Hijos de Luna

Capitulo Cuatro.

Brujas.

No le dijiste lo que tenias que decirle, yo no te di ese mensaje...
-No me senti capaz de decirselo, perdoname mi Diosa, te he fallado, merezco la muerte...-
Tranquila, solo hiciste lo que sentiste que era correcto y sabes, tienes razon, no era el momento, ya lo sera, las cosas pasan por algo, tu eres muy sabia, la espera sera mejor.
Alien tenia una mision al viajar de Inglaterra a México en busca de Marcus, darle un mensaje de su amada Diosa: Luna. Pero no lo cumplio, el mensaje que ofrecio a Marcus era una mentira, en realidad era una historia la que tenia que contar, una verdad, pero era tan cruel que no se sintio con la fuera de decirla, pues antes que bruja, era una mujer dulce, llena de amor por los seres vivos y su naturaleza, la vida, el aire, las personas, ella era feliz ayudando a otros, una digna Bruja Blanca.
Alien siempre habia sido asi desde niña, antes de serle revelado que era una hija de Luna, ayudaba a sus vecinos, a su madre en los deberes del hogar y amaba mucho a su hermana, Astoria, la apoyaba en todo, aunque no fuera del todo correspondida, eso nunca la detuvo para ser una buena persona, una buena vecina, hermana e hija.
Astoria Gatica por otro lado era alguien detestable, incapaz de sentir amor por otro ser vivo que no fuera ella misma, y aun eso le era dificil, al menos cuando se trataba de sus sectas prohibidas que le ocultaba a su madre y su hermana.
Ambas niñas Gatica eran brujas blanca y roja, pero aun no lo sabían, sin embargo sus actitudes ya reflejaban el color de su alma.
Cuando Astoria cumplió los 15 años llego una carta completo por fin el ritual de su secta y partió con ellos a recorrer el mundo propagando la crueldad por cada rincon, siempre sonriendo, demostraba ser feliz entre lo que ella llamaba 'su gente', pero no contaba con lo que pasaria después, pero ¿Qué se puede esperar de personas que son felices con la crueldad humana?. Astoria fue a buscar leña para la fogata de esa noche, caminaba y cantaba versos de una oración oscura, recogiendo algunos trozos de madera y llevándolos en su regazo, entonces escucho un ruido, miro a todas partes y no lograba ver nada, corrió y tropezó con los mismos troncos que se le cayeron al correr, los piso y la hicieron caer de cara en la tierra, se giro rapido boca arriba para ver hacia atrás a lo que ella pensaba que la seguía pero no, nada, rió de pensar que estaba loca, recogió la madera y al voltear para volver escucho ese ruido de nuevo, pero esta vez desde un árbol, miro fijamente y fue entonces cuando pudo distinguir dos luces rojas entre las ramas, al mirar bien, noto que eran ojos, volvió a correr pero no dio ni cinco pasos cuando se topo de frente con un ser temible, de cabello negro, largo y lacio, alto, de garras filosas, piel pálida, vestido con ropa antigua, se asomaban unos colmillos enormes de su boca y unos brillantes... ojos rojos.
Intento gritar pero su voz murió con una garra que se enterró en su garganta desgarrando sus cuerdas bucales, sus manos eran sometidas con una de las manos mientras con la otra la tomaba del cuello apretando la herida y empujándola hacia un árbol, causándole gran dolor, entonces soltó su cuello para con esa mano arrancar la vestimenta de la chica con piel del color de la noche. Sintió como si navajas se enterraran en su pecho, era el ser que la mordía para beber de su sangre, entonces la arrojo al piso y empezo a retorcerse como si algo lo incendiara por dentro, ella intento arrastrarse para escapar pero entonces sintió curiosidad por esa cosa que la había atacado, quien seguía retorciéndose arrancandose la camisa, gritaba como si ardiera y entonces se hizo realidad, pues llamas de fuego azul salieron del interior de su piel, invadiendo su pecho y todo su ser, quemando el resto de su ropa, pero cuando llego a la cabeza paso algo impactante, su cabello cambio con el fuego de negro a blanco y de pronto se extinguió y él cayo al suelo inerte.
Astoria se acerco arrastrándose hasta el, puesto que aun le dolían las heridas que le había causado, comenzó a ver de pronto mas luz y miro hacia arriba, la luna de pronto se veía mas cerca y brillante, fue entonces cuando escucho una voz en su cabeza: Tranquila preciosa, ahora estarás bien, el no va a tocarme nunca mas, no lo voy a permitir, cuidare de ti, y seras inmune a su fuerza, poder o ataque, porque seras protegida por mis leyes... a partir de hoy eres una de mis hijas, mi querida bruja roja. De alguna manera ella sabia que esa voz le pertenecía a la luna, y asintió a lo que esa voz decia, y en su mano ya no sintió ni una gota de sangre, su herida estaba curada.
El Vampiro abrió los ojos y la chica se levanto asustada pero luego recordó las palabras de la luna, el ser que ahora tenia el cabello blanco se levanto y se abalanzo sobre la chica, pero ella no temió, permaneció firme y de pie frente a él, quien choco contra una fuerza impenetrable que no podía ver, entonces ella sintió como un poder desconocido apoderarse de ella y actuar con su cuerpo sin tener nada que ver con ello, la hizo acercarse a el y entonces hablo con voz que no era la suya: -No puedes tocarla, es hija mia ahora, de hecho, ya era una bruja desde antes pero no lo había descubierto, y tu, haz sido castigado- él la miro desconcertado, no sabia de que hablaba, y como si leyera sus pensamientos le respondió: -Tu cabello ahora es blanco, un efecto por beber sangre de bruja, seras señalado como una advertencia para que ningún otro vampiro se atreva a lastimar a una de mis hijas, puesto que el próximo que lo intente sera convertido en polvo-. Inmediatamente después de eso la chica cayo al piso débil, la fuerza que la había poseído se esfumo, se levanto y quiso burlarse del vampiro que no hacia otra cosa mas que mirar su propio cabello con aberracion, pero al intentar hablar, no emitio ningun sonido, la luna habia curado sus heridas pero no el desgarre de las cuerdas bucales, sin duda un precio que valia la pena pagar a cambio de ser protegida por la luna, a cambio de ser una de sus hijas.

