Estaba totalmente oscuro afuera, el viento bramaba ferozmente, estaba conduciendo por un camino con barro y nieve derretida que llevaba Dios sabe dónde, estaba nevando más fuerte, y ahora la camioneta andaba con los gases del combustible que quedaba. Se habría reído si no hubiera estado tan aterrorizada.
_____ se aferró al volante con tanta firmeza que los nudillos se le pusieron blancos, y sus ojos marrón oscuro se agrandaron cuando el angosto camino que estaba transitando se volvía imposiblemente angosto. "Mierda", murmuró, decidiendo que ya era más que tiempo de dar la vuelta. El bosque cubierto de nieve a cada lado del diminuto camino se estaba volviendo más espeso... y de alguna manera, mucho más intimidante.
Sus dientes se hundieron en su labio inferior; gotas de transpiración brotaban de su frente. Se acomodó distraídamente un mechón rebelde de cabello marrón oscuro detrás de la oreja mientras sus cavilaciones se tornaban desagradables. Ridículo como sonaba, incluso a ella misma, tenía miedo de detener la camioneta lo suficiente como para darle la vuelta. Detenerse implicaba vulnerabilidad, dejándola desnuda ante un ataque externo, aun si se detenía por unos pocos segundos.
_____ exhaló, desviando la atención de esos pensamientos dramáticos. "Has mirado demasiadas películas de terror, nena", susurró mientras levantaba el pie del acelerador y frenaba lentamente. No había visto otro vehículo, mucho menos otra persona, por millas, por más de una hora ya. La posibilidad de que algún psicópata suelto la atrapara mientras daba marcha atrás en un vehículo con las puertas trabadas era nula.
La camioneta se detuvo, la falta de movimiento acentuaba el sonido del viento invernal de los Apalaches, que bramaba afuera de la barricada de las ventanas. Se dijo a sí misma que debía ignorarlo, olvidarse de que estaba sola en medio del bosque sobre la cima de una montaña en plena noche, y concentrarse en salir de allí de una buena vez.
Retrocedió lo suficiente como para dar vuelta el vehículo, y se quedó sin aliento cuando su visión periférica se topó con una especie de movimiento.
Su respiración se detuvo inmediatamente. Parpadeó y volvió a mirar, incrédula.
"Maldición, maldición, maldición", murmuró mientras seguía dando vuelta la camioneta. Rogó que estuviera imaginando cosas, porque no vio nada ni nadie al mirar por segunda vez.
¡Simplemente sal de aquí!, se dijo a sí misma mientras el vehículo se enderezaba y ella pisaba el acelerador. ¡Ahora!
_____ pisó el acelerador hasta el fondo, sintiendo cómo los latidos de su corazón se aceleraban exageradamente cuando apretaba de golpe el pedal. Probablemente, no fue el reflejo más rápido que tuvo alguna vez, ya que la camioneta patinó de inmediato. Una mezcla de barro y hielo derretido voló hacia todos los lados, golpeando con fuerza el parabrisas y haciendo que su corazón golpee como si fuera una roca en su pecho.
Otro movimiento hacia la izquierda...
_____ apenas tuvo tiempo de registrar que había visto algo cuando la sombra de un hombre apareció como de la nada. Gritó mientras clavaba los frenos y viraba rápidamente hacia la derecha para no llevarlo por delante, luego volvió a gritar cuando por un momento perdió el control de la camioneta e hizo un trompo.Temblando como una hoja, trató de recuperarse del trompo, pero era demasiado tarde. Sus ojos se abrieron grandes cuando el vehículo patinó fuera del camino y se dirigió directamente hacia el tronco de un grueso roble. Incapaz de hacer nada más que enmudecer del susto, miró con estupor y desconcierto cómo su vehículo nuevo color cereza colisionaba contra un fuerte roble, haciendo pedazos todo el frente y quemando su cuerpo al mismo tiempo. Desesperada, giró la cabeza hacia la izquierda para ver si el hombre todavía estaba por ahí, o si se lo había imaginado completamente.
El airbag automático en la columna de dirección se activó, y, un segundo después, el dispositivo salvavidas la golpeó en un costado de la cabeza y casi la mata. Boqueó cuando la embistió, y sus ojos oscuros se le fueron para atrás.
Por favor no dejes que me desmaye, pensó aterrorizada mientras la sombra de un hombre muy real emergía del bosque. Ay, Dios –ay, por favor– me debo haber golpeado la cabeza...
_____ comenzó a perder la visión en el preciso momento en que la figura del extraño aparecía frente al faro que le quedó sano y comenzaba a caminar firmemente hacia su camioneta. Era enorme –medía al menos un pie más que los cinco pies de altura de ella– y llevaba puesto una especie de traje de faena de una pieza. Su cara era sombría; su penetrante mirada, intensa.
Mientras se le empezaban a cerrar los ojos, consideró la posibilidad de que quizás el extraño era un mecánico. Los mecánicos suelen usar ese tipo de overoles azules. Quizás hasta podría ayudarle a arreglar la camioneta.
Su mirada desfalleciente se desvió rápidamente hacia las manos grandes y delgadas del extraño. Hirvió de histeria cuando vio que sus manos estaban encadenadas. Y pensó, mientras una sensación helada de horror atravesaba su cuerpo, que sus tobillos también lo estaban...
El corazón de _____ latía con violencia en su pecho, aun mientras se deslizaba hacia el vacío de la inconsciencia. Era un preso que se había escapado, gritaba en su mente, mientras estaba inevitablemente a punto de desmayarse. Ay, Dios...
Ay, por favor, pensó mientras sus ojos se cerraban irrevocablemente, ¡por favor, que alguien me ayude!
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Desaparecidos [ Kim Namjoon y tú] +18
Fanfic" ____ huyó de la ciudad dispuesta a comenzar una nueva vida, pero debido a un accidente, todos sus planes se vieron afectados. " Fanfic para mayores de 18 años, lees bajo tu propia responsabilidad 100% Lemon ah ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ● ADAP...