Todo estará bien.
Si todo va de acuerdo a tu plan, todo irá bien.
Joder, espero que de verdad se trate de Loki o...
Respiras. Todo estará bien.
¿Y si estoy equivocada?
Ya es demasiado tarde para arrepentirse. Ahora solo queda actuar.
Al llegar a tu edificio miras a tu alrededor para verificar que todo esté en orden. Casi ya no queda nadie en la calle además de un par de jóvenes marchando hacia el centro de la ciudad y una abuelita sacando a su perro para que haga sus necesidades por última vez antes de irse a la cama.
Las manos te tiemblan y te cuesta ingresar la llave en el cerrojo pero una vez adentro y al subir las escaleras te comienzas a sentir ansiosa. Quieres hacerlo de una vez para que todo se termine lo más pronto posible.
Abres la puerta de tu apartamento para encontrarte con todas las luces apagadas y una nota sobre la mesada.
"Por favor, no mueras.
Te quiero.
-Ania"
Respiras aliviada. Ania había recibido tu mensaje y se había marchado junto con Botas. Sin perder más tiempo te diriges a tu habitación a cambiarte el vestido y ponerte algo cómodo, en especial como zapatos en caso de que tengas que correr por tu vida.
Te atas el cabello en una cola alta y te miras al espejo una última vez.
De pronto te das cuenta que estos pueden ser los últimos momentos de tu vida y el pánico casi se apodera de ti. Aprietas los puños y cierras los ojos con fuerza para no pensar en eso. En caso de que algo salga horriblemente mal, tomas la libreta en la que Ania te había dejado la nota y escribes una pequeña carta para tu padre.
"Tenía que hacerlo, papá.
Espero lo entiendas.
Te amo."
Ya no puedes perder más tiempo así que abres la ventana de la sala y sales a la escalera de emergencias a través de ella. Caminas un poco hasta llegar a la ventana vecina, que daba a la sala del apartamento de enfrente y, cuidando de no hacer mucho ruido, la abres usando el truco que John te enseñó.
Con cautela, entras al apartamento que se encuentra en completa oscuridad. Tu corazón suena tan fuerte que lo sientes en los oídos y un escalofrío te recorre desde los pies a la cabeza.
Sabías que no habría nadie en casa. Ania había estado vigilando el apartamento desde que fuiste a la fiesta y cuando estabas en medio de la organización de tu plan B, te llegó un mensaje de tu amiga diciendo que 'John' había salido nuevamente, a la misma hora en la que lo encontraste salir cuando volviste del trabajo. Si tu teoría era correcta, eso se suponía que no volvería hasta la mañana siguiente.
Caminas por la habitación como si caminaras por un campo minado. Por el increíble silencio que hay parece que los pequeños chillidos de la madera debajo de tus pies son en realidad tan fuertes como despertar a todo el edificio. Recorres la sala con un objetivo: Encontrar la caja de madera que habías visto. Pensaste que con semejante oscuridad el brillo azul intenso se vería de inmediato, pero no había señales del mismo.
Te atreves a prender la luz porque no tiene sentido seguir buscando en la negrura cuando no había nadie en casa. De inmediato visualizas la caja en lo alto de una estantería, por lo que tomas una silla y la utilizas para alcanzarla. El temblor en las manos regresa pero, al abrirla, la encuentras vacía.
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Tony Stark y tu - Solo por una noche
Fanfic[...] -Tienes que prometérmelo.- Dice, sus ojos cargados con intensidad.- De verdad, no puedes dejar pasar esa oportunidad. -Por última vez, Jodie.- Haces una pausa mientas miras a tu alrededor para ver si alguien estaba escuchando su conversación...