Mi destino eres tú

Capítulo 4

-Hola...

-¿qué quieres?.

-Te ví llorando y fuí a ver que te pasaba, pero te fuiste corriendo, así que te seguí hasta aquí.

-¿Tanto te aburres que te tienes que meter en la vida de los demás?.

-Bueno, yo...

-¿Sabes?. Los tipos como tu no me caen nada bien, asi que vete.

No es que no fuese guapo, en realidad si lo era, era muy alto y muy fuerte, tenía el pelo castaño claro y los ojos de color azul muy claro casi gris,se llamaba Zack, pero de verdad, no me interesaba y de verdad, entre el pie sangrandome, el tipo este al lado y encima el dolor de cabeza que tenía, sentía que pronto me desmayaría y no era lo que me apetecía justo en este momento.

-No me voy a ir, tienes el pie sangrando y estas muy blanca, será mejor que te lleve a la enfermería.

-Tu no me vas a llevar a ningún lado.

-Mira, yo no tendría porque estar aquí ayudandote, ya que a mi esto no me no hace ningún bien, pero si no te ayudo te vas a quedar aquí helada ya que no puedes andar. ¿Me equivoco?.

-Sí puedo andar, y aunque no pudiese me las apañaría, no me gustan los tipos como tú.

Me fuí a levantar pero sentí un enorme dolor en el pie y me caí. Lo último que recuerdo es que me cogió y mientras me llevaba en brazos a la enfermería me dormí.

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Era día 25 de Noviembre y me encontraba en mi habitación arreglandome para el cumpleaños de Sahara, que lo celebraba en su casa y teníamos permiso todos los alumnos para ir, ya que al día siguiente era el baile del internado. Me arreglé, y me senté a esperar a Zack.

Después de llevarme a la enfermería en brazos, luego a mi cuarto, ayudarme a recogerlo, cambiar mis sabanas gracias a Emma y sus amiguitas, meterme en la cama y quedarse hasta que durmiera, lo único que podía hacer era ir al cumpleaños y al baile con el, pero como "amigos", ni siquiera me llevaba bien con él.

Cuándo por fín llego Zack, me ayudo a subir a su coche, ya que el día de lo del lago me rompí el pie y me seguía doliendo un poco.

Una vez que estubimos en la fiesta Zack y yo nos separamos. Yo fuí a darle a Sahara su regalo que por cierto estaba con su nuevo novio, Alvaro, un nuevo estudiante.

Una vez le entregué el regalo a Sahara me senté en una silla y me cogí una botella de agua, yo en pocas ocasiones bebía, normalmente cuando me encontraba mal, pero esta vez no me encontraba mal, simplemente aburrida. Me levanté y me fuí al patio, era el momento de irme, ya me empezaba a aburrir, pero justo en ese momento apareció James...

-¿James?.

-Hola Anna, venía para decirte que porfavor perdonases a Emma, ella está muy mal por lo que paso, no habla, ni duerme ni nada...

-James a mí me dolió mucho lo que me hizo, siempre hemos tenido nuestras discursiones, pero nunca me he sentido tan mal como ahora.

-¿Y?

-Me pensaré si perdonarla. Aun qué, ¿De qué me servirá?, ella seguirá saliendo con sus amiguitas.

-¿No te has enterado?.

-¿Ves qué tenga cara de haberme enterado eh James?. ¿Enterarme de qué?.

-Nada más la querían para acercarse a mí y sacarla secretitos, una vez que le sacaron todo y lo gritaron por todo el internado ya no la querían para nada.

-Pobre hablaré con ella, pero hoy no, me tengo que ir al internado.

Una vez que encontre a Zack le pedí que me llevara al internado y allí vimos una pelí. Cuando terminó la pelí me acompaño a mi cuarto, le dí un beso en la mejilla y me fuí a dormir.