Al día siguiente nos vimos en el bosque de nuevo los tres y una vez más, tratamos de no sacar al tema lo que había pasado el día anterior, aunque seguía preocupada por lo que fuera a suceder intentamos continuar; ocultamos nuestra energía con algunos trucos que servían para que los humanos no nos vieran aunque algo reforzados porque de lo que nos ocultábamos no eran humanos. Entrenamos el cuerpo a cuerpo con Santiago tratando de que su fuerza pudiera equilibrarla con sus reflejos, los días pasaron y Santiago avanzo más rápido de lo esperado, su agilidad, precisión y reflejos aumentaron considerablemente, seguimos así durante tres semanas y después llegó la hora de comenzar con algo más difícil sacar a flote otras habilidades y esperaba que esta vez fuera menos dramático, no habíamos tenido interrupciones de caídos, lo cual a mi parecer era extraño...
Mira Santiago los Nefilim tienen poderes únicos e individuales, esto quiere decir que aunque todos tienen algunas características que los distinguen también tienen algunos poderes que son individuales por lo que esos los descubrirás por ti mismo, lo que esté en nuestras manos te lo enseñaremos lo demás lo aprenderás por tu cuenta conforme vayas conociéndote –le explique
Los Nefilim suelen tener muy buen oído para empezar por ejemplo la vez que nos atacaron esos caídos, Samara y yo los escuchamos y tú también puedes hacerlo –le hizo saber Levi- primero gracias a que estamos en un lugar sin mucho ruido podrás concentrarte aunque después ya el ruido no será un impedimento. Cierra los ojos, concéntrate y dinos ¿qué escuchas? –Santiago obedeció cerró los ojos y se mantuvo quieto
Bien, pues escucho los autos de la carretera, el movimiento de los arboles cuando los golpea el aire... -hizo una pausa, y dio una media sonrisa- escucho... la respiración de Samara y el latir de su corazón, acaba de acelerarse –dijo y en seguida me sentí avergonzada y Levi se echó a reír
Bueno al menos lo haces bien –le dijo y golpeo en hombro a Santiago, mientras se burlaba de mí
Escucho ahora también a las personas en la cafetería que está pasando la carretera, celulares timbrar, mensajes de texto, risas, aturde –dijo y se agarró la cabeza con pesar
Está bien Santiago, puedes abrir los ojos, ábrelos –le dije e hizo caso- al principio te será un poco complicado pero lo vas a manejar bien
Intentemos ahora unos saltitos –dijo Levi
Estás muy animado hoy especialmente, por cierto Levi –dije
Bueno hace tiempo no hago nada divertido y esto es una buena distracción –dijo guiñándome el ojo- que dices Santiago te interesa saber que tan alto puedes brincar siendo Nefilim, claro no te vayas a sentir opacado, soy un ángel caído así que lo hare muchísimo mejor que tú incluso si practicas día y noche durante toda tu vida –se mofó Levi
Eso ya lo veremos –le reto Santiago, al principio Santiago se había mostrado molesto y casi sin ganas de cooperar pero pasaban los meses y el parecía interesarse cada vez más pero no hacia muchas preguntas y eso me ponía nerviosa, porque esperaba que tuviera más curiosidad aunque creo que el solo estaba esperando el momento para bombardearme con sus dudas
Mira el salto del que hablamos es primero un salto normal, pero puedes dar un salto más en el aire, por lo que su nombre final es salto doble, voy a hacerlo primero y después intentaras imitarme, ehh Samara porque no lo haces también para que vea que una chica puede –se burló Levi
A veces eres algo estúpido, pero en definitiva lo hago mejor que tú –le dije, Levi corrió y dio un salto, luego otro en el aire por lo que se elevó varios metros, después cayo levantando un poco de polvo en el suelo y dio un grito de autosuficiencia luego volvió a dar otro salgo
Sé que lo haces mejor que yo cariño, solo intento provocarte –me grito Levi desde arriba
¿Los Nefilim, los caídos y los ángeles poseen habilidades similares? –me pregunto Santiago mientras veíamos venir hacia nosotros a Levi
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La Sonrisa Del Ángel (En Edición)
Novela JuvenilSinopsis "¿Una sonrisa puede desatar la guerra?" Samara es un Serafín de la muerte pero al enamorarse pérdidamente de quien no debía a desatado una guerra que parecía estar muy lejos de poder ganar, sus sentimientos nublaron su juicio y tal vez lo q...