Tan delicada como las flores que tanto cuidaba.
Tan bella como aquella rosa blanca a la cual su atención se desviaba; lista para abrir sus pétalos y mostrar un nuevo lado de belleza.
El de cabellos claros no podía alejarse de ti por más fuertes sus deseos de cuidarte aumentaban.
Él sabía que era un peligro, que en cualquier momento podría lastimarte con su fuerza, que en cualquier momento correrías a los brazos de alguien más y lo dejarías solo.
Su corazón inhumano golpeaba contra sus costillas ante tal pensamientos.
— Subaru?
Parpadeo un par de veces antes de sonreír; mirando a la femenina a su lado.
Bajo las estrellas de la fría noche, un libro en su regazo y el abrigo de él en sus hombros.
— Gracias por ayudarme a estudiar, pero tengo que volver a clase - susurró con algo de timidez.
La muestra de vida siendo presentada en aquel rubor en sus mejillas.
Subaru asintió, levantándose de su lugar y extendiendo una mano hacia ella. Sintiendo su calor emanar y recorrer su cuerpo ante el contacto como un vicioso deseo.
— Subaru -
Su nombre caía de sus labios como un hechizo, inundando los pensamientos del mencionado y dejándolo estático en su lugar.
La femenina sonrió ladina, estirando su cuerpo hasta estar a centímetros del albino y conseguir su objetivo; uniendo labios con él por primera vez en tanto tiempo.
Cerrando los ojos mientras sus manos se abrían y cerraban, buscando como recuperar el control y no empujarla contra el árbol y tomarla en segundos.
— Si tienes algo que decirme... puedes hacerlo~
Mordiéndose el labio, el albino dejó que sus pensamientos tomaran control.
La femenina contra el árbol, una de sus piernas elevadas por una de sus manos mientras su rostro se deleitaba con su clavícula.
Lamiendo uno que otro lugar antes de morder lentamente, escuchando suaves gemidos por parte de la contraria, incitando más acciones de su parte.
Su cadera empezando a moverse en rotación, buscando una fricción tan sensual y deleitándose en las uñas de la femenina enterrándose en sus hombros.
— Tomaré lo que es mío, (...) - gruñó con desesperación, sintiendo lo mojada que la nombrada estaba con solo unos minutos de haber empezado — Y lo disfrutaras cada segundo~