Leah:
Pasó como una hora para que pudiera detener mi llanto y pudiera levantarme de la cama a ducharme. Me sentía sucia, por más que tallara mi cuerpo sentía que la suciedad permanecía en él.
Me cambié con alguna ropa cómoda y que quedara holgada a mi cuerpo, por suerte tenía ropa conmigo, ya que se suponía que acamparía en el lugar mi mochila tenía varias cosas y lo agradecía.
No saldría de la habitación, no quería ver a ese tipo, así que me acosté en la cama. Mi estómago estaba rugiendo, tenía hambre, pero aún así no saldría. Tomé la decisión de dormir para poder distraerme del hambre.
Escuché que la puerta se abrió y me levanté de golpe. Me incorporé en la cama y lo vi entrar, le di la espalda y tapé todo mi cuerpo con las sábanas, no quiero verlo.
Orien:
La hora de almorzar había pasado y la chica no bajó a comer, así que decidí llevarle algo para que comiera.
Al entrar a su habitación con la bandeja de comida en las manos, vi como me daba la espalda evitando mi presencia.
Me acerqué a la cama y dejé la bandeja en uno de los muebles.
- ¿Podrías irte? - su tono al hablar fue frío.
- Necesitas comer - me senté a su lado.
- No quiero, ahora vete.
- Te ayudaré a comer si quieres, pero debes hacerlo - ella se sentó mejor en la cama, sin verme, tenía la vista baja - ¿entonces aceptas?
- Comeré por mi cuenta.
Me levanté y tomé la bandeja para dejarla frente a ella para que comenzara a comer y así lo hizo.
- ¿Te gusta? - sólo asintió - ¿saldrás hoy de la habitación? porque aún no lo has hecho - se encogió de hombros - ¿por qué no me hablas? - los días que ha estado aquí me he dado cuenta que es una chica curiosa y que casi nunca se queda callada - ¿podrías hablar? - comenzaba a molestarme, ella sólo negó con la cabeza - habla ya, di algo - no hizo nada - no te comportes de esa manera, obedece - exigí con molestia.
- ¿Obedecer? - dijo en bajo - no quiero ser tu esclava, no quiero seguir aquí ¡¿por qué no me matas de una buena vez?! - habló alterada.
- No puedo matarte, o por lo menos no ahora, dije que necesito de tu energía.
- "necesito de tu energía" ¡ya basta con eso! no quiero más, podría darte mi energía pero no quiero que me toques más, no quiero que profanes mi cuerpo - comenzó a llorar.
- Tampoco puedo hacer eso, de esa es la manera en la que adquiero tu energía - expliqué.-
- Me siento sucia, me lastimas - se abrazó a si misma.
- ¿Y si lo hago con más delicadeza?
- ¿Estás negociando sobre mis violaciones? No puedo creerlo.
- Entiende, necesito hacer eso.
- Está bien, hazlo, pero hay cosas que deben quedar claras - levantó un poco su mirada.
- ¿Qué cosas?
- Harás eso que dijiste, ser más delicado, no me lastimes - suspiró - y tendrás que decir cada vez que necesites hacerlo, me pedirás permiso de tocarme.
- ¿Hablas enserio?
- Lo dijiste antes, lo seguirás haciendo, así que prefiero con esas condiciones.
- De acuerdo, respetaré eso - no me esperaba que me dejara seguir tomando su energía - ¿cómo te llamas?
- ¿Qué?
- ¿Cuál es tu nombre?
- Leah.
- Suena lindo - sonrió un poco.
- Gracias - dijo aún con esa pequeña sonrisa.
- Ahora come - me levanté.- me gustaría que bajaras luego.
- Lo pensaré.
- Está bien - me retiré.
《7》
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Incubus
ParanormalEste es un relato de un íncubo raptando a una chica y convirtiéndola en su presa y esclava. A pesar de todo eso terminan por enamorarse, pero eso no está permitido para los íncubos. ¿Qué pasará? • Algunas faltas de ortografía. • Capítulos cortos. •...