Elección (Chanbaek)

Lazo

Nunca en su vida había manejado su moto tan rápido, pero la necesidad de Chanyeol por morder a Baekhyun le hizo olvidar todas las medidas de seguridad que debía emplear al conducir. El calor del cuerpo del omega apretado a su espalda y su inconfundible aroma dulce y suave lo estaban volvienviendo cada vez más ansioso, logrando que su lobo estuviera casi en la superficie.

La tensión no abandonó su cuerpo hasta llegar al garage de su apartamento, estacionó su motocicleta y tomó a Baekhyun entre sus brazos sin perder más tiempo. Corriendo por las escaleras hasta llegar a su departamento, intrudujo a llave y abrió la puerta, para después cerrarla con una patada y llegar hasta su objetivo: su habitación, su cama, en donde marcaría a su omega, su Baekhyun.

Depositó el cuerpo del omega con suavidad sobre la cama, admirando los ojos brillosos y las mejillas sonrojadas de Baekhyun. Todo en él pedía a gritos que lo marcara como suyo, pero no quería formar en lazo sin antes estar seguro de los deseos del omega.

-Baekhyun...

-Lo quiero, Chanyeol- se adelantó el omega, leyendo la preocupación en los ojos del alfa- Si eres tú, entonces sí, sí, y mil veces sí. Yo, Byun Baekhyun, quiero que me marques como tu omega.

-Siempre has sido mio, Baekhyun- dijo el alfa con aquella chulería que conquistó al omega anteriormente- Te prometí que todos tus besos serían míos, así como tu cuerpo.

-Te amo, Chanyeol

-Siempre te he amado

Baekhyun sentía como su cuerpo ardía hasta el punto de ebullición, siendo consciente de que el celo omega se presentaba para indicar al alfa que estaba listo para ser reclamado. No obstate, el celo también trajo consigo las inseguridades en su autoestima. Él era un defecto en la manada, y no podía permitir Chanyeol se atara de por vida a él, sabiendo que jamás podrían llevar una vida normal. Era muy probable que jamás pudiera darle un heredero a su alfa.

-Chanyeol...

-Lo siento, Baekhyn. Ahora no aceptaré un no por respuesta

El alfa atacó el cuello del omega, de donde provenía la dulce esencia de su omega con más fuerza. Sus dientes dolían por probar la carne de su cuello, pero notó que Baekhyun estaba tenso bajo suyo.

-¿Sabes que eres perfecto para mí?- dijo Chanyeol, sabiendo cuales eran las preocupaciones de Baekhyun- Yo te amo por quien eres, no por lo que se supone que tendrías que ser.

-¿Cómo sabes lo que pienso?- cuestionó el omega con asombro.

Chanyeol sonrió y aprovechó el desconsierto de Baekhyun para besar sus labios de manera fugaz- ¿Recuerdas nuestro primer beso? - recibió un asentimiento por respuesta- Bueno, en ese entonces, yo mordí tu labio y probé tu sangre.

-¿Y?

-Y eso permitió que un lazo se formara entre nosotros. Tú eras consciente, de alguna manera, de mis sentimientos, y yo, era consciente de los tuyos. He podido daber cuando estabas triste o feliz. Esa es la razón por la que siempre aparecía cuando tú me necesitabas. Estamos destinados a estar juntos.

De repente Baekhyun sintió el lazo del que hablaba Chanyeol. El alfa parecía irradiar una especie de energía caliente, que le indicaba al omega felicidad y seguridad, y no necesito nada más para entregarse a Chanyeol.

Tomando la inciativa, Baekhyun llevó sus brazos al cuello del alfa y lo acercó hacia sí para besarlo de manera apasionada, abriendo su corazón a Chanyeol en entrega total. Poco a poco se fueron quitando la ropa a medida que se besaban. El alfa se concentró en recorrer cada centímetro del cuerpo del omega, sintiendo que se perdía en la suave piel de Baekhyun. La espera había acabado y Chanyeol necesitaba tener al fin a su pareja.

Baekhyun, sintiendose libre por primera vez en su vida, gruñó en el centro del colchón, impacientandose por la demora de Chanyeol en marcarlo finalmente como suyo. El alfa le sonrió con chulería, dandole a entender que las cosas se harían a su manera. Porque, a pesar de que él siempre se había mostrado atento y delicado con el omega, ahora era el lobo el que quería someter a su pareja, y no solamente follarselo sin más, sino que demostrarle que harían el amor ahora y siempre.

Por eso, beso cada tramo de piel que quedó a su merced, mientras el omega se deshacía en gemidos y suplicas a su alfa, exigiendo que fuera más deprisa y clavandole las uñas en la espalda cuando tiraba de él en besos demandantes. Aunque al principio ardió un poco, Chanyeol se concentró el preparar el culo de Baekhyun se manera concienzuda, evitando causar algún daño al omega, y sintiendose cada vez más al límite por los agudos gemidos de Baekhyun.

Chanyeol observó su rostro contorsionado por el placer con una satisfacción animal, sintiendose el alfa con más suerte del planeta. Y lo penetró despacio, haciendo que Baekhyun sintiera cada centimetro de Chanyeol dentro suyo. El omega se abrazó a la espalda del alfa y le rodeó la cintura con sus piernas al mismo tiempo que levantaba las caderas para ir al encuentro de los embistes para una mayor profundidad, lo cual enloquecía cada vez más a Chanyeol. El alfa esta vez no se resistió, no pudo, porque ese cuerpo que estaba debajo de él era suyo y su lobo le decía que no necesitaba contenerse más, que lo marcara como su propiedad de una vez por todas.

Y desde ese momento todo fue más rápido y duro, el ambiente estaba cargado con el aroma a sexo y feromonas, y el sonido de sus cuerpos al chocar se convirtió en la melodía favorita de Chanyeol. Baekhyun fue el primero en sentir que el climax estaba cerca, por lo que, por instinto, levantó su cabeza y la acercó al hombro del alfa en busca del punto exacto en donde debía morder para sellar su vínculo, siendo imitado por Chanyeol. Ambos mordieron el hombro contrario, alcanzando así el climax en voces roncas que gritaba el nombre del otro. El nudo se formó, dejándolos enlazados unos pocos minutos, completandose así el emparejamiento.

Chanyeol rodó ambos cuerpos, dejando a Baekhyun descanzar sobre su pecho- Te amo- susurró besando suavemente los parpados del omega.

Baekhyun levantó su cabeza y conectó sus ojos con los de Chanyeol, viendo en ellos la felicidad y el amor que sentía el alfa por él. El omega sintió que los te amo de su alfa no eran palabras vacías, sino que una declaración eterna de que ambos estaban hechos el uno para el otro.

-Yo también te amo, mucho...

Y Chanyeol no pudo evitar sonreir, porque era la primera vez en mucho tiempo que la felicidad era mucho más grande que el resentimiento. Porque su corazón estaba lleno del amor de Baekhyun, y daba gracias a la luna por haberle permitido encontrar semenjante tesoro, el cual guardaría celosamente y protegería con su vida.