Mis compañeros y yo nos dirigíamos a un orfanato abandonado. Habían rumores de que el lugar estaba maldito, así que mis compañeros y yo nos decidimos por ir a investigar y ver si era cierto.
Llevábamos varias cosas, como: cámaras, linternas, sensores de movimiento y un Meter Pro.
Faltaba poco para llegar, la verdad estaba muy ansioso por llegar. Siempre he sido fan de lo paranormal.
Después de varios minutos, logramos llegar. Debo admitir que el lugar tenía un aspecto bastante malo, y con razón, llevaba años abandonado.
Jackson, el líder del grupo, fue el primero en bajar de la camioneta. Él era el que llevaba el Meter Pro. Jake y Sebastián eran los encargados de grabar. Elena y yo solo íbamos a seguir a los demás. Era muy aburrido.
En fin, todos bajamos de la camioneta, y nos dirigimos a la entrada del orfanato. Elena y yo fuimos los últimos en entrar, siempre nos dejaban de últimos, éramos como los invisibles del grupo.
Jackson dijo que íbamos a separarnos, lo cual, no me parecía buena idea. Jackson se llevó a Sebastián con él, y le dijo a Jake que se quedara con Elena y conmigo, a él no le agradó la idea, pero aceptó de mala gana.
Los tres íbamos pendientes de cualquier cosa. No queríamos que se nos pasara algo.
Caminábamos tranquilamente, hasta que escuchamos la risa de un niño. Seguido de eso se escuchó un "Hola". Los tres nos quedamos quietos por un momento, hasta que me decidí por ir a investigar. Habían varias habitaciones, y las revisé una por una, pero no encontré nada.
Después de lo que habíamos escuchado, nos pusimos más atentos, así nos evitaríamos problemas con Jackson.
Elena ahogó un grito al escuchar una puerta cerrarse. Corrí hasta la habitación de donde vino el sonido. Entré pero no vi nada. En cambio, vi la cortina de la ventana alzarse. Le señalé a Jake y él se acercó rápidamente, yo hice lo mismo. Levanté mi mano con lentitud, para después levantar la cortina con rapidez, pero no vi nada. Estaba seguro de lo que vi, no lo había inventado, solo espero que Jake lo haya logrado grabar.
Salimos de la habitación y seguimos caminando por los pasillos. Elena ya estaba un poco asustada, pero era muy orgullosa como para aceptarlo.
Entramos a los baños y los revisamos. Debo admitir que me dio un poco de asco.
Cuándo íbamos saliendo, escuché unos pasos en el pasillo junto con una risa. Era la misma risa que habíamos escuchado anteriormente. Aceleré el paso y abrí la puerta. Me hice a un lado para que Jake pasara. Revisé el pasillo con la mirada, pero no logré ver nada. Después de eso, la temperatura comenzó a bajar, hacía bastante frío, lo cual era extraño. Cuando llegamos, la temperatura era normal.
Los tres salimos al patio. Encendí mi linterna y comencé a registrar el lugar con la mirada para asegurarme de que no se me pasara nada. Comencé a caminar con cuidado de no tropezar con algo. En eso, escucho un grito, pero no era un fantasma o algo parecido. Era Elena.
Me acerqué a ella y le pregunté. A lo que me respondió:
–Sentí que alguien me tocó el brazo– dijo con voz temblorosa.
Ambos dimos un brinco al escuchar un grito. Seguido de eso se escuchó un llanto desgarrador. Los tres entramos corriendo. Al llegar al pasillo, nos encontramos con Jackson y Sebastián. Ambos tenían una expresión de miedo, y estaban agitados, como si estuvieran huyendo de algo.
–Chicos, ¿Están bien?– les preguntó Jake.
–No– respondió Jackson con la respiración agitada–. Vimos a un niño en una habitación, yo... Lo llamé varias veces, pero no me respondía, asi que me le acerqué, y en cuanto le toqué el hombro se dio la vuelta y le pude ver el rostro.
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Historias de terror
HorrorComo dice en el título, aquí encontrarás historias de terror.