Flash Up // Bnior - JJPROJECT

Capítulo 15

Creo que es verdad cuando dicen: "el primer amor, nunca se olvida", pues, en mi caso, jamás podría olvidar a Im Jaebum. A pesar del tiempo y de todo lo que pasamos, mis sentimientos están intactos, como el primer día.

Perdonar, es un ejercicio que pude hacer con Bummie, pues solo quiero comenzar, otra vez, y cumplir mi sueño de estar con él. Parece cursi o ridículo, cada vez que siento mariposas en el estómago, cuando mis piernas tiemblan o el color de mis mejillas, es como si estuviera caminando entre nubes.

Vivir nuestro amor a escondida era algo necesario, muchas personas serían heridas en el camino, principalmente, nuestros hijos ¡DEMONIOS! Somos como Romeo y Julieta.

- Jinnie...- sentí una voz suave, la cual me llamaba. En ese momento, me dirigía al restaurante cerca de la empresa- bebé- fui jalado, siendo interceptado por un fornido cuerpo- ¿Sabías que el dueño de esos labios los viene a reclamar?- me besó, dulcemente.

- ¡Estás loco! Alguien nos puede ver, debemos ser cuidadosos- soltó un bufido- si eres buen chico, iremos al parque, podrás robar todos los besos que quieras- Jae alzó una ceja, incrédulo ante mi aseveración.

- ¿Estás seguro, Park? No sirve que te arrepientas luego- dejando un suave toque en mi cuello.

- ¡Promesa!- estaba seguro de que, el pelinegro, tenía "otros" planes, los cuales incluían no volver al trabajo y estar todo el día juntos.

- Te amo, Park...me tienes entre tus redes- susurró en mi oído, para ese entonces, mis piernas eran mantequilla- hoy eres mío, en realidad siempre lo eres- lo vi sonreír ¿Cómo podía ser tan perfecto? Los años lo habían vuelto más sexy de lo que era.

- Y-yo...- el muy cabrón siempre me ponía nervioso y esta no fue la excepción- ¿Vamos a comer?

Sostuve su mano, por aquellas calles en que vivimos nuestra adolescencia, llegando al restaurante de la señora Kim, el lugar seguía como aquellos días en que evadíamos al mundo y vivíamos nuestro amor, libremente. Fue un día entre recuerdos, sueños y besos robados; no había sido tan feliz, desde el nacimiento de Hyunjin y Jeongin.

- ¡Soy feliz contigo!- expresé, mientras él escondía su rostro en mi cuello, dejando un suave beso.

- Podría estar así, por siempre ¿Por qué eres tan delicioso?- creo que jamás mis mejillas se habían encendido tanto- ¿En serio debes ir a casa? ¡Huyamos!- haciendo un mohín ¡Maldito Cabrón!

- ¡No hagas eso Im!

- ¿Hacer qué?- abultó su labio. Solo bastó eso, para que la pasión desbordara en ese beso demandante- si lo haces, no podré controlar lo que provocas en mí- succioné su labio inferior.

- Esa es la idea, amor- lanzó un guiño en mi dirección, el muy maldito- mi segundo deseo...es que Hyunjin me acepte- ambos éramos conscientes de que, por el momento, era imposible, siquiera un acercamiento.

- Definitivamente salió terco como tú- me miró con sorpresa- son como dos gotas de agua: posesivos, celosos, tercos y rebeldes- sentí cómo bufó, ante lo cual, solté una carcajada.

- Nuestro hijo, aprendió esas cosas de Tuan- "nuestro hijo", suena jodidamente bien.

- ¡Estoy rodeado de hombres celosos y tercos!- carcajeó fuerte- solo dejemos que el tiempo nos dé la respuesta. Tenemos varias pruebas que enfrentar- me miró expectante- si estoy contigo, todo valdrá la pena- acarició mis labios ¡joder! Tan solo su toque podía encender mil sensaciones, dentro de mí.

- Bebé, creo que debes saber que, dentro de dos semanas, debemos viajar a Busan- Mark había comentado algo, en la cena de ayer- será por 10 días, mientras concretemos el proyecto en esa zona- eso solo significaba que debía quedarme al frente de la empresa y los niños- No sé cómo sobreviviré sin ti- Jaebum parecía un adorable gatito, quién pensaría que ese hombre frío, reservado y sexy, podría ser tan adorable.