Capítulo 6

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Las palabras de Entrapta estaban plasmadas en mi mente, pero aún más el sonido de la puerta de fondo en la llamada, ¿La habrán descubierto? Realmente espero que no.

Ahora mismo era urgente que le contara a Adora todo lo que estaba pasando, necesitaba de su ayuda.

Ella estaba en una reunión con los demás, la Reina confiaba en mi; pero no lo suficiente para dejarme asistir a una reunión en la cual planeaban un ataque a la horda, solo que se les olvidaba que tengo oídos más desarrollados y podía oírlo todo, pero por ahora había decidido no darle importancia.

Mientras esperaba a que saliera, pensaba en todo lo que diría y en una disculpa para ello, así pasaron varios minutos hasta que escuche la puerta abrirse. Todo lo que había pensando se fue por la borda y heche a correr hasta la habitación bajo la mirada confusa de algunos guardias que custodiaban los pasillos.

¿Por qué carajos me era tan difícil decirle?

Me lanzé a la cama bocabajo y pronto sentí como está me atrapaba entre sus almohadas y edredones, pero ya no me importaba y menos ahora que estar atrapada ahí era lo mismo que estar en mi situación actual.

Pronto pude escuchar pasos apresurados que se acercaban a la habitación, y de repente abrieron la puerta. Levanté mi mirada y era Adora quién tenía una deslumbrante sonrisa en su rostro, al verla sonreí.

- ¿Ahora por qué tan feliz? -
- Por que sí - se lanzó junto a mí y ambas rebotamos en la cama, soltamos unas pequeñas risas al unísono.

La mire y descubrí su mirada sobre mí, me dedico otra sonrisa y se acercó para dejar un pequeño beso en mis labios.

- Después de todo lo que pasó, se me había olvidado que ya podía hacer esto contigo - dijo con una sonrisa la cual le devolví.

Me acerqué de nuevo a ella y la abraze, ella me correspondió.

- Quiero ir a acampar de nuevo - solté de repente, quería olvidar todo por un momento y sirve que podía volver a llamar a Entrapta.
- ¡Claro! ¿Cuando sugieres que sea? Deja llamo a los chicos - se iba a levantar pero la tomé de la cintura antes de que lo hiciera y la volví a recostar.
- Quiero ir solo contigo - puse una mano en su ahora sonrojada mejilla y me acerqué para dejar un pequeño beso en sus labios - ¿Que dices? -
- Por supuesto que sí ¿Vamos hoy? - se apresuró a decir.
- Si - le sonreí y ella hizo lo mismo mientras me volvía a besar, está vez me encargué de profundizarlo.

Mis manos seguían en su cintura y ella subió las suyas hasta mi cuello, se sentía tan bien hacer esto, era como si todos mis problemas desaparecieran por un momento al estar con ella. No me di cuenta cuando fue que ella termino sentada en mi regazo pero ahora lo estaba y me parecía extremadamente sexy, ya podía sentir que ese beso había pasado de tierno a uno candente. Sentía como mi cuerpo se ponía cada vez más caliente, nunca me había pasado algo así, pero me gustaba.

Nos separamos abruptamente para tomar aire, pero no paso mucho cuando nuestros labios ya estaban unidos de nuevo, podía escuchar unos ligeros quejidos que provenían de la garganta de Adora por el beso, esto solo hacia que me excitara más.

Creo que hubiéramos pasado a otra cosa si unos golpes en la puerta no nos hubieran hecho parar. Ambas nos separamos rápidamente y jadeando, ella se levantó con cuidado de mi regazo, se limpio los labios y fue a atender a quien estuviese tocando.

Pronto me acomode y también limpie restos de humedad en mis labios, intente calmarme mientras Adora hablaba con quien creo que era Bow. Pasó un rato y Adora finalmente cerró la puerta de nuevo, me volteo a ver sonrojada. 

Se acercó lentamente y se recostó a mi lado de nuevo.

