first time: ii

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Octubre se alzó esa mañana con la fuerza de un mes que apenas comenzaba, pero el mundo no parecía recordarlo, aún hacía calor, muchísimo calor y para Wonwoo la multitud y su capacidad para no ubicarse bien lo hacían un poco peor.

Ese día está hecho el manojo de nervios más grande del mundo y todo a su alrededor se magnifica dentro de su cabeza como el sonido de una transmisión de cable cortada, con cada paso las sensaciones se van magnificando pero cuando consigue la salida correcta y el aire abandona completamente sus pulmones, todo se queda en calma como nunca antes en su vida.

La cabeza se le vuelve un lienzo tranquilo y en blanco, la imagen de Mingyu comienza a ser pintada poco a poco en él y se plasma completamente cuando sus brazos por fin llegan a su cuerpo. Un abrazo, el primer abrazo y se siente como llegar a una casa donde siempre le estuvieron esperando, una suya.

Nada ni nadie puede cambiar lo bien que se siente en ese momento. Ni siquiera un compañero de paseo ligeramente amargado.

La forma en que su mano y la de Mingyu se entrelazan para comenzar a caminar le hace cuestionarse todo lo que ha sentido en su vida respecto a la memoria sensorial de su piel. No es un sueño pero es tan fácil y tan real que se permite redefinir lo que significa un "sueño hecho realidad". Todas las sensaciones y sentimientos hermoso dentro de él se están volviendo sueños hechos realidad o la realidad haciendo sueños o el contacto de su piel y la de Mingyu creando deseos que siembran sueños. Sueños hermosos.

Obvio sigue nervioso, con el miedo de que le sude la mano que Mingyu no suelta en ningún momento, apenas y puede hablar, no deja de mirar fijamente a Mingyu, pero a la vez todos esos nervios son tan diferentes y hasta tranquilos en su cabeza, ¿acaso esto es sentirse nervios correctamente? se siente hasta muy lindo.

Mingyu es calma en medio de la agitación.

La percepción de todas las cosas se vuelve distinta, menos abrumadora y su corazón solo tiene la tarea de latir como si latiera por Mingyu únicamente.

Esto tiene que ser la cumbre de las sensaciones mientras estás enamorado, piensa Wonwoo mientras ve el rostro de Mingyu, no puede dejar de observarlo, de buscar todo de él, de grabarlo en su mente expuesto al sol, al mundo, uno donde se sostienen de las manos.

Es la cumbre de lo que se siente estar enamorado, las cosas de siempre se sienten totalmente diferentes pero se sienten como si conociera esas diferencias de toda la vida. Es correcto y natural, podrán sonar a dos palabras muy simples pero existir en la realidad de siempre y redescubrir eso como experiencias nuevas, con sensaciones nuevas se siente tan naturalmente hermoso.

En palabras cursis, las favoritas de Wonwoo desde que está enamorado, en esas palabras lo puede describir como que la mano de Mingyu fue hecha para encajar con la de él.

Cada uno de sus sueños de los últimos meses se le hace realidad en cada paso que dan al caminar, al pasear por una ciudad que no es la suya, ni la de él, pero que tal vez es correcto decir que ahora es la de ambos, esa ciudad llena de turistas y hermosa a donde la mires es de ambos.

Hay otro sueño más, que pulsa como deseo fuerte en Wonwoo, del que ya le ha hablado mucho a Mingyu, haciéndole más claro múltiples veces que es un deseo que se muere porque se cumpla.

Pero ya no cree que el destino y la naturalidad sean suficientes para detener a su boca y palabras deseosas, bajitas, llenas de ganas bonitas. Quiere un beso y lo pide y tal vez así es que se tenga que dar y puede que sí sea natural, lo mas natural hasta ahora porque lo desea con su voz en alto.

—Quiero un beso —le dice a Mingyu mientras se aferra un poco más a su mano, mientras esperan que el semáforo cambie de color para atravesar el paso de cebra, cuando apenas han pasado unos veinte minutos desde que se han visto por primera vez en persona.

El mayor le sonríe preciosamente, Wonwoo se siente besado de otra forma con solo esa sonrisa pero aún así se vuelve mejor y el mayor junta sus labios con los de él. Dura un segundo y Wonwoo casi deja los labios paraditos esperando a que fuera más largo, pero fue perfecto. Su primer beso con Mingyu se sintió perfecto.

El semáforo por fin cambia de color y comienzan a avanzar, Wonwoo no puede dejar de pensar en ese beso y como lo ama y como si es posible siente que su amor por Mingyu se acaba de triplicar.

Fue el segundo más hermoso de su vida y su mejor primer beso. Lleno de amor y como de pintura. Ambos enmarcados en medio de una ciudad preciosa, en medio de una multitud, con manos entrelazadas y compartiendo un primer te amo mudo a través de un beso.

El primero de muchos pero uno de los más especiales.

木枯らし (kogarashi)  ; meanie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora