Era una mañana cálida y soleada en la bulliciosa ciudad de Seúl y los dos adolescentes caminaban de la mano por el polvoriento camino de grava y césped hacia el campus lleno de estudiantes. Hyunjin se detuvo en seco debido al menor y se giró para verlo mirando por la ventana de una tienda de cosméticos.
—¿Qué estás mirando?— el más alto preguntó mientras Seungmin seguía mirando aquel tubo rosa claro de sustancia brillante, con una etiqueta de fresa pegada en el frente.
—¿Puedo comprarlo?— preguntó mirando a Hyunjin con ojos vidriosos, haciéndole derretirse por dentro.
—Tenemos una hora hasta el primer período, así que supongo que... —fue interrumpido por una mano suave que entrelazaba sus dedos, siendo arrastrado a la tienda por el emocionado adolescente de dieciocho años.
Dentro había una empalagosa gama de color rosa y varios cosméticos y productos de higiene cubrían los estantes de cristal. El más joven sonrió una vez que vio el tubo brillante que había tenido intrigado unos momentos antes.
—¿Puede darme esto, por favor?— le dijo a la alegre señora del mostrador. Pagó por su artículo y salió de la tienda todavía de la mano con un Hyunjin aturdido.
Los dos continuaron por el camino hacia su primera clase, el moreno balanceando los brazos mientras su blusa de encaje color melocotón soplaba con la suave brisa.
Hyunjin
Pronto llegó la hora del almuerzo y Hyunjin estaba tan emocionado de comer con el rayito de sol del que se había hecho amigo hacía poco. Caminó por los pasillos hasta que llegó a la zona donde encontraría a Seungmin. Al ver al más joven, su brillante sonrisa se desvaneció un poco cuando lo vio reír con otro chico un poco más bajo. Tenía un cabello castaño suave y una sonrisa dulce, pero Hyunjin no pudo evitar sentir... celos.
¿Qué demonios Hyunjin? Compórtate, probablemente son solo amigos.
—¡Hyunjinnie!— exclamó el más bajo mientras corría hacia un Hyunjin con mala cara.
Después de una breve introducción, Hyunjin recordó que Jisung estaba en una "relación" indefinida con su mejor amigo Minho. Odiaba dejar que sus celos lo superaran y se sentía realmente estúpido por sus debates internos. Aunque no entendía de dónde venía toda esta sobreprotección y en realidad estaba sorprendido consigo mismo, ya que nunca solía ser así.
Para su fortuna, Minho divisó al grupo en la atestada cafetería y llegó para salvar la incómoda atmósfera entre los tres chicos. Todos se establecieron juntos en el área exterior, los rayos del sol brillando sobre el grupo. La luz ambiental estaba haciendo un gran trabajo para acentuar el leve rubor que se deslizaba por sus mejillas. Eventualmente, Jisung y Minho se fueron a hablar, probablemente sobre el confuso amor entre ellos o alguna otra tontería. Dejando así a Seungmin y Hyunjin disfrutar de la compañía del otro.
Seungmin
El tímido chico jugueteaba con el dobladillo de su falda negra ondulada mientras mantenía la mirada baja, anticipando alguna forma de pequeña charla. Realmente estaba esperando que Hyunjin cuestionara lo que podría hacer que sus labios estuvieran tan brillantes, pero sus pensamientos se interrumpieron una vez que el chico que estaba frente a él murmuró algo que, afortunadamente, alcanzó a escuchar.
—Te ves diferente de antes, no puedo decir lo que es— dijo. Seungmin sonrió para sus adentros y levantó la cara para ver si el otro frente a él se daba cuenta ahora.
—¡OH! ¿Estás usando ese brillo de labios que compraste?— Hyunjin parecía orgulloso de sí mismo ya que estaba seguro de que lo había descubierto y cayó en estupor una vez que el sol roció su magia dorada sobre la cara y los labios del morocho, haciendo que su piel tornasol brillara y sus exquisitos labios rosados destellaran y resplandecieran en la luz. Parecían adictivos y deliciosos.
Feliz ante su éxito de ganar su atención, asintió con aprobación.
—¡A-JÁ LO SABÍA! Se ve bonito en ti, ¿qué sabor es?— el rosa espolvoreaba las mejillas del joven ante el inesperado cumplido.
—Fresa— rió ligeramente ante la pregunta.
—Me encantan las fresas— el mayor coqueteó inclinando su cabeza para parecer inocente. En realidad no lo era.
—Eh, ¿enserio?— Seungmin respondió juguetón, apoyando su barbilla en la palma de su mano para hacer contacto visual con el deseable chico del otro lado de la mesa.
Editado [201128]

ESTÁS LEYENDO
gloss 「hyunmin」 ✓
Fanfiction| "tus labios son como una droga. considérame un adicto." en donde hyunjin no puede tener suficiente del brillo labial de fresa de seungmin. original por: @sobisoft obra traducida bajo el permiso de la autora. se prohíbe cualquier...