CAPÍTULO 8

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Desperté... sentía como si hubiera pasado un camión por todo mi cuerpo, tal vez era por lo que lloré. Camine al baño y tome una ducha caliente para quitarme aquella pesadez, al salir del baño tome un conjunto de ropa, una camisa mangas cortas morada, una falda tubo ploma y un sacón plomo sentía demasiado frío. Los tacones plomos... sequé un poco mi cabello para que no se viera que no tenía mucho interés en mi ropa el día de hoy.

Baje a la cocina terminando de arreglarme la pintura de los ojos, se veían demasiado hinchados, no quería dar el aspecto de María Magdalena. Entre a la cocina y tomé dos termos y comencé a preparar un poco de café, café expreso para Taehyung y café con leche para mí, no quería que de nuevo Taehyung pagara, me sentía incomoda... seré pobre pero autosuficiente. Escuche que alguien bajaba las gradas y era Taehyung... como siempre tan impecable, pero con un sacón negro entallado al cuerpo por el frió.

Taehyung: Buenos días Lia. –dijo calentando sus manos.

Yo: Buenos días Taehyung. –respondí cerrando los termos.

Taehyung: Vamos y compramos algo de camino.

Me adelante Taehyung, Dios era tan predecible y bueno a la vez.

Yo: Hice café. –dije mostrándole los dos termos.

Su rostro hizo asomo una sonrisa muy linda.

Taehyung: Gracias, no me cansare de decírtelo eres un encanto.

Sus palabras hicieron salir una risa un poco extraña de mi parte. Puse el termo delante de él en ese momento lo tomo.

Taehyung: Mmm... esta delicioso. – dijo mirándome- no lo digo por ser cortes.

Yo: Gracias, pero solo es un café. –dije sincera.

Taehyung: Ay Lia, en este mundo no todos pueden contar con la suerte de que una mujer en las mañanas le pase un café. –acerco de nuevo el termo y tomo un poco de café, volviendo hacer un sonido de gusto. - ¿Quieres un panquecito? –dijo mirándome.

Yo: No, gracias no tengo hambre.

Taehyung: Bueno, yo si... tengo que acompañar con algo este delicioso café. –dijo moviéndose hasta a uno de los estantes.

Yo: Oh... Dios Taehyung solo es un café. –dije de nuevo.

Él sonrió y saco un panquecito de una charola de pan.

Taehyung: ¿Enserio no quieres? –me ofreció de nuevo.

Yo: Enserio.

Se lo llevo a la boca probando un bocado, su rostro reflejo un poco de asco, tomo una servilleta limpiándose la boca y botando el pedazo de panquesito.

Taehyung: Que asco. –dijo gruñendo.

Boto a la basura el papel y volvió a tomar un poco del café.

Taehyung: Me arruino el café. –dijo mirándome- odio las cosas que compra Lorena, todas son bajas en calorías y además esas cosas tienen fecha de caducidad muy corta, y como nadie está en esta maldita casa nadie come nada. –dijo molesto.

Me limite a decir algunas palabras, después de unos segundos nos dignamos a salir del edificio, partimos en rumbo a la oficina, el tráfico era tremendo. Taehyung se veía de nuevo tenso, prendió la radio y comenzó a sonar << BTS – 2! 3! >> La canción la conocía de la época en la que estaba en el colegio, a Lorena le encantaban ese tipo de canciones, pero había algo que pinchaba en mi mente y me hacía sentir más feliz. Vi de ojo a Taehyung y comenzó a cantar una parte en vos baja, no evite sonreír su tensión poco a poco pasaba.

Acércate,  quiero contarte un secreto (Jimin y Tu) AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora