Capítulo 14 "El pasado"

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No, no, no, ellos van a seguir insistiendo no van a dejar las cosas así, nos van a buscar ¿Qué debemos hacer? ¿Qué debemos hacer Levi? –hable rápido y al borde de la histeria

Primero ¡cálmate! –me dijo Levi en tono serio

¿Cómo? Van a venir por Santiago, todo por exponerlo de esa forma –estaba realmente fuera de mí, me preocupaba en extremo lo que pudiera pasarle a Santiago- el aún no está listo ¿Qué vamos hacer? Esto no debía ser así...

Samara –me hablo Santiago, agarrándome de los hombros- todo va estar bien –me dijo mirándome fijamente a los ojos, en ese momento solté una bocanada de aire que ni siquiera sabía que había contenido – sé que no soy tan bueno aun, pero creo que puedo defenderme, ¿no es así Levi? –continuo

¿Eh? Claro, lo ha estado haciendo bien Samara, le falta poco para de verdad sacar todo su potencial –afirmo Levi, al que ahora miraba

¿Lo ves? Todo irá bien, me has enseñado bien –me dijo con esa sonrisa cálida que solía tener

Te van hacer trizas –le dije con el ceño fruncido

Gracias por tu confianza –Santiago respondió sarcásticamente

No lo entiendes, no entiendes la magnitud de la fuerza que pueden tener, Levi ni siquiera está usando toda su fuerza contigo para no lastimarte –le dije para que entendiera pero me miro raro

¿Qué? –pregunto Santiago mirándome y luego a Levi, Levi fingió toser y miro a otro lado, claro él no le diría a su amigo que aún le faltaba más madurez física, Levi solo era de coraza dura peor por dentro era más blando que nada

Lo estás haciendo espectacular pero aún no es suficiente para enfrentarte en una pelea real con ellos y si yo no llego a estar, no me voy a perdonar que algo te pase –Santiago apretó un poco más su agarra a mis hombros y me miro como si buscara algo en mi mirada, algo que le hiciera entender lo que realmente significaba lo que acababa de decirle, nos quedamos en silencio mirándonos a los ojos y Levi volvió a toser

Bueno, bueno esto se está poniendo incomodo ¿no?, si quieren que me vaya solo tienen que decirlo –dijo Levi haciéndose el ofendido

¿De qué hablas Levi? No pasa nada –conteste rápidamente alejándome un poco de Santiago y el miro al piso con el ceño fruncido

Entonces si la cosa esta así, apurémonos con el entrenamiento, pónganlo más pesado, ¡lo hare! –dijo Santiago y nos miró a Levi y a mi intercaladamente

Excelente decisión, yo apoyo a Santiago –contesto Levi, pasándole el brazo por los hombros, sonriéndome, yo me reí y voltee los ojos rendida

De acuerdo –dije levantando una ceja- Hay algo que es bastante efectivo, hasta más diría yo que el entrenamiento físico y ni siquiera necesitamos salir de casa –Santiago levanto una ceja también y Levi dejo de sonreír, él sabía a qué me refería y...

¿Estás segura? –pregunto Levi dando vueltas alrededor de un sillón, era una acto infantil pero cuando se ponía nervioso hacia ese tipo de cosas

Si –le conteste y se detuvo a mirar- Santiago mírame a los ojos

Bien -dijo y se acomodó en su lugar el cual quedaba justo frente a mí, lo mire a los ojos y entre en su mente, era como ver un montón de pantallas con las películas de toda su vida, pero yo no quería hurgar en su pasado o su vida, solo quería mostrarle como entrar en la mente de alguien, visualice un lugar bonito y solo, donde pudiera verlo, al hacerlo el apareció en la parte más alta de una pequeña loma en aquel lugar cubierto por el pasto verde y árboles de frutos alrededor

La Sonrisa Del Ángel (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora