Vieja solterona de los gatos

Vieja solterona

Hace mucho, mucho tiempo, en un lugar muy lejano una autora tuvo la idea de crear una historia divertida donde se reunieran los personajes de Naruto para hacer preguntas entre ellos y sacar sus trapos al aire y por el deseo de la gente de una continuación la hizo pero nunca la acabó, el desenlace de esa historia quedó inconclusa y sin saber qué pasó con la apuesta que inicio la relación de los personajes...........

N/a: Ya mucho drama, para los que leyeron esta historia desde que inició sabrán que tarde un tiempo exageradamente estúpido para los poco capítulos que son. Para los nuevos tienen la suerte de no haber esperado e incluso pensado que nunca iba a terminarla, que bueno para ustedes! 

Espero que disfruten el capítulo, estoy feliz de decir una historia más concluida, siii. Aplausos para mi jajaja. 

—¡Maldita frentona eres una suertuda! —chilló Ino.

Las que se encontraban aún medio centradas debido al alcohol se tambaleaban en su asiento. El chisme era tan interesante que se negaban a caer rendidas hasta que terminara Sakura la historia, otras como Hinata y Tenten ya estaban dormidas, tantas copas les pasó factura. Incluso Ino derramaba un poco de la bebida que tenía en mano.

—¿suerte? Ese bastardo es el demonio —arrastró las palabras.

—Un demonio muy sexy —ronroneó Karin.

—Continua, debemos saber cómo sigue esto —demandó Temari.

Sakura puso los ojos en blanco.

—Está bien, ¿en qué me quedé? a si... yo... ¿Qué? —murmuró, los pensamientos comenzaban a ser un poco lejanos, decidió que era momento de acelerar la quema de alcohol en su sangre—. Ah, si. Al día siguiente no hice nada, estaba tan avergonzada de ese bastardo que me quedé en el agua terminal para no encontrarme con nadie, incluso Sasuke.

—Eso no es divertido —dijo Temari.

En sus cinco sentidos Sakura hubiese pensado que Temari dijera esto, su boca hubiese caído hasta el suelo, en cambio la contempló un rato hasta que se encogió de hombros y siguió contando la historia.

—El sexto día nos reunimos todos.

Los seis se reunieron en el campo de entrenamiento de siempre, algunos de ellos se veían estresados y un poco cansados, como si les costara dormir, las ojeras los delataban y otros un cansados por el agotamiento mental, aún así el equipo siete tan terco como siempre lo ha sido desde sus inicios, no se echó para atrás.

—¿Alguien listo para el camino de la esclavitud? —dijo Kakashi, era el más fresco de todos.

Irritados por su semblante alegre y fresco de siempre se imaginaron clavarle un kunai en la frente una y otra vez para que él también sufra lo mismo que ellos.

—¿Perder? Ja, yo seré quien les haga morder el polvo —alardeó Naruto apuntando a cada uno de ellos—. Ya verán cómo se sentirán cuando yo esté por encima de ustedes después de torturarme sin mi preciado ramen.

Mientras se reía estrepitosamente tanto Sasuke como Sakura lo miraron con odio porque sabían que él se inducía a genjutsus donde comía sin parar muchos cuencos de ramen. A un lado de ellos Sai abrió la boca para decir algo pero finalmente la cerró abruptamente.

—¿Qué? ¿ibas a decir algo? No te escuchamos —dijo Kakashi.

Pudieron jurar que por un momento le salieron cuernos y cola. De verdad que era el que más estaba disfrutando de esto.

—No seas así Kakashi, eso es incitar —dijo Yamato un poco nervioso.

—No tienes permitido abogar por nadie Yamato-taicho dijo Sakura irritada— tu eres el único que no estuvo ese día.