- Eso fue… Wow - dijo mirando al techo.
- Lo sé - dije soltando una risa nerviosa.
- ¿Quieres repetirlo? - me miró juguetona.
- Si - respondí si dudar.
- Bien, pero será luego - me dió un pequeño beso en la mejilla y se levantó con rapidez y fue hacia la ducha.
- ¡Eso es cruel! - le grité, pues me había emocionado en vano.
- ¡Mientras ve acomodando todo para ir a acampar! - gritó desde dentro.
- Cruel y mandona, que buena combinación -
- Te escuché y para tu información eso lo saque de tí - solté una pequeña risa por su comentario y sin más me puse a acomodar todo para después.

[…]

Adora armaba la tienda de acampar justo donde habíamos estado la otra vez, mientras yo ordenaba las demás cosas.

Una vez que todo estuvo listo, ambas nos pusimos a charlar y jugar a varios juegos. Me estaba divirtiendo mucho pero aún así no dejaba de pensar en la llamada que tenía que hacerle a Entrapta.

Seguimos con una larga sesión de besos hasta que nos dimos cuenta de que ya estaba oscureciendo y se nos había olvidado por completo la fogata. Me ofrecí a ir de nuevo, no quería que Adora se encontrará con algún hordiano rondando por ahí, así que a duras penas me separé de ella para ir por las ramas.

Y así fue, pero como tengo tan mala suerte, terminé escondiéndome por qué un par de soldados hordianos registraban la zona. Y de nuevo pude escuchar su conversación.

- ¿Cómo sigue la ex capitana Scorpia? -
- Sigue en mal estado, pero igual ya no importa, supuestamente Hordak las ejecutará mañana por la tarde -  ¡NO!

Iba a salir corriendo, tenía unas náuseas enormes, pero al girar me encontré con Adora.

- Adora, hola - dije nerviosa.
- ¿Que haces aquí? - su rostro estaba serio.
- Escucha, no es lo que tú piensas, es solo que…-
- ¡Hey! ¿¡Quién anda ahi!? - gritó un guardia.
- Vámonos - Adora tomo las ramas de mis brazos y se fue corriendo, yo detrás de ella.

Una vez que supimos que no nos siguieron, ella tiró las ramas al piso y se me acercó enojada.

- Catra ¿Que demonios? -
- Escucha Adora puedo explicarlo, es que…- estaba en un dilema gigante, tenía que decírselo, aunque me odíara de por vida.
- ¡Ya dilo! -
- ¡Es que Scorpia y Entrapta están en peligro, Hordak se está vengando de mi traición haciéndoles daño a ellas y tengo que sacarlas de ahí! - ¡No! Estúpida, debía decirle la verdad y no esto.
- ¿Que? ¿Entrapta está viva? - parecía estar en shock.
- Si, lamento no haberlo dicho antes, pero no había pensando en ello en este tiempo -
- Tenemos que sacarla de ahí y también a tu amiga -
- Si, pero no ahora, seguro Hordak tiene un plan y ya debe estar esperándonos, debemos prepararnos - sentía mi corazón latir con fuerza, la información que había escuchado era demasiado.
- No es todo ¿verdad? Dimelo Catra -
- Las matarán Adora, mañana en la tarde si no logro sacarlas a tiempo -
- ¿Desde cuándo sabías que estaban en peligro? -
- Desde la primera vez que acampamos, fue por eso que me demore al traer las ramas y es por eso que necesitaba el comunicador, quería saber cómo estaban, y también es por eso que ayer llegué llorando al castillo, están así de mal por mi culpa Adora - tape mi rostro con mis manos - y… Eso no es todo -
- ¿Que pasa? -
- Yo… No llegue al reino para unirme a la rebelión, todo fue un plan de Hordak para acabar con Luna Brillante, yo iba a ser su mensajera y lo iba a ayudar a derrotarlos a ustedes, lo siento tanto Adora - mire hacia el piso, pues no tenía el valor para verla a la cara.

Pero pronto pude sentir la calidez de su cuerpo rodeandome.

- ¿Que es lo que haces? - estaba confundida ante tal reacción.
- Estoy molesta ¿De acuerdo? Pero me alegra que me lo hayas dicho, y no te preocupes, ya pensaremos en algo para sacar a Entrapta y a tu amiga de ahí -


Se viene lo bueno >:3

Problems Around Me |Catradora|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora