Parte 4: La primera vez

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4-La primera vez

**Soujun**

Intento contener la risa cuando veo a dos de mis mejores amigos venir hacia mí discutiendo como cada mañana. Kurosaki Isshin e Ishida Ryuken son totalmente polos opuestos y aunque lo saben perfectamente, siguen viniendo juntos cada día a la universidad porque son vecinos inseparables.

-¿Porqué me has dado esa patada, Ryuken? ¡Has sido tú el que te has dormido esta vez!-

-¿Cómo te atreves a decir que es mi culpa? Encima de un maldito shinigami eres un mentiroso-

-¡Ya estamos otra vez!!! ¡¡Que no somos enemigos!!!-

-Ni tampoco amigos- sonrío a Ryuken cuando se detiene frente al mí al visualizarme y veo como carraspea colocándose sus gafas para enmarcar sus profundos ojos azules.

-No sé si sentirme ofendido por ese comentario, Ryuken-

-Tú eres diferente al resto de shinigamis, Soujun. De alta cuna-

-¡¡Jooo!!!! ¡¡No es justo!!! ¡Soujun dile algo!!- Isshin se engancha a mi brazo haciendo pucheros hasta que un chico más alto que todos nosotros aparece a mi espalda y le da un carpetazo a Isshin en la cabeza apartándole de mí.

-¡Auch! ¡Zangetsu tío, eso duele!-

-Mmm.....- miro de reojo a Zangetsu que viene con la misma vestimenta negra desaliñada de siempre. Dejo mi maletín para meterle la camisa por debajo del chaleco oyéndole gruñir un poco molesto.

-No hace falta, así estoy bien-

-Ya llamas mucho la atención por tu altura Zangetsu, no quieras destacar más-

-¡¡Ryuken!! ¿¿Y qué me dices de Zangetsu? ¿Te cae tan mal como yo?-

-Él es un Quincy como yo. Le debo mis respetos-

-¡¡Y una mierda!! Joder Zan, eres un semental ¡me quitas a todos los chicos guapos!-

-¿Pero de qué coño.....?-

-Ya, ya....- tiro del brazo de Zangetsu para que no se enfrente a Isshin que se queda llorando tras Ryuken al cual le va a reventar la vena de su frente. Curiosamente y en contra de los deseos de mi padre, Zangetsu y yo nos hemos hecho buenos amigos desde que compartimos universidad y vecindad. Ambos tenemos la misma edad y somos reservados y callados, aunque yo sonrío mucho más que él. Sé que no se lleva bien con su padre pero le he visto cuidar a sus hermanos con tanto mimo que me derrite. No es que me guste como hombre, pero tiene un atractivo especial. Dioses...desde que descubrí a mis hermanos teniendo sexo no puedo quitarme de la cabeza esta duda...

-¿Soujun?- la voz ronca de Zangetsu me obliga a mirarle y sonreírle. Realmente es un chico guapo, con sus ojos profundamente negros y la barba recortada que enmarca su juvenil y hosco rostro. Se parece mucho a su padre salvo porque Zangetsu tiene el pelo castaño y ondulado y Yhwach, negro y largo liso.

-¡Ey tortolitos esperadnos!! ¿No habéis oído lo de la fiesta de bienvenida de este año?-

-Isshin, no empieces...-

-¿A qué os referís? ¿Qué fiesta?- Zangetsu y yo estamos estudiando el primer año de universidad, repitiendo por razones personales. Él por mudarse de país y yo por haber estado cuidando de mis hijos. Nuestros amigos están en un curso superior y conocen bien las normas del campus.

-¡Es una flipada! Hay un baile, bebida por doquier, sexo libre... ¡la universidad está para hacer locuras y descubrir lo que te va!!-

-Nos hacemos una idea de qué es lo que te va- Zangetsu mira de reojo a Ryuken e Isshin se pone rojo agitando las manos.

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