Juntos para siempre

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* OneShot inspirado en un video de animación, de la página estudios de la comunicación*

Se conocieron en una banqueta,
situada en uno de los barrios más pobres de Brooklyn.

Aquel niño castaño de bonitos ojos, se encontraba llorando a mares, mientras con sus delicadas manitas trataba de quitar todo rastro de lágrimas, tenía varias cortadas en sus rodillas, producto seguro de una caída.

Steve se preguntaba: ¿Que hacía un niño tan bonito y por su vestimenta de clase social en un barrio tan pobre, como este?

Dejo que las dudas se las llevará el viento y se dispuso a socorrer aquel bonito niño, se acerco a él, algo apenado y le tendió varios curitas que tenía en su pantalón izquierdo.

Siempre llevaba de sobra por si llegaba a necesitar, era algo torpe y problemático en el sentido de ayudar a las personas que lo necesitarán, metiéndose en peleas que sabía que no podía ganar, pero lo hacía por su sentido de la justicia, así que esos golpes y rasguños para él eran pan de cada día.

Se puso a un más nervioso y su corazón dió un brincó, al sentir el cálido tacto de sus dedos rosar su mano, al tomar el par de curitas, pero no logro tomarlos del todo, por qué una gran mano gruesa, tomo la del chico con brusquedad.

Un hombre alto cabello negro, con un corte de barba fina y refinada, su expresión era fría y se veía qué era muy estricto, aparte del costoso traje negro acompañados de unos lustros zapatos del mismo color.

Se veía muy molesto con el pequeño castaño, quien lo miraba algo aterrado, el señor sin importarle que el estuviera presente lo levanto de donde estaba sentado, para después agarrarlo de los hombros y zarandiarlo, mientras le decía algunas cosas que él no alcanzaba a escuchar.

Por suerte para él y el cataño, llegó un hombre rubio con traje de mayordomo implacable, a defensa del niño, le dijo unas cuantas palabras al señor gruñón, al parecer gracias a sus palabras se tranquilizó, pero sin soltarlo se lo llevó a jalones al auto, que al parecer estaba estacionado a unas cuantas cuadras.

El mayordomo suspiro y movió su cabeza negando, el comportamiento del señor para después voltear a verlo y sonreírle dandole las gracias para seguir el trayecto donde se habían ido aquel bonito castaño.

Steve seguía mirando por donde se iba Tony, ya unos cuantos pasos de ingresará al auto, el niño voltio a verlo preocupado y abatido, el rubio vio aquel gesto y le regaló una sonrisa mientras se despedía de él con la mano, Tony imitó el gesto despidiéndose de él.

Paso el tiempo volando y en menos de un soplo había ingresado a la universidad.

Gracias a una beca pudo ingresar a una buena universidad donde estudiaría dibujo y puliria a un más sus dotes como dibujante.

Estaba dando un recorrido por el campus, cuando se encontro a un par de brabucones molestando y acosando a un chico castaño.

Steve al verlo bien y al reconocer aquellos ojos castaños, que habían sido su primer amor, a primera vista, rápidamente fue a su auxilio enfrentando aquellos brabucones.

Algo nervioso al principio por qué le había prometido a su amigo bucky, no volverse a meter en problemas pero al ver que se trataba de su chico y que corría peligro, no tuvo de otra más que interferir.

Los brabucones al verlo se burlaron por su aspecto de debilucho y empezo a ser ahora el centro de atención, lo empujaron haciendolo caer al piso, su inalador salió de su bolsillo disparado hacia aún lado, se alarmó y el miedo le albergó al ver el puño en alto del chico musculoso, nunca había experimentado algo así en una pelea todo lo enfrentaba con la frente en alto, sin preocuparle mucho los golpes, pero al ver que el castaño lo miraba con pánico y que aquellos ojos le reflejaban su patético ser, le hizo tener un ataque de asma.

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