El calor de verano se comienza a apagar a medida que caen las horas junto al sol. El sitio al que los lleva Google Maps queda en una esquina, mucho más cerca de lo que esperaban, lo cuál es mejor así no los atrapa el frío nocturno veraniego ni se les hace muy tarde para subir al piso. Todo pinta bien para comer waffles. Los primeros de Wonwoo en toda su vida, de verdad, aunque suene una locura nunca antes ha probado eso tan delicioso pero eso sí, siempre que los ve se le hace agua la boca.
Se alegra mucho de conservar esa primera vez para compartirla con Mingyu.
El pequeño local es de ambiente abierto y a Wonwoo le fascina eso, todo se arregla muy bonito para su primera vez junto a los waffles y no sabe muy bien a qué saben, por supuesto, porque nunca los ha probado, pero ya se imagina el sabor e intenta guardarse tanta emoción cuando se acerca junto a Mingyu a pedirlos o mejor dicho, a que Mingyu los pida por ambos, es que a él le da vergüenza eso de hablar con extraños... o cualquiera y su Mingyu es tan bonito como para hacer el pedido mientras él solo asiente a sus preguntas.
Cuando el mayor los termina de ordenar le da esa sonrisita que tiene solo para él, donde la curva de su sonrisa se ve tan hermosa que le causa cosquillas en el estómago a Wonwoo.
Y ya luego sentados uno frente al otro en aquel bonito y pequeño lugar, no tienen que esperar mucho por sus waffles, en unos minutos están ahí calentitos para ellos. El plato de Mingyu se ve más colorido, naturalmente gracias a las frutitas de las que viene acompañado su waffle y el de Wonwoo luce más normal pero su boca está hecha agua a más no poder.
El ambiente se pone tenso-cómico por la espera a que de su primer bocado y Wonwoo quiere reír casi tanto como quiere perforar su waffle con el cuchillo y tenedor para ir a por ese primer pedazo.
—Quiero ver tu reacción —le dice Mingyu y suena tan tierno como es usual en él.
Y pues ya, con eso Wonwoo no necesita esperar más.
Pica de aquel trozo de harina en forma tan coqueta otro trozo pequeño y se lo lleva a la boca sin más.
Los ojitos de Mingyu no se despegan de él, esperando impacientemente por su respuesta.
Dios mio, tan precioso piensa Wonwoo mientras a su vez saborea el waffle. Y no lo piensa solo por Mingyu, aunque no hace falta aclarar mucho que la mayor parte de su pensamiento se debe a él, lo piensa también porque el sabor del waffle se siente así.
Precioso.
Precioso.
Exageradamente precioso y como lucecitas de bengala de ricura en su paladar y cuando lo traga quiere ir a por más pero tiene que soltar unas palabras primero.
—Oh por Dios.
Y se expresa de lo rico que es y casi parece que Mingyu no se puede creer que le guste tanto pero es así. Es una de las cosas más ricas que ha probado y eso que en ese país donde están se han empeñado en llamarlo por un nombre que hace que uno piense en cosas no deliciosas.
Pero los waffles son extremadamente ricos y la sensación en su boca junto a la alegría de Mingyu por verlo disfrutar de su waffle hace que todo sea mejor e inolvidable. Y ver al mayor combinar sus bocados con trocitos de fruta en cada trozo, es lindo, y él embarrando cada uno de sus bocados es lindo también y su estómago se lo agradece muchísimo.
Y para Wonwoo ya lo dorado de un waffle no se debe a una cocción sino a que es comida de oro que sabe a lo mejor de lo mejor.
Y todo es bonito y no hubiera sido tan bonito si no hubiese esperado a que Mingyu lo llevara a su primera vez con waffles.
Que lo lleve a todas sus primeras veces si serán tan bellas, por favor.
ESTÁS LEYENDO
木枯らし (kogarashi) ; meanie
Fiksi PenggemarLa calidez del amor derrite la nieve y el invierno cultiva las raíces de primavera. El viento frío se anuncia pero los enamorados siguen yendo a la playa. conjunto de drabbles y one-shots; aclaración: mingyu es mayor que wonwoo en los drabbles