Capítulo 6. La sonrisa de Jyushimatsu

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Era la hora de dormir, pero en la casa Matsuno, las cosas se habían puesto muy incomodas, por lo que los seis llevaban buen rato de pie viendo el futón.

-¿Por qué seguimos de pie?- pregunto Todomatsu sin entender a sus hermanos -Olvídenlo, yo ya me voy a dormir, así que apresúrense y apaguen las luces- dijo mientras se acostaba en su lugar.

Los demás solo se miraron entre ellos, nerviosos.

-Bueno, iré a dormir yo también, brothers...- dijo Karamatsu acomodándose en su lugar -Good night-

-Vamos Jyushimatsu- Ichimatsu tomo a Jyushimatsu del brazo y se lo llevo al extremo derecho del futón, acostándose él en la esquina derecha, en el lugar que pertenecía a Jyushimatsu, y Jyushimatsu a su lado, en la parte donde siempre se acuesta Choromatsu.

Solo faltaban de acostarse Osomatsu y Choromatsu, los cuales se miraron, Choromatsu se encogió en hombros y se dirigió al lugar que estaba libre al lado de Karamatsu.

Pero Osomatsu lo detuvo, tomándolo del brazo.

-Ni creas que dormirás al lado de Karamatsu- dijo Osomatsu al detenerlo.

-¡¿Eh?! Yo...- Choromatsu estaba a punto de contestarle, pero al voltear y ver la aterradora cara enojada de Osomatsu solo pudo tragar saliva ante el miedo, podría jurar que los ojos del mayor estaban en llamas -Esta bien... dormiré acá- dijo, dirigiéndose al lugar que quedaba vacío entre Todomatsu y Jyushimatsu.

Por último, Osomatsu apago las luces y se acostó en el único lugar que quedaba libre.

Quedando por orden de izquierda a derecha: Osomatsu, Karamatsu, Todomatsu, Choromatsu, Jyushimatsu, e Ichimatsu.

Pero Ichimatsu no podía dormir, no podía dejar de pensar en todo lo que había pasado, y sobre todo en la promesa que le había hecho a Jyushimatsu, de escuchar la explicación de Karamatsu.

De repente, Ichimatsu sintió un brazo sobre él.

Jyushimatsu lo había abrazado.

-Ichimatsu niisan, duerme bien, te prometo que todo mejorara- dijo Jyushimatsu, con los ojos cerrados, quedándose abrazándolo.

-Sí- respondió Ichimatsu mientras cerraba sus ojos.

Debía admitir que eso era bastante confortante, y gracias a eso logro dejar de pensar tanto y quedarse dormido.


Ya todos los Matsuno se habían despertado, Choromatsu había tenido algunos problemas con Karamatsu, por lo que no quería estar en la casa.

Salió y Osomatsu lo siguió. En cuanto a Todomatsu, nadie sabía dónde estaba, y no le daban mucha importancia, ya que a Todomatsu no le gustaba que se metieran con sus asuntos.

En casa solo estaban Karamatsu, Ichimatsu y Jyushimatsu.

-Ichimatsu niisan ¿quieres ir al callejón a jugar con los gatos?- pregunto Jyushimatsu mientras se acercaba al de suéter morado, el cual estaba sentado en el suelo.

-De acuerdo- Ichimatsu se levantó desganado.

-Pero antes debo hacer algo, ¿puedes adelantarte?-

-Pero tu eres quien dijo que fuéramos- dijo Ichimatsu al no entender a su hermano menor.

-Es mejor si te adelantas, yo soy muy rápido, así que no tardare en alcanzarte-

-Esta bien- Ichimatsu estaba muy cansado para cuestionar a Jyushimatsu, así que solo salió de la casa en dirección al callejón.

Jyushimatsu volteo a ver a Karamatsu, quien había visto la escena e inmediatamente desvió la mirada fingiendo no haber visto nada.

-Karamatsu niisan- Jyushimatsu lo llamo con su habitual sonrisa en su cara.

Karamatsu volteo un poco asustado.

-¿Q-qué pasa brother?-

-Karamatsu niisan, ¿Qué esta pasando entre tu y Choromatsu niisan?- Jyushimatsu comenzó a acercarse al de suéter azul.

-Es... es una larga historia, pero no es lo que parece...- Karamatsu bajo la mirada.

-Umm... creo que deberías contársela a Ichimatsu niisan-

-No creo que Ichimatsu quiera escucharme...-

-Karamatsu niisan, ¿a ti te gusta Ichimatsu niisan?-

Karamatsu volteo sorprendido a ver a Jyushimatsu, el pensaba que el menor no se daba cuenta de ese tipo de cosas.

-¿Te diste cuenta?- Karamatsu se encogió en hombros -¿Podrías no contárselo a Ichimatsu? si se enterara me odiaría... aun mas-

Jyushimatsu rio para sí mismo.

-Yo puedo ser un tonto, pero Karamatsu niisan es aún más tonto-

Karamatsu volteo confundido por lo que el de suéter amarillo había dicho.

-Ichimatsu niisan no te odia, y jamás va a odiarte, pero él no sabe cómo decir lo que en realidad piensa- Jyushimatsu tomo a Karamatsu de los hombros -El... en realidad te quiere mas de lo que crees, por eso, debes buscarlo y decirle lo que sientes por el-

Karamatsu se quedó callado, no podía creer lo que el menor acababa de decir ¿A que se refería con que Ichimatsu lo quería mas de lo que creía? debía averiguarlo, lo más rápido posible.

-Ya sabes donde esta- dijo Jyushimatsu con su gigantesca sonrisa de siempre.

Karamatsu salió corriendo de la casa para ir a buscar a Ichimatsu.

Jyushimatsu se quedó solo, sonriendo como siempre.

Pero por su mejilla resbalo una lagrima.

"¿Otra vez esto?" pensó Jyushimatsu, la última vez que había sentido un dolor así fue cuando Homura le dijo que se iría.

Otra vez tenía que abandonar el amor que sentía, por su bien y el de otros, otra vez no era correspondido, otra vez tenía que ocultar su tristeza.

Se preguntaba si esto se seguiría repitiendo por siempre, se preguntaba si podría seguir siendo fuerte.

No pudo soportarlo más, Jyushimatsu comenzó a llorar.

No podía detener las lágrimas que salían de sus ojos, no podía mantener su sonrisa.

No entendía por qué siempre tenía que doler tanto.

Pero... todo esto era para que su amado fuera feliz, y por eso valía la pena aguantar el dolor.

Para no pensar en tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora