Capítulo Dos

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Margot Rivera.

Marcus abrió la puerta y en una velocidad casi invisible jalo a la chica dentro de la habitación, cerro la puerta y puso a la joven entre la pared y él, dejándola confundida y sin escapatoria, intento gritar pero él tapo su boca con una mano a la vez que la inmovilizada con el otro brazo. -¿Quién eres?- preguntó Marcus con voz profunda, ella no podía hablar pero no fue necesario... -Interesante, muy intenso, la típica chica que se queja de que todos los hombres son iguales, que son unos patanes y descerebrados, y todo porque nunca fuiste lo suficientemente bonita o interesante para atraer a un hombre de verdad... por el contrario, solo atraiste a Jason, Toby, Argus, etc, etc, etc... patanes que solo querían jugar contigo, y vaya que se divirtieron... hasta me dan ganas a mi de hacerlo tmb...- dijo a la vez que bajaba la mano con la que la sujetaba y acariciaba su muslo, ella de verdad estaba aterrada, no podía emitir ningún sonido con la mano de Marcus en su boca, pero su expresión era de un horror puro, y no se si era por lo que estaba pasando justo ahora o porque el hecho de que el sabia los nombres de quienes la hicieron sufrir en la juventud, "¿Sera que lo han mandado a vengarse?" no dejaba de preguntarse; Marcus seguía jugando con su miedo, haciendo crecer su éxtasis, oliendo su sangre, acariciando cada uno de sus cabellos.
La noche se avecinaba, la luna se estaba alzando en los cielos y el primer rasgo nocturno empezo a salir: las garras. Las enterró suavemente en sus piernas haciendo que gimiera del dolor y a su vez, el sentía un placer que no había sentido antes, la sangre comenzó a gotear en la alfombra y a escurrirse entre sus dedos, el bajo para besar las heridas de sus muslos, saborear el bello color carmesí que emanaba como miel de una colmena.
-Por favor... basta... lo siento... no debí... pero ellos me obligaron...- dijo ella entre sollozos y gemidos, el dirigió su mirada hacia ella, se levanto y se pego a ella, se acerco a su oído y le susurro: -Ellos no me mandaron, ni siquiera los conozco, pero lo merecían, aunque la idea de castigarte me es muy tentadora, eres una genio...- luego rió sutil pero vil y enterró sus dientes en el cuello de la chica, tomando solo un trago para disfrutarla lento, luego la arrojo con fuerza hasta el otro lado de la habitación, el golpe duro con la pared hizo que se rompiera un tobillo, ella comenzó a gritar del dolor, Marcus se abalanzo sobre ella callando sus gritos con su boca, la beso apasionadamente mordiendo sus labios hasta casi arrancarlos; su piel se torno mas blanca, sus colmillos terminaron de salir y sus ojos ahora lucian rojos.
EL dolor de la chica lo éxito a tal punto que opto por romperle el brazo, queria que sufriera mas, sus gritos sofocados en su boca lo hacian sentir mas placer, para el era un gran postre que disfrutaba lentamente.
Erick no siempre fue un chico de fiestas, de hecho, no era de amigos, y no es su culpa sino de su padre, vivió una infancia tormentosa, hostil, horrorifica, sin contar que su único amigo, su hermano, desaparecio cuando cuando Armand (como se llamaba en sus años de humano) aun era un niño, y debido a eso su padre desahogo toda su frustración en el, haciéndolo vivir un auténtico infierno. Supongo que es muy normal que en el presente le guste ir a Antros, socializar, tener sexo con alguna que otra chica de suerte y bailar, bailar hasta que amanece, eso es su delirio, aunque generalmente Marcus lo interrumpe antes con alguna de sus locuras, con algún accidente del que se entera y que obvio es causado por su amigo, pero esta vez, ya eran las 3:00 de la madrugada y ninguna señal referente al "Rey de los vampiros", ni un accidente, ni alguna sirena de la policía, nada, esto lo alarmó, no era normal -...Quiere decir que esta muy entretenido, y se que es lo único que lo entretiene, debo detenerlo antes de que haga algo que evite que volvamos a este pais en este siglo.
