°Strange°~•Klaus Baudelaire•

Twelve

Supongo que nada dura para siempre.
Ni los supuestos descansos.

-- Tendremos que poner el lugar en cuarentena.-- Comentó uno de los "médicos"

-- Pero.... ¿No va a revisar el cuerpo?-- Preguntó Violet.

-- Ah sí, son profesionales, ¿no?
-- Siguió Victoria.

Después de una larga charla, los impostores accedieron a ver el cuerpo aunque se llavaran tremendo susto al ver la escena.

-- Eh descubierto la causa de muerte.-- Llamó a los restantes a la habitación.-- Fue mordido por una serpiente. La increíblemente mortal.

-- ¿Qué?-- Dijeron los niños al mismo tiempo.

-- La serpiente increíblemente mortal es la serpiente más amigable de todas, el nombre era sólo una broma que inventó nuestro tío.-- Klaus Observó la habitación hasta darse cuenta de que en uno de los estantes había muestras de los distintos venenos de las serpientes, en el cual faltaban dos frascos.-- Miren.-- Se acercó al estante.-- Faltan dos frascos uno es del somnífero que utilizó el conde Olaff para hacer que Victoria durmiera y el otro fue el que seguramente utilizó para asesinar ésto.-- Los adultos en la habitación se miraron entre sí.

-- Pero aquí claramente se pueden ver las marcas de colmillos.-- Agregó Stefano con su extraño acento.

-- Eso es lo que menos importa. Asesinaste a nuestro tutor.-- Dijo Violet.

-- Pero el no tiene el tatuaje que tenía el Conde Olaff.-- Habló el banquero.

-- Señor poh, podría prestarme su pañuelo.-- El hombre accedió y se lo entrego.

-- Stefano, ¿Podría enseñarnos de nuevo su tobillo?-- El mencionado miró a los niños y observó a la castaña parada frente a él. Después mostró el tobillo que previamente había mostrado y Victoria quitó el maquillaje que tenía sobre el descubriendo así el tatuaje del Conde Olaff.

-- Lo ve.-- Victoria retrocedió hasta los jóvenes que observaron al banquero.

-- ¡Oh por dios es el Conde Olaff!
Exclamó. Todos los demás paramédicos salieron huyendo de ahí hasta que ya no los vieron.

-- Tiene que hacer algo, vaya tras el o si no el ira tras nosotros.
-- Hablaron dirigiéndose al hombre de traje.

-- No se angustien niños. Pronto la policía lo atrapará y ustedes estarán tranquilos.-- Los niños se dirigieron hasta el sillón de la sala y se sentaron sobre el sintiéndose completamente miserables.

-- Brbrrrrrrbubr.(Me siento completamente miserable).

-- Señor poh.-- Habló Victoria.-
- ¿Qué era lo que tenía que hablar con el tío Montgomery? Con respecto a mi.

-- Aahhh si, preferiría haber tratado este tema con el al ser tan complicado pero dadas las circunstancias supongo que tendré que decírtelo a ti. ¿Recuerdas la carta que te dí?
-- Asintió-- En ella decía que tú no eras una Baudelaire y por tanto no tienes por qué estar con ellos ya que tú tienes una familia.

-- Pero ellos son mi familia, siempre lo han sido.

-- Yo sé, pero según la ley, no puedo dejarte con ellos.-- Los niños se miraron entre sí.

-- ¿Y a donde me llevará?

-- Se llama academia Pruffrock.
Mientras tanto los niños Baudelaire seguirán con un nuevo tutor en la lista. Que según sé, sería su tía Josefine. Vayan a empacar mientras tanto yo llamaré a la policía.-- Los niños se levantaron del sofá y caminaron a paso lento hasta su habitación.

-- ¿Te irás enserio?-- Preguntó Violet mientras sacaba su ropa de siempre de un armario que había en la habitación (ya que todas sus cosas se habían destruido en el incendio).

