CAPÍTULO 4. -LÍMITE RECUERDOS: CONFRONTACIÓN-

6 0 0
                                    

- Joven – dijo Sion con desánimo sin saber que más decir, lo que causó en mí, desagrado e insatisfacción.

- Simplemente estoy cansado de todo esto – dije molesto- no entiendo nada de lo que esta pasando, y ahora esa cosa está tratando de eliminarme. ¡Explícame por qué está pasándome esto!

- Tranquilo joven – dijo con serenidad

- ¡No! – interrumpí - ¡La vida que quería está muy lejos de mi alcance! Todo por una decisión que no recuerdo haber tomado. No importa si intento mantenerme ajeno a esto, cada vez, ocurren situaciones más extrañas y tú sigues ocultándome la verdad. Sion, quiero saber todo referente a este límite.

El anciano agachó la mirada y reflexionó un momento sobre qué decir. Seguramente escogió las mejores palabras para decorar su respuesta y que no impactara negativamente en mí. Tras unos segundos me miró con completa convicción.

- Esa creatura es uno de los efectos secundarios de los que te hablé – dijo seriamente- Ellos buscan eliminarte.

Desde que escuché a esa creatura decir: "matar" lo tuve en mente, sin embargo, que Sion lo afirmara me puso demasiado tenso. Muchas emociones seguían confrontándose en mí; ira, tristeza, desesperación e impotencia por mencionar algunos. ¿Qué podía hacer en ese punto?

- ¿Por qué busca matarme? – pregunté sin ninguna expectativa.

- Hay seres que cuidan de los límites, nunca los he visto pero su función es mantener un equilibrio en el mundo. Tu al ser humano con una capacidad diferente y superior al resto de tu especie, es posible que representes una potencial amenaza e intenten eliminarte – explicó.

- Así que no tengo alternativa ¿verdad? – pregunté esperando que contestara la mentira que quería oír en lugar de la cruda, pero honesta verdad.

- Tienes que pelear si quieres sobrevivir – dijo en seco.

- Supongo que esas marcas en mi cuerpo, son para pelear – dije con desdén y resignación. Nunca había sido fanático de peleas, ni me consideraba lo suficiente fuerte o habilidoso como para participar en una y ahora mi vida dependía de eso.

- Si – dijo el anciano – mientras tengas esas marcas, serás poseedor de habilidades y poderes que te servirán para la batalla, y tus heridas sanarán, por lo que no morirás fácilmente.

- Maldita sea – dije para mi mismo con impotencia- ¿por qué tu no puedes intervenir?

- Soy el guardián del límite de los recuerdos – dijo – no tengo permitido hacer algo más allá de mis responsabilidades como tal.

Sus palabras me irritaron bastante, principalmente porque él era la razón detrás de todo el alboroto en el que mi vida se encontraba. Que saliera ahora con que no puede hacer nada, se me hacía una ridiculez después de que él me dio la habilidad de entrar al límite, de ver los recuerdos, esas marcas rojas en mi cuerpo y que hasta ahora me había incitado a usarlos.

- Dime Sion – dije molesto - ¿Qué ganas con todo esto?

El hombre se sorprendió con mi pregunta. Se quedó callado un momento y miró con confusión.

- Si lo que buscas es un sucesor, lamento decirte que no. No quieras tomar ventaja de mi inocencia y confusión para engañarme- dije en un tono poco amistoso, manteniendo la idea que tenía del motivo por el que me había dado ese "regalo".

- En realidad - dijo Sion con simpleza- no obtengo ningún beneficio.

- ¡Mientes! – grité – nadie ayuda a otro si no tiene alguna recompensa, dime ¿qué obtienes de todo esto?

- Ya lo he dicho.

- Y no lo creo – continué – Dime que ganas con esto Sion- terminé exigiendo.

El anciano soltó un suspiro.

- Tu estabas vació cuando me pediste ayudarte con tu deseo – explicó- vacío, pero querías seguir viviendo. Yo estoy igual que tú; tal vez podremos encontrarles un sentido a nuestras existencias a través de esto.

- O bien, puedo perder la vida en el proceso – dije con desprecio – ¡Tú no tienes nada que perder, pero yo podría perderlo todo, sólo por tu curiosidad!

- No te pareció una locura cuando te lo propuse – agregó.

No podía escapar de mi pasado. Sin recordar mucho de él.

Tantas dudas invadían mi mente y las respuestas parecían que no llegarían, así mismo, no tenía intención de recordar. Aunque era difícil, no podía avanzar y superarme, porque seguía siendo preso de las decisiones de mi pasado.

Rechiné mis dientes y apreté mis puños, la decisión que debía tomar no me agradaba para nada, pero sabía que era la única decisión.

- Voy a sobrevivir Sion- dije tan inseguro como decidido- De alguna forma seguiré viviendo hasta que esto acabe y pueda mantenerme ajeno.

No podría cambiar mi pasado, si quería avanzar tendría que hacerles frente a las consecuencias de las decisiones que tomé, por muy contradictorias que fuesen a mis deseos.

- Esa cosa – dije con curiosidad – ¿puede atacarme en todo momento?

- No joven – dijo con serenidad – esa cosa sólo puede estar en los límites.

- Menos mal – agradecí en un suspiro – pero esa cosa forzó la entrada al límite, a mis recuerdos....

- Esas creaturas – dijo interrumpiéndome- sólo pueden moverse libremente entre los límites, es muy raro que entren al mundo real; no he visto casos así y créeme que he vivido bastante.

Solté un suspiro.

- Realmente no quiero participar en esto – dije con suma tristeza, conteniendo mis lágrimas - ¿Tú sabrías que esto pasaría? ¿Qué sería perseguido, que mi vida común y corriente terminaría?

El anciano se acercó y posó su mano en mi hombro.

- El futuro es demasiado incierto, tiene múltiples caminos y ninguno nos hace sentir lo suficientemente seguros – se detuvo un momento, tal vez al ver la desilusión en mi rostro o el llanto desbordarse en mis ojos- pero sólo avanzamos por el camino en el que más creemos. En el pasado tú creíste en la decisión que tomaste, y ahora, estás a punto de continuar guiado por tus ideales.

- Lo llamaría más miedo e inseguridad – dije sin importarme sus palabras de ánimo.

- Pero sigue siendo el camino en el que más crees – dijo Sion sabiendo que tenía razón.

En ese momento, sabía que mi tristeza no desaparecería y no serviría de nada seguir llorando. Me pregunté ¿por qué estaba siendo sentenciado por querer encontrarle un sentido a mi vacía vida? 

LÍMITE: RECUERDOSWhere stories live. Discover now