Mi destino eres tú

Capítulo 7

Pasaron los días, y ya era 5 de Diciembre, el cumple de Emma.

James, que ahora salía con Emma y yo, le habíamos hecho una fiesta sorpresa en mi cuarto. Lo habíamos decorado todo con confeti y guirnaldas, y yo, había hecho con Noa una tarta.

A Noa le encanta cocinar, y como es una chica encantadora me ayudó. Eso había hecho que tubieramos muy buena relación.

Cuando ya eran las 22:00 todos nos pusimos en nuestros puestos, apagamos la luz y nos quedamos en silencio. Estuvimos esperando un rato, pero cuando por fín entró Emma, saltamos todos y gritamos ¡FELICIDADES!.

Emma vino corriendo a abrazarme y le entregué su regalo. Cuando lo abrió empezó a llorar. En la cajita había una foto nuestra de cuando teníamos trece años y una pulsera de plata en la que ponía: Fuímos, somos y seremos. Gracias hermana.

Enseguida empezó a sonar la música, le puse la pulsera a Emma, y se fué a bailar.

Yo me senté en una silla y cogí una botella de agua.

-Hola.

Alcé la cabeza y ví a un chico de unos 20 años, rubio y de ojos marrones.

-Hola.

-¿Aburrida?.

-Pues sí.

Los dos empezamosa reir.

-Hola cariño. ¿Quién es tu amigo?.

Me quedé asombrada, Zack estaba actuando como si fuese mi novio, y lo gracioso era que no me hablaba con él y ni siquiera lo había invitado a la fiesta.

El otro chico se fué y me quedé a solas con Zack.

-¿Por qué has hecho eso?.

-Porque no quiero perderte.

-Nunca me tuviste.

-Mira se lo que vistes y lo siento, pero son por motivos personales...

-No tienes que explicar nada, ya lo dejaste bien clarito cuando besabas a esa chica.

-Si vamos fuera te lo explico.

No sabía que pasaría, pero asentí y salí.

Llevabamos un rato andando hasta que llegamos al lago, yo me senté en un columpio y el en el de al lado.

-Anna.

-¿Qué?.

-No te puedo explicar lo del pasillo, pero yo se que no la quería besar.

-Ya claro, dejame adivinar, apareciste encima suya por arte de magia, o mejor, una fuerza sobrenatural te arrastró hasta sus labios.

-Anna si me escuchases...

-¿Qué quieres?.

-Desde que te conocí siento que ya no quiero estar con nadie salvo contigo, contigo me siento agusto y yo mismo. Me encanta como intentas quedar por encima de mi o cuando finges que me odias, me encanta como pronuncias mi nombre, me encanta tu sonrisa, me encantan tus ojos, me encanta todo de tí. ¿No lo entiendes?.

A medida que decía esto sentía como subía el rubor a mis mejillas, pero a la vez sentía confusión e ira.

-Todos estos días sin hablar contigo han sido un infierno. ¿No ves que ya no puedo vivir sin ti, que cada día que te veo  me siento más feliz?. Estoy harto de fingir.

Me levanté enseguida del columpio y me puse enfrente suya.

-¡CÓMO REUNES EL VALOR PARA DECIRME TODO ESTO DESPUÉS DE BESAR A ESA TÍA!. ¡¿QUÉ ES LO QUE NO ENTIENDES?!. ¡NO QUIERO QUE ME HABLES EN TU VIDA!. ¡DÉJAME EN PAZ!. 

-¡ES QUÉ NO QUIERO!.

-Pero yo sí.

Dije con un hilo de voz.

Él se quedo sorprendido, pero enseguida volvió a hablar.

-Estas helada.

-¿Qué?.

Tenía la mano puesta en mi brazo. Él se quitó la chaqueta y me la fué a poner encima, pero yo no le dejé.

-No quiero tu chaqueta, no quiero nada de tí.

Salí corriendo con lágrimas en los ojos. Enseguida empecé a preguntarme cosas a mi misma. ¿Por qué has hecho eso?. Te estaba pidiendo perdón.

Me senté en una roca y empecé a llorar, hasta que ví que alguién me cogía y me llevaba a mi cuarto, era Troy, pero, ¿Qué hacía aquí?.

Lo último que recuerdo es que alguién me metía en una cama que no era la mía y me dormía.

Esa noche soñé con todo lo ocurridó.

Con la aparición de Zack despues de una semana y media, con su confesión, con lo que sentí y con mi repentino comportamiento.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Se que es un capítulo corto chic@s, pero es que estoy muy ocupada, de todos modos subiré pronto.

¿Volveran a hablar cara a cara Anna y Zack?.

¿Pasará algo entré James y Emma?.

Lo veremos en el próximo capitulo.

Un besito y os dejo con la duda mis amores.