Lazo

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Katsuki Bakugou

Los leves susurros de Izuku fueron los que me despertaron, eran las 4 a.m, o eso era lo que mi aun borrosa vista alcanzaba a ver en el reloj colgado en la pared.

Al no poder conciliar el sueño de nuevo me dispuse a mirar con detenimiento al alfa dormido a mi lado.

Esas estúpidas pecas, esos patéticos brazos, ese tonto cabello verdoso y esos horrendos ojos me hacían actuar como un adolescente enamorado y vaya que lo estaba disfrutando.

Me dieron unas inmensas ganas de golpearlo, por todo lo que me hace sentir y hacer, el revoltijo de sentimientos y emociones al estar junto a él me causaban temor de alguna manera, que pasará si algún día se cansa de mi? Seré capaz de soportarlo?

Decidí dejar de pensar en mierdas como esas y despertar a Deku.

— Kacchan, no puedo respirar — escuchaba su voz debajo de la almohada con la que estaba ejerciendo fuerza sobre su cara.

— Tus susurros me han despertado, no mereces dormir más que yo — le dije molesto cubriendo con la almohada mi cuerpo aún desnudo.

— Lo siento Kacchan, pero tendrás que acostumbrarte — sonrió.

Acostumbrarme a eso, podría ser una sutil forma de invitarme a vivir con él o fue un impulso de hablar recién despierto.

— Tonto! — volví a poner la almohada sobre su rostro — Mierda! Basta, me rindo! — reía a carcajadas mientras Izuku me hacía cosquillas en el vientre y espalda.

— Tomemos una ducha — lo abracé de su cuello en señal de que me llevara cargando, me apena decirlo en voz alta, pero me encanta que me consienta y sea cariñoso conmigo.

...

— Kacchan, he pensado un poco las cosas y en verdad quisiera hablar con tus padres sobre lo nuestro, platicar sobre una marca y vivir juntos en un futuro inmediato — agradecía que estaba de espaldas, así no podía ver lo rojo que estaba mi rostro en ese momento.

— Ya te habías tardado Deku — bufé y el siguió tallando mi espalda mientras yo jugaba con la espuma que se había formado en la tina.

Al salir de su casa se despidió de manera dulce, en verdad parece que el es el omega de la relación, o al menos ante los absurdos estereotipos sociales acerca de las castas.

Le prometí a Deku organizar una elegante cena para que mis padres pudieran hablar con confianza y para que Deku pudiera dar una buena impresión después de lo sucedido.

— Katsuki Bakugou dónde mierda te habías metido? Te estuve llamando toda la noche! — mi madre me golpeó en la cabeza con la revista de modas que estaba leyendo — Y por qué hueles a sexo?

— Vamos Mitsuki no seas dura con el muchacho, ya está bastante grandecito como para que lo regañes tanto — y hay estaba papá queriendo arreglar las cosas.

— De eso quería hablar con ustedes — mi padre se acercó más — Izuku y yo nos enlazaremos con o sin su aprobación, solo que Izuku es demasiado respetuoso y quiere hablarlo con ustedes de una manera correcta mientras cenamos caviar barato.

【How Deep Is Your Love】 ᴰᵉᵏᵘᵏᵃᵗˢᵘDonde viven las historias. Descúbrelo ahora