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3 de Diciembre 1602
Realmente no estoy en esa fecha, pero quiero relatar lo que ocurrio ese dia.
Marcus acababa de terminar de inducirme al mundo de los vampiros, darme las reglas, incluso me habia dado ya mi nuevo nombre y se fue, yo le habia literalmente rogado para que me dejara ir con él, patetico lo se, pero no sirvio de nada, el me dijo que no queria compañeros de viaje, que la soledad era su unica amiga y que siguiera mi propio camino, que jamas lo volveria a ver, desaparecio.
Yo me senti nuevamente derrotado, hubiera sido mejor que me dejara morir. Yo me habia arrojado de un precipicio al escapar de la institucion mental en la que mi padre me encerro por ser debil, estuve ahi por años hasta que misteriosamente pude escapar y luego de correr por un largo rato comprendi que no servia de nada, no queria seguir viviendo y me lance del borde de un barranco, no mori al instante pero estaba muy mal, solo era cuestion de esperar unos minutos, pero entonces llego él, se inclino hacia mi, tomo mi mano y mordio mi muñeca bebiendo de mi sangre, yo estaba muy debil para asustarme, ademas, queria morir, de una u otra forma, el solo convertia mi deseo en realidad, pero luego me miro detenidamente, algo vio en mi sangre que hasta la ahora, un siglo despues, no ha querido revelarme, pero eso lo hizo darme de su sangre y convertirme. Por un momento me senti feliz de ser un vampiro porque crei que por fin habia encontrado un amigo en ese ser tan intimidante de cabello negro y ojos rojos, aunque luego de alimentarse de mi y de algunos guardias que me perseguian, sus ojos se tornaron azules, y ademas que de dia no se veia tan monstruoso.
Pero se fue, no le importo nada, yo me quede ahi preguntandome ¿Para que carajos me salvo la vida y me convertio en un ser como el si me iba a dejar solo a mi suerte de nuevo?. Pero en mi camino luego de dos dias volvi a cruzarme con el, pero con el cabello blanco, se veia molesto y como una fiera, me parte para caminara sin ser interrumpido, pero se freno y sin voltear se dirigio a mi: -Vendras conmigo- No pude evitar sonreir, no pregunte que habia pasado con el para que cambiara de opinion, me basto con saber que lo habia hecho y que lo que hubiera pasado lo cambio.
Fue despues cuando me entere de lo ocurrido, todos lo sabian, el vampiro que bebio sangre de bruja, lo veian como un tonto y eso lo enojaba, ser una burla. Llego la luna de sangre y fuimos a la batalla, todos se burlaban de el ahi, vampiros y lobos, incluso brujas, pero entonces la batalla inicio, el corrio arrancando cabezas de lobos, sus organos, separando sus brazos y piernas, jalando la piel de sus cuerpos, hizo una masacre, fue el vampiro mas sanguinario de la noche, y fue ahi que algunos comenzaron a dejar de insultarlo.
Con los años, la burla del vampiro que bebio sangre de bruja desaparecio, solo quedo el vampiro mas intimidante de todos: Marcus Blackheart.
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Cuando Astoria volvio al campamento desnuda, sin voz y con una expresion fria, quisieron todos saber que le habia ocurrido, pero ella opto por no decir nada, no queria que nadie supiera lo que le habia ocurrido.
Pero esperen, ustedes se deben preguntar ahora mismo: ¿Entonces como se corrio la voz de la humillacion de Marcus Blackheart?, bueno, alguien tenia que contarlo, y Astoria no lo iba a decir, la luna menos, asi que sabiendo que solo yo me habia enterado, pues tuve que revelarlo, y hasta ahora no ha descubierto quien fue la persona que revelo su secreto.