-- Tal parece.-- Victoria hizo lo mismo de sacar su ropa al igual que Klaus.

-- No será lo mismo sin ti.-- La mayor se acercó hasta la castaña y la abrazó evitando no llorar.
-- Si el próximo lugar es horrible al menos estaríamos los cuatro juntos.

-- Pero aún están ustedes tres, son muy inteligentes y se que encontrarán una manera para salir de lo que sea.-- Se separaron de aquel abrazo y se sonrieron una a la otra. Al mirar alrededor se dieron cuenta de que únicamente estaban ellas y Sunny ya que el de gafas había salido sin que se dieran cuenta.-- ¿Y Klaus?

-- Debió irse a cambiar.-- La de anteojos se acercó hasta su vestido y cuando verificó si la carta aún seguía en su bolsillo y se dio cuenta de que no era así.

-- Oh no.

-- ¿Qué pasa?

-- La carta. La de mi madre, no está.-- Dijo desesperada.

-- Tranquila, debe estar por algún lugar.

-- Rayos, era lo único que tenía de ella.-- Después comenzaron a buscar y buscar por toda la habitación pero no lograron encontrarla. Finalmente la chica se resignó ya que se estaba haciendo bastante tarde.

Las tres chicas se arreglaron y después bajaron hasta el vestíbulo donde vieron al banquero y a Klaus parados en la puerta. La ambulancia había llegado rápidamente y se había llevado el cadáver de igual manera. Los cinco salieron de la casa al mismo tiempo que la ambulancia se fue.

-- Bueno niños, este será un nuevo inicio para ustedes.
-- Habló el hombre mientras les cerraba la puerta de la parte de atrás de su auto. En esa parte estaban acomodados en orden a excepción de que Violet tenía a Sunny en brazos. Salieron de la propiedad encaminándose a un rumbo completamente desconocido.

La primera parada fue en el destino de Victoria. Como la chica estaba en medio Klaus se vió obligado a salir para que ella pudiera salir.

-- Es....-- Admiró las instalaciones de la academia.

-- Horrible.-- Continuó Klaus.-- Tu no mereces estar en un lugar como éste.

-- No eh visto el interior, probablemente me sorprenda.
-- Miró al chico y lo abrazó. El hizo lo mismo.-- Adiós.-- Se separaron.

-- No se que es más doloroso, si decir adiós o no decirlo. Tenemos una de millones de posibilidades de volver a vernos.-- Tomó su mano.

-- Citando a uno de los libros que más adoro en éste mundo; me preguntó si las estrellas se iluminan con el fin de que cada uno encuentre la suya. Hay una gran posibilidad de volvernos a ver.-- Sonrió haciendo un gran esfuerzo para no llorar.

-- ¡Victoria!-- Habló Violet saliendo del auto.-- Sunny también quería despedirse.-- Le pasó a la bebé y la estrujó entre sus brazos.

-- Te voy a extrañar mucho, Sunny.

-- Prrreprrrrr.(Yo también, aunque creo que Klaus llorará todo el camino)-- Las dos chicas rieron y el mencionado rodó los ojos.

Se acercaron y se dieron un abrazo grupal, sintiéndose aún más tristes de lo que habían estado esa mañana. Después simplemente los Baudelaire subieron al auto del señor poh y ella solo caminó hasta Pruffrock sintiendo como unas pequeñas lágrimas bajaban por su rostro.

Klaus estaba de la misma manera, se sentía tan miserable y triste como su servidor al relatar está historia.

Pero supongo que me veo obligado a terminar aquí.

[Fin de la primera parte]

•# Solo quería decirles que muchas gracias por leer esta historia que al principio no tenía contemplado que fuera tan larga pero al ver que si les gusta de verdad, aquí andamos.

Y no, no ah acabado, aún faltan muchas cosas super importantes así que estén atentos, mis..... Snickers)?.#•