¡Tutora de un Playboy! (#1) (Finalizada)

Capitulo 11: El encuentro con Adrik.

— ¿Abby?

— ¿Adrik?

Se levantó de su mesa de la cafetería y se acerco a mi.

—¿Os conocéis?- pregunta Fer.

— Si nos conocemos Fer. Pero en un pasado que quiero olvidar.

— Y porque si fue un pasado súper guay.- dice guiñándome un ojo.

— ¿Sigues siendo tatuador?

— Claro. ¿Como van tus tatuajes?

— Me los cubría con maquillajes pero desde hoy no me los voy a cubrir.

—¿Tienes tatuajes?— pregunta Fer.
Yo asiento.— Y cuando me lo ibas a contar pensaba que éramos mejores amigas.

— Lo siento pero solo se lo conté hoy a Adam porque se puso pesado.

— Así que más importante contárselo a tu novio que a tu mejor amigo.

— ¿La chica que decía en el pasado que no tendrá novio tiene uno?- pregunta Adrik.

— Si algún problema espero que no.- digo cruzándome de brazos.

— ¿Sigues siendo la misma chica mala?

— No, ya no he cambiado a mejor.

— Pero cuando te enfadas seguirás siendo agresiva.

— Si.

—¿como va tu madre?

—Murió.— Porque me pregunta tanto.

— oh lo siento.

— Estoy empezando a pensar que no me dices nada.- dice Fer

— Te prometo que desde ahora te diré todas las cosas que me pasan lo juro.- digo abrazándola.

— Ahora eres cariñosa.- dice Adrik.

— Se supone que soy una chica buena estudiosa y cariñosa.

— Wow entonces sí que has cambiado. Pero no te tapes más los tatuajes te quedan muy bien. ¿Porque están destapados si me dijiste que los tapas con maquillaje?

— Se los enseñe a mi novio Adam porque quería verlos.

—Yo también quiero verlos.

— Solo te enseñaré uno porque el otro tengo que quietarme la camisa.

Extiendo mi mano para que mire mi muñeca.

— Es súper bonito.

— Lo se.

— Está claro yo lo hice tendría que ser  precioso.

—¿tu lo hiciste?- pregunto Fer

—Sip.

— Fer tengo que ir al baño ¿me acompañas?

— Si claro.

Nos adentramos en el baño y cerramos la puerta con pestillo.

— Fer te contaré todo mi pasado en mi casa cuando terminemos de tomar algo en esta cafetería. Pero por el momento tengo que decirte que
Adrik y yo éramos mejores amigos y con él tuve mi primera vez por diversión

— Wow sí que eras una chica mala.

— Nos acostamos varias veces. Él no es de tener relaciones serias solo quiere hacer pensar a una chica que es importante que la quiere cuando en realidad quiere llevársela a la cama. Se convirtió así desde que él me pidió que sea su novia y yo lo rechace.

— ¿Porque lo rechazaste si te acostabas con él?

— Era solo diversión cuando andábamos borrachos y drogados.

—¿¡que!?

— Te lo contaré más tarde. Ahora me tengo que ir. Le prometí a Adam que le recompensaría.

—¿recompensar que?

—Estuvimos apunto de hacerlo hasta que tú me llamaste.

— Lo siento amiga bueno pues vete.

Salimos del baño.

— Oye amiga ¿ese no es Adam?

— Creo que si. — dije entre dientes enfadada porque estaba con una chica. De repente la chica lo besa y él no hace nada para impedirlo.

Me acerco a él y le toco el hombro el se da la vuelta y me mira con los ojos como platos.

Me doy cuenta de que hay lágrimas en mis ojos.

— Abby no es lo que tú crees.

—Que es lo que yo no creo Adam que te estabas besando con esta perra.

— oye.- dijo la perra.

— Tu cállate estúpida.

— Abby todo tiene una explicación.

— QUE EXPLICACIÓN Adam dime. Te dije todo mi pasado. Te conté todo sobre mi. Y tú me sale con esto.

— Pero es que no fui yo quien la beso fue ella.

— Y porque saliste con ella si sabias que era una perra.

— Ella me obligó.

— Lo siento Adam pero no te creo. No puedo creer que me haya enamorado de un imbécil tan grande. NO QUIERO VOLVERTE A VER EN MI VIDA.

Dicho eso salí corriendo de la cafetería oyendo como me llamaba Adam. Entre al auto y empecé a conducir hasta mi casa.

Cuando llego entro por la puerta y allí estaba mi abuela.

— ¿Que te paso cariño?

— Adam se beso con otra chica.

—Igual tiene una explicación.

— No abuela el  ni siquiera se apartó. Se quedó allí con los ojos abiertos.

— Igual no tenia de otra.

Subí a mi habitación y me senté en mi cama las lágrimas seguían saliendo de mis ojos. Que estupida fui al enamorarme de Adam. Llore y llore hasta que me quede dormida.

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Quien me despierta de mi bello sueño. Que hora será solo recuerdo que me dormí después de tanto llorar por el imbécil de Adam.

Todavía es de noche, extiendo mi mano intentando coger el móvil que está en la mesita de noche.

Miro la hora y son las 4:00 am.

Me giro para poder dormir más y me encuentro con alguien dormido a mi lado. Es Adam, las lágrimas se acumulan en mis ojos.

— ¿Que haces aquí? — Lo despierto. No tengo compasión por él ya no.

— Duérmete. — murmura abrazándome por la cintura.

— No Adam. Dime responde a mi pregunta.

— Lo siento mucho princesita. Yo no quería hacerte daño. — Dice besándome la frente.

— Haberlo pensado antes de besar a esa zorra. — digo sintiendo las lagrimas caer. — Bravo Adam, enamoraste a esta imbécil de ti. Te felicito.

— Lo siento yo no quería....— lágrimas empezaron a correr por sus ojos. Adam estaba llorando. — Crees que fuiste la única que se enamoró. Mírame Abby estoy aquí intentando que me perdones por ser un estupido de mierda que no puede decirte porque beso a esa chica. — dice llorando.

— Lo hecho hecho esta Adam. Ahora fuera de mi casa. Seguiremos con las tutorías pero solo tutorías nada más. Ahora adiós.— dije levantándome de la cama para ver como el sale por mi ventana.

Lágrimas corrían por mis mejillas.

Lo peor de todo es que lo sigo creyendo, lo sigo queriendo.

El querer a alguien siempre te hace daño. Yo quería a mi madre, ella se fue. Ahora Adam y yo ya no estamos juntos lo quiero. Y lo perdí.

Me tumbo en la cama y lloro hasta quedarme dormida otra vez.