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Capítulo 43

Carry you - Ruelle ft Fleurie

En el momento que la casa entera fue acribillada y los vidrios salían disparados en todas direcciones, Brandon nos tiró al suelo. Asimismo, segundos después el resto de los oficiales salieron de mi habitación con sus armas empuñadas y dirigiéndose a la entrada principal, pasándonos de largo.

«Mi familia», fue en lo primero que pensé y que me creó un sentimiento de terror que jamás podré explicar, me embargó la sensación de determinación. La determinación de hacer todo lo que me fuera posible para protegerlos, estaba decidida a evitar más muertes.

«Yo no voy a permitir que lastime a nadie más de mi familia». Y con este último pensamiento me dejé guiar por el oficial Ryan —el que había salido a por mí hace unos momentos—, hasta el despacho, en donde, mi mamá, Camille y mi sobrino estaban tirados en el suelo.

—Ya no hay más tiempo, debemos sacarlos de aquí —dijo, afuera los disparos se escuchaban cada vez más cerca. Camille tomó a Daniel en brazos, quien lloraba desconsoladamente, Brandon nos tomó a mi mamá y a mí—. Levántense y vámonos, ¡apresúrense! —exigió el oficial.

Sin embargo, seguido de su apuro, se escuchó una explosión en la puerta principal y en cómo estaba finalmente había cedido. Seguidamente, una ráfaga de disparos, de gritos y más disparos. Cerré los ojos, un sudor frío recorrió mi espalda y perlo mi frente, el terror se adueñó de cada una de mis terminaciones nerviosas, haciendo destrozos en mi capacidad para razonar. Además, ya no cabía duda alguna: Ellos ya habían entrado, Cobra estaba dentro de mi casa y a nada de dar conmigo.

Solté una inspiración y abrí los ojos, la determinación fue abriéndose paso entre todo el manojo de miedo y desazón que me atacaba. Mi cuerpo entró en una especie de trance, de relajación, ya que, ya había tomado una decisión.

—Él está aquí, Brandon —murmuré tan bajito que solo él pudo escucharme. Lo vi tragar con dificultad y darme un asentimiento de cabeza. Su quijada estaba tan apretada, sus ojos demostraban tanto miedo que casi lo podía palpar. Torcí el gesto y lo abracé con fuerza.