chica que podría reconocer al instante, busque y no dejaba de seguir llamando al que creía yo era el número de Valeria, pero los minutos se volvieron horas, siendo que ya eran las 11 de la noche y no encontraba señal alguna de Valeria, estaba a punto de rendirme con la búsqueda, pero un mensaje recibido en mi celular capto mi atención, te veo en casa, eso decía el mensaje.

Valeria

Luego de darme el tiempo para despejar mi mente, estaba lista para volver con Carlos y darle una explicación de mi drástica desaparición, le mande el mensaje diciéndole que lo vería en su casa, siendo que use el tiempo para pensar y caminar en dirección a la casa de Carlos, siendo que si caminaba unos 20 minutos más ya llegaría al domicilio.

Carlos

Al momento de terminar de leer el mensaje, me subí a mi moto y volví a mi hogar, esperando volverme a encontrar con Valeria, conduje bastante rápido siendo que pasaba entre los carros para así adelantarme a ellos, estaba a unos minutos más para llegar a mi casa, pero entonces fue que la vi en camino a la misma dirección.

Valeria

El sonido del motor de una moto se hizo escuchar y yo volteé esperando encontrarme con él, reconocí el vehículo al instante y a su conductor que al igual que yo lo miraba el ahora hacia lo mismo conmigo.

Carlos

Pise ambos frenos de mi moto, en un intento de lograr detenerme poco por delante de Valeria, la velocidad de mi moto disminuyo notablemente, pero el girar la vista para ver a Valeria hizo que quitara mi vista del camino, no haciendo que viera como el semáforo frente a mi había cambiado a rojo, haciendo que el auto que iba según yo bastantes metros de mi por delante, se detuviera y yo en un intento para no impactar contra él, tuve que girar el manillar de la moto hacia mi derecha, eso hizo que saliera del camino y fuera a dar contra la acera cayéndome de la moto y deslizándonos en la acera raspándome el cuerpo hasta que el vehículo y yo fuimos detenidos por un gran arbusto que parecía que nos había tragado tanto a mi como a mi vehículo.

Nuevamente el dolor era presente, haciendo que incluso no tuviera las fuerzas para levantarme de inmediato.- ¡Carlos! -Exclamo Valeria con un tono de preocupación y yo levante la mirada viendo como Valeria corría en mi dirección, llego hasta donde yo estaba y me abrazo con fuerza, en un principio eso causo un fuerte dolor en mi espalda y pecho, pero el dolor desapareció luego de ese abrazo que parecía curarme de mis heridas.- ¡Tienes suerte de estar bien! - Exclamo ella escondiendo su rostro en mi pecho, quite de mi cabeza aquel casco que me protegió y luego le correspondí a Valeria en su abrazo, luego de unos segundos de disfrutar el momento ambos nos pusimos de pie y con su ayuda logre sacar mi vehículo, viendo como el lado derecho parecía estar lijado y el espejo retrovisor de ese lado estaba ya inservible, me causo algo de tristeza el ver a mi moto en ese estado, pero entonces vi que Valeria también se mostraba triste por lo ocurrido.- No estés triste, las motos son fáciles de rompes, pero estoy seguro de que aun funciona - Dije en un intento de hacer sentir mejor a Valeria, quien podría estar triste y considerarse en parte culpable por el accidente que por suerte no fue a mayores, me subí al vehículo y por suerte logre encenderlo al primer intento, desenganche el segundo casco y se lo di a Valeria.- Volvamos a casa - dije dándole ese casco a Valeria y ella sonrió aceptando mi invitación siendo que se subió al vehículo para luego abrazarme por la espalda.- Volvamos a casa - Repitió con una voz tierna.

Luis

- Otra cerveza señorita - Pedí a la mesera, teniendo mis ojos aun puestos en una de las pantallas del bar deportivo donde estaban transmitiendo un partido fuera de temporada, me encontraba solo en la barra del local pidiendo cerveza tras cerveza.- ángeles...me pregunto si conocerán a santa o al ratón de los dientes - Dije para mí mismo siendo que ya estaba sintiendo los efectos del alcohol.- Tal vez tengan sus fiestas navideñas con el conejo de pascua - La voz de un desconocido se hizo escuchar y este se sentó a mi lado, era un estudiante como yo, al momento de sentarse trajo consigo una orden de alitas picantes.- Adelante hermano - Comento el recién llegado.- Gracias - Agradecí y la mesera me entrego la cerveza que pedí.- Ver un partido y beber una cerveza es mejor con alitas - El desconocido dijo y ambos chocamos cervezas en señal del nacimiento de una nueva amistad.- Luis - Dije mi nombre dándole la mano, el estrello la suya con la mía.- Alejandro - Él se presentó.- ¡Goooooooooooooo! - se exclamo en la televisión y en todo el bar.

Valeria

Llegamos a casa y dejamos los cascos junto con las llaves aun lado de la entrada, quería hablar con Carlos de muchas cosas, iba a confesarle el hecho de que estaba viva y que ahora podríamos olvidarnos de cierta línea que no podíamos cruzar, pero quería decírselo con toda la calma posible, fui hacia la cocina y abrí el refrigerado sacando el galón de leche que recién habíamos comprado.- ¿Quieres algo de cenar? - Pregunte viendo hacia Carlos... pero el no respondió, estando recargado en una de las paredes de la casa.- ¿Estas bien? - pregunte preocupada, Carlos ni siquiera me vio y se desplomó cayendo hacia adelante.- ¡No! - exclamé yendo hacia el dejando caer la leche en el suelo llegando a donde estaba Carlos logrando apenas evitar su impacto contra el suelo, en ese momento sentí un fuerte dolor de cabeza, la vida de Carlos estaba conectada con la mía, lo que significaba que cada vez que Carlos estuviera en peligro yo lo sabría.

Fin del día 2.

(N/A)
Nuevo cap amigos seguiré tratando de darles su cap diario siendo mi unico propósito.

Nos leemos mañana.


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