Corrio a su maxima velocidad hasta llegar al hotel, subio por fuera hasta el balcon, escucho los gemidos ya debiles de la chica, Erick dudo en entrar porque no queria ser participe de esa escena que ya imaginaba llena de sangre, -¿Vas a entrar? ¿O te quedaras ahi parado toda la noche?- se escucho desde adentro, entonces ya no tuvo mas opcion que entrar, -Eso no es verdad, pudiste negarte...- le dijo Marcus que leia el pensamiento de Erick como un libro, -Y es mi favorito, por cierto, lleno de drama, terror, momentos dolorosos, sin contar la terrible infancia y la constante culpa de mis atroces crimines..- dijo en tono dramatico burlesco -Bueno ya basta, no?- respondio Erick quien se decidio a entrar por fin y quedo impactado con la escena que tenia ante sus ojos, un desastre total, la alfombra beige que dejo antes de irse al antro ahora era roja, habia pedazos del uniforme de la chica por toda la habitacion al igual que algunas fracciones de su piel arrancada con los dientes y las garras, los muebles no estaban en el lugar correcto, de hecho estaba en el suelo o algunos ya ni siquiera se podia saber lo que era; -¿Que demonios hiciste Marcus?- pregunto Erick con clara furia en su expresion, entonces un gemido se escucho desde la cama, giro su mirada hacia alla y quedo aun mas horrorizado, la chica yacia ahi en el colchon tambien teñido de carmesi y humedo hasta el punto de escurrir, el pie izquierdo estaba mirando hacia el lado derecho y sus brazos completamente desfigurados, con multiples laceraciones en todo el cuerpo, parecia como un rompecabezas que habia que armar con lo que habia en el suelo -Eso es buena idea, juguemos...- dijo Marcus, Erick lo miro atonito, enserio como era posible que fuera capaz de hacer algo asi, el mismo hombre que le salvo la vida siglos atras y que fue tan amable con el, ¿En que momento se convirtio en un monstruo? -Siempre lo he sido- respondio Blackheart quien despues salio al balcon encendiendo un cigarro corriente que encontro en uno de los anaqueles rotos de la habitacion, Erick salio tras él.
-¿Cual es tu plan? ¿Irnos y no volver en 100 años? ¿Como siempre?- dijo Erick que estaba muy enojado.
-No seas la reina del drama, no hoy hermano, me siento tan lleno de vida, extasiado, desbordo placer, lo ultimo que quiero es tu amargura- dijo Marcus sin voltearlo a ver tomando una inhalacion de su cigarro, tan profundo que casi se llevo la mitad.
-Que gusto que disfrutes de tu estupidez Marcus, me da alegria que puedas gozar tu frivolidad, a costa de que yo me pierda de mis propios placeres al venir cada que haces algo, y ahora no solo eso, sino que tendre que despedirme para siempre de otro pais que amaba asi como Argentina, Gracias Marcus y enserio, me siento feliz por ti- recrimino Erick y luego se recargo en el barandal del balcon.
-La encontre... es ella- dijo Marcus y luego inhalo de vuelta de su cigarro y lo agoto, lo arrojo y volvio adentro, se acerco a la chica y abriendo su propia muñeca dejo caer su sangre en la boca abierta de la chica, el liquido se deslizo por su garganta y comenzo a multiplicarse dentro de ella, se esparcio por cada zona de su cuerpo que iba cruzando; Erick entro y lo miro atento sin decir nada, luego de un silencio largo hablo: -¿Es ella? ¿La indicada, la que he os estando buscando por meses?- pregunto, Marcus solo asintio con la cabeza, luego se dejo caer al piso recargandose en la pared, tomo la botela que estaba cerca y tomo un trago, se la arrojo despues a Erick quien le tomo un sorbo y luego fue a sentarse en el suelo junto a su amigo.
-A esperar...- dijo Erick.
-A esperar...- coincidio Marcus.

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14 de Enero 1972

Marcus es tan extraño, bueno, mas bien no lo entiendo, me confunde.
El sabe de mi debilidad por los humanos, me gusta su vida, su forma de divertirse, todo, pero odia que intente acoplarme a ellos, dice que soy un vampiro y que debo enorgullecerme de ello, no me tomen a mal, me encanta lo que soy, amo lo que soy, pero nunca tuve oportunidad de disfrutar mi humanidad, es algo que me gusta sentir, aunque ya no sea humano, pero por una noche me encanta pensar que si.
Hoy me descubrio teniendo sexo con una chica en una disco, y prepare todos mis discursos para enfretar su ira, su decepcion, lo que sea que me dijera, bueno, no lo que sea, porque no estaba preparado para verlo reir, y mostrarme su aprobacion, fue algo que enserio no me esperaba, pero que sin saber porque, me exito aun mas.
Es un amigo complejo, si, es un idiota y un ser inhumano y vil, pero siempre esta cuando lo necesito, que mas me queda sino hacer que hacer lo mismo por él.
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Hijos